EL TRATO (USA X PERÚ)

XLII. Terapia... otra vez

¿Cómo se saludan los colores en ingles?
Yellow!

*cri, cri*

Ush, son tan difíciles de hacer reír, si un chiste bobo no te levanta el animo entonces no tengo más que ofrecer más que un abrazo, pero como no los conozco ni sus hábitos de higiene pues se muelen con mis chistes culeros  >:v

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Perú espero en la sala de espera por un tiempo, por lo general, solía llegar justo a la hora para evitar la espera, pero justo el camión había sido lo suficientemente rápido y eficiente como para dejarlo frente al consultorio con minutos de sobra.

Su pierna se movía nerviosa, deseando apresurar el tiempo, no para descargar todas sus frustraciones, miedos y nieblas mentales, sino para regresar a casa y pensar en cómo distraer a su familia y no morir en el intento.

La puerta se abrió y salió una mujer alta, negra y de facciones atractivas, con grandes aros dorados colgando de sus oídos. Se miraron e intercambiaron un incómodo saludo antes de que ella saliera con prisa. Perú todavía tuvo que esperar otros cinco minutos antes de que Austria lo llamará.

-Hola Perú- lo saludo amable el terapeuta apenas entro al consultorio.

-Hola, ¿Qué tal doc?- pregunto con una sonrisa incomoda.

-Todo bien, sin quejas- respondió él- ¿y tú? ¿Cómo estás?

Perú suspiro y su sonrisa se tabaleo. "Pues, ¿Qué le digo? Estoy tratando de fugarme de mi casa para ir al otro lado del mundo en búsqueda de un estúpido alfa hijo de la concha para matarlo a golpes, ah! y todo sin que mi familia se entere; de paso, conquistar el mundo, ya sabe, lo de todas las noches"

-Con estrés- respondió corto, abrazando la almohada.

-Entiendo, por teléfono me comentaste que habías tenido por segunda vez tu celo en este mes- Por supuesto que Austria querría hablar de eso y Perú se alegraba de que así fuera, pues así no terminaría revelando su plan a la persona que podía leerlo con la mayor facilidad del mundo.

-Si, fue... extraño- reconoció con el entrecejo fruncido-. Colombia, mi hermano, uno de los mayores, dijo que fue a causa del estrés por la escuela.

-Él esta estudiando medicina, ¿correcto?- Austria trató de hacer memoria del extenso árbol genealógico del peruano.

-Si.

-De acuerdo, pero, eso es lo que él cree, ¿y tú? ¿concuerdas con él?

-Pues... si la he tenido difícil- admitió a medias. Si su segundo celo era a causa del estrés, no necesariamente debía ser el de la escuela, intuía que todo este caos se debía a ver a México cada vez más débil; a las mentiras que salían de él como agua de fuente y a la presencia de cierto gringo.

-No suenas muy convencido- observo Austria. El silencio se instauró entre ellos, solo que no era el típico silencio obstinado del menor, sino que era uno de confusión y ansiedad. El terapeuta intuyó que había algo que le estaban ocultando y que ni siquiera Perú era capaz de ponerlo en palabras-. Cuando se trata de estos casos, a veces nuestros omegas son los que tienen la respuesta. Perú, en este celo ¿tu omega sintió algo?

Perú abrió mucho los ojos y se aferró aún más al cojín, con las alarmas sonando a mil por hora en su cabeza, buscando alejarlo a él y a Austria de la maldita caja fuerte. No, no estaba listo para abordar ese tema y nunca pensó que tendría que hacerlo tan pronto.

Austria enarcó una ceja, extrañado de ver el gesto de pánico en el menor, pero, también, de notar sus mejillas adquirir un tono carmín. Aún así, no se tentó el corazón, por lo que decidió presionarlo un poco más.