MI NOVIO EL VAMPIRO/ YAOI/HYUNSAENG/SS501

36

Hyun Joong

Terminamos besándonos sobre el sillón, Young Saeng arriba de mí, beso su cuello, su oreja y regreso a sus labios nuevamente, después de unos minutos nos separamos y sonreímos.

—Young Saeng, me tengo que ir. —Le susurré.

—Quiero que me lo hagas. Te extraño bastante Hyun Joong.

Sonreí y besé su mejilla. —Ya tendremos tiempo para eso, quiero que te concentres en ti, me pediste tiempo y te lo daré, por eso mismo he decidido no venir a buscarte, búscame cuando quieras finalmente quedarte conmigo para siempre. Ten una cosa en tu mente siempre: de ahora en adelante nadie nos va a separar y tampoco a hacerte dañó y te prometo que nunca te voy a volver a ocultas cosas o hacer las cosas pensando en mí.

Besé su mejilla y se quitó de encima de mí.

Él sonrió.

—Gracias por entender.

Negué. —Gracias a ti por darme otra oportunidad, sabes dónde buscarme cuando estés listo, pero buscame cuando no llores, no sé vale buscarme estando llorando, cuando dejes de hacerlo, estarás mejor.

Estaba por irme, pero me detuvo. Lo miré a los ojos. —Perdón por haberme ido así, y perdón por matar a tu hermano.

Tome sus manos y negué.

—La muerte de Kyu Jong es algo que iba a pasar. Todos lo sabíamos y sobre irte, no estabas bien y aunque me dolió demasiado que me dejarás, creo que era mejor a que nos hiciéramos más daño, lo importante es que dejemos ese tema atrás y no volver a hablar de eso. Young Saeng tienes que a ir soltando eso poco a poco, cuando finalmente lo dejes ir, estarás listo para empezar otra vez.

Besé sus mejilla nuevamente. —Te amo, si te sientes solo y quieres compañía, puedes llamarme y vendré a ti sin dudarlo. Solo así podemos vernos, pero no tener relaciones.

Young Saeng se rio y asintió. —Gracias, no sé cómo olvidé que eras un gran hombre.

Negué. —Ni lo digas, bueno, me voy, quedé de ir con mi padre. Ya sabes que hacer, búscame, estaré ahí.

Me fui sin ver atrás, quería que me dijera que todo estará bien, que me quedara para estar con él y no estar solo, pero sé que quiere aprender a estar solo aunque no lo está. También tiene que dejar ir lo que le pasó, sé que es difícil hacerlo. Quería ayudarlo, pero entiendo y se perfectamente que quiere hacerlo el solo. Así que se me ocurrió algo.

Llegué a casa de Jung Min, fui hasta su cuarto en dónde estaba con Hyung Jun platicando. Ambos me miraron.

—Necesito que me ayuden a ayudar a Young Saeng, conozco a un grupo de personas que van a platicas y cuentan lo que les pasó.

— ¿Un grupo de ayuda? —preguntó Jun.

—Si, eso, ¿Me ayudan?

— ¿Y por qué no sé lo dices directamente? —me preguntó Jung Min.

—Porque no quiere mí ayuda, quiere hacerlo él solo, pero quiero ayudarlo sin que lo sepa. ¿Me ayudan?

—Sí —respondieron ambos y sonreí.

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Tres meses después

Me deje caer en la cama de Jung Min triste. —Han pasado tres meses y no me busca. No pensé que tardaría tanto.

—Sabes bien que tardaría mucho para aceptarte nuevamente, por eso te dijo que necesitaba que tuvieras mucha paciencia. —me dijo Jung Min doblando la ropa.

—Sí, pero creí que sería solo unas dos semanas.

—Young Saeng estaba entrando en depresión y necesitaba salir de eso, va muy bien, además no sabe todavía que tu lo ayudaste, ir con ese grupo de ayuda le sirvió muy bien, estoy seguro que falta poco.

Voltee hacía Jung Min

— ¿Te ha hablado de mí?

Negó —Ni siquiera te menciona.

—Tal vez se dio cuenta de que ya no me ama y por eso no me busca.

Me tiro la almohada en la cara. —Que ridículo eres, ten paciencia, Young Saeng te extraña, estoy seguro. Necesitaba estar solo, él te lo dijo, no sigas con lo mismo.

—Tú ya vives con Jun y yo todavía no.

—Cambia de tema ¿Quieres? —dijo un poco molestó.

—Hoy me iré a New York con mi padre. Esta noche. Regreso en dos semanas.

— ¿A que van?

—Su esposa se fue un tiempo, después de la muerte de Kyu Jong ella no quedó bien, pero supongo que está mejor, aunque no quiere volver aquí. Y mi padre irá y vendrá seguido, tiene trabajo aquí, pero también allá así que iré a hacerme cargo de unas cosas, quiero hablar con su esposa. Espero no me odie.

Jung min se quedó callado. —Mucha suerte.

—Gracias, dile a Young Saeng que regreso pronto.

—No soy tu mensajero. Pero esta bien, lo haré.

Nos reímos.