💚 ° 𝙻𝚕𝚘𝚢𝚍 𝙶𝚊𝚛𝚖𝚊𝚍𝚘𝚗. . .

💚✧⁠* - ꅐꁝꋬ꓄'ꇙ ꌦꄲ꒤ꋪ ꋬꋊꇙꅐꏂꋪ?

Kai se quedó con Lloyd hasta que el abogado llegó.

En realidad, a todos les sorprendió ver lo joven que era; tenía unos vientitantos años de edad, y, de hecho, parecía estar jugando a ser un abogado en lugar de serlo. De hecho se veía tierno con su traje de gala y su peinado bien hecho, aparte de un portafolio en la mano. Era bastante educado, eso sí.

Habría sido divertido de no haber sido por que el destino de Lloyd dependía de él.

Como sea, el joven, que se presentó como Joe, habló muy poco con los ninjas antes de entrar a la habitación de Lloyd. Joe le pidió a Kai que saliera, a lo que obedeció más a regañadientes que nada.

¿Qué era tan importante que tenía que hablar a solas con el niño?

Vale, vale; esto era importante.

En cuanto Kai salió -no sin antes echar un último vistazo- Joe se presentó a Lloyd. Él estaba nervioso por lo que debía decir. Sólo la verdad. A veces no le gustaba decirla. A veces las mentiras se le salían sin pensarlo, sobre todo cuando estaba enojado. Y por supuesto que ahora lo estaba. Se encontraba en un lugar desconocido, se sentía enfermo por dentro y por fuera, y encima debía de serle totalmente sincero a una persona que ni siquiera conocía y que en cualquier momento podía usar lo que dijera en su contra.

Esta vez debía de esforzarse por no mentir para nada. Su futuro dependía de Joe, por muy joven que fuera.

-Voy a grabar esto -le dijo Joe al sentarse en donde hace unos segundos estaba Kai-. Tranquilo, es parte del trabajo, ¿de acuerdo?

Lloyd asintió con la cabeza.

-Bien, ¿cuál es tu nombre? -comenzó.

-¿No... le dijeron los demás? -dijo Lloyd.

-Sí, pero es importante tenerlo grabado.

Lloyd lo pensó antes de responder.

-Lloyd.

-¿Completo?

-Lloyd Montgomery Garmadon.

-¿El apellido Garmadon es de tu padre?

Lloyd asintió.

-¿Y Montgomery?

-No sé si sea nombre o apellido...

-Bien, no te preocupes. ¿Qué hay de tu madre?

Lloyd se encogió de hombros. Odiaba hablar sobre su familia.

-¿No la conoces? -dijo Joe.

-De pequeño lo hice, supongo

Lloyd no lo miró a los ojos.

-¿Qué edad tienes, Lloyd? -continuó Joe.

Lloyd pensó en bromear, pero ahora no estaba de humor.

-Nueve.

-¿Y estás seguro sobre eso?

-Sé la fecha de mi cumpleaños. ¿Por qué es importante?

-Para saber cuánto es que sabes de tu pasado, y así ayudarte. Tal vez el caso se trate sobre el futuro, pero primero debemos conocer tu pasado.

-No entiendo.

-No te preocupes. Sólo hay que responder las preguntas y podrás seguir con tu amigo, el de traje rojo.

-Kai.

-Sí. Dime, ¿de dónde conoces a tus amigos?

Oh, oh.

La temperatura pareció ascender poco a poco.