-Bro, ¿estas bien? -
-¿Eh?
-¿Qué si te encu...?
Canadá se mostró confundido al recibir un abrazo de su hermano. USA no era mucho de abrazar a las personas.
-Canadá, que bueno que estas bien, perdón por desear que estuvieras muerto, eres un buen hermano, juró que dejaré de imaginar tu muerte. Yo estaba tan asustado, ¿y Perú? Espera... ¿Do-donde estoy?-
USA empezó a mirar desesperado alrededor, poco a poco los pilares altos, los setos, el césped bien cuidado y las escaleras blancas que conducían al interior de una casa grande y elegante le empezaron a ser familiares.
Fue entonces que se percató de que estaba en el patio trasero de la casa de sus padres. ¿Cómo llegó ahí?
Él estaba en una montaña, rodeado de nieve, con su hermano y Perú. Un agudo dolor en su costado lo hizo gruñir, era como si lo apuñalarán. Más no tenía tiempo para eso.
-¿Y Perú?- pregunto en un quejido- ¡¿Dónde estás?! ¡Responde! ¡PERÚ! ¡PERÚ!- empezó a llamarlo a gritos, importándole poco el gesto confundido de su hermano. Sin pensarlo, corrió dentro de la casa, tratando de localizar a Perú y sin dejar de gritar su nombre a todo pulmón.
Aquí estoy, aquí estoy.
Dios, esa era su voz, sonaba angustiada, debía estar cerca ¿pero dónde? Intento olfatear el aire, pero no podía captar su olor. Como un loco empezó a dar vueltas en la cocina y sala, intentando en vano olfatear o, siquiera, volver a escuchar la voz del latino.
-Big Bro, ¿me ayudas con mi tarea?- una voz infantil le dio un susto de muerte.
-¿Nueva Zelanda?- miro a su hermanito con confusión.
-Obvio, él inigualable yo jajaja, ¿entonces si me ayudas?- el niño casi adolescente se acercó a él con un cuaderno en la mano y frenillos en su infantil sonrisa.
Asustado y todavía más confundido, el alfa rubio retrocedió y volvió a correr al patio.
Canadá estaba sentado en el pasto, recostado sobre su espalda y observando el cielo.
-Ven, debes descansar- lo invitó a tomar asiento a su lado-, estar tan alterado puede complicar las cosas.
USA iba a responder a la versión joven de su hermano, pero otro pinchazo en el costado lo hizo gemir. Era tanto el dolor que termino encorvado y sin aire.
-Te dije- Canadá se levantó y le dio palmadas en la espalda-. Duerme, te sentirás mejor.
-Yo, no, tengo tiempo para esto- masculló entre dientes-. Debo encontrarlo ¡PERU! ¡RESPONDEME!
Necesita ayuda, ¡debemos apurarnos!
Ahora su voz se escucho más alejada y angustiada. ¿Dónde diablos estaba su omega? La idea de que estuviera en peligro, con ese maldito bastardo apuntándole con un arma lo hacía sumergirse en un mar de ansiedad. No tenia tiempo para perderse en los recuerdos de su memoria o lo que fuera que estuviera pasando en ese momento, él tenía que ayudar a Perú.
-No, no, no, no- el americano estaba que se quería arrancar los pelos de la cabeza- No tengo tiempo para esto, tengo que encontrarlo ¡Despierta de una puta vez!
Solo que su pataleta le hizo gritar más fuerte. Maldición, sentía su costado izquierdo doler como el infierno.
-Deja de hacer eso, debes descansar. Ese estúpido ruso te rompió las costillas, el médico dijo que debías guardar reposo absoluto- lo regaño su hermano.
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EL TRATO (USA X PERÚ)
RomansaPerú es un omega que tratará de salvar a su hermano México después de que fuera mordido por un alfa y abandonando, para ello recurrirá a la única persona que podría ayudarlo. *Imagen de portada no es mía, créditos a su autor* Bueno... pues será una...