💚✧⁠* - ¿ꂵ꒐ꇙ꒐ꄲ́ꋊ ꒐ꂵꉣꄲꇙ꒐ꃳ꒒ꏂ?

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Este es un cap corto, pero igual espero que les guste ^^



Pov. Cole.

-Che -susurró Cole.

-¿"Che"? -contestó Jay. De milagro lo escuchó-. ¿Ahora eres argentino o qué?

-Shh.

-Oye, no se escucha nada, hombre. Los demás parecen muertos cuando duermen. En especial Zane...

-¡Jay!

-... Y tú haces más ruido que yo.

-Cállate, Jay. ¡Escucha!

-¿Pues qué pasa?

Jay puso pausa a su juego y dejó el control a un lado. Luego volteó hacia atrás para encontrarse con algo que lo dejaría sumamente sorprendido.

-¿Cuándo llegó él aquí? -Jay señaló a Lloyd.

-Eso no importa. Se durmió.

-¿Y?

-Y no sé qué hacer.

-Pues... llévalo al cuarto. ¿Querrás que te ayude? Quiero volver al juego, ¡casi subo de nivel!

Cole miró al niño.

Los primeros días de estar con él, le daba miedo. Tal vez era por ser el hijo del villano más temido de Ninjago, que podía matarte con un solo movimiento; o tal vez fuera por su expresión feroz. A veces sí daba miedo. Cuando se enojaba, Cole casi podía notar un brillo rojo en sus ojos.

Ahora, dormido en la barra con chocolate en los labios, casi parecía un niño normal, uno... inocente, en realidad. Uno que no hubiera querido... ¿Qué había querido en realidad?, si los hubiera querido matar ya había tenido muchas oportunidades. Y no lo había hecho. Cole bromeó y se preguntó si tenía que agradecerle eso.

Fueran cuales fueran sus intenciones, ahora ya no parecían ser malas. Pero había aprendido por Lloyd que no se puede confiar en nadie; la cara de decepción de él cuando los serpentin lo echaron le había dejado bien en claro que había aprendido de una mala manera cómo engañar a alguien. Si algo le habían enseñado ellos, era la mentira. Y si la estaba usando ahora, no convenía mucho acercarse a él y mostrar debilidades, como Zane ya lo había hecho.

Bueno, eso pensaba Cole. Kai y él habían mantenido una conversación el primer día, y habían llegado a esa conclusión.

Pero, ahora mismo, Cole sintió compasión de Lloyd.

Debía moverlo a su cuarto, ¿no? Bueno, "su cuarto", el general.

Primero, dio dos golpecitos a su cabeza con su dedo. Lloyd sólo frunció el seño y se movió, pero luego relajó su expresión para volver a dormir.

-¿Qué haces? -se burló Jay.

-Tú vuelve a tu juego, bobo.

-No, ya me voy a dormir -Jay bostezó-. Ahora sí tengo sueño.

-Bien, pues ayúdame.

-¿A qué?

-¡Ay, Jay!

-Aaah. Pero yo no puedo ni cargar el garrafón de agua. Te toca a ti.

-Siempre me toca a mí.

-Y lo haces excelente, amigo.

Y Jay se fue, dejando el control en el sillón y la televisión prendida.

Cole resopló. Apagó la televisión y lavó los platos del pastel para que nadie se diera cuenta de que habían estado allí. Luego prosiguió a pensar cómo movería a Lloyd sin despertarlo. ¿Se pondría de mal humor como Kai cuando se despertaba temprano? Esperaba que no.

💚 ° 𝙻𝚕𝚘𝚢𝚍 𝙶𝚊𝚛𝚖𝚊𝚍𝚘𝚗. . . Donde viven las historias. Descúbrelo ahora