EL TRATO (USA X PERÚ)

XXII. Los engranes empiezan a moverse.

Había pasado ya una semana desde la última vez que miro al peruanito. Desde el incidente del celo, se había abstenido de contactarlo, silenciaba sus mensajes y mandaba a buzón las llamadas. Incluso había dejado de ir a la oficina para atender todos los asuntos desde su apartamento.

¿Se arrepentía? No estaba seguro. A veces se sorprendía fantaseando con el pequeño omega, con sus ojos, su cabello, su pecho moreno y su redondeado trasero, más todas sus fantasías terminaban con la mismas preguntas: ¿Por qué lo había golpeado? No lo entendía, ¿acaso no es el sueño de todo omega la atención de un alfa? ¿y más uno como él? Comprendía que su actuar no había el mejor, incluso él mismo se reprochaba, pero simplemente no concebía la idea de ser rechazado.

Además, ¿qué estaría haciendo? Después de la cena con la familia, USA se había armado de valor para enviarle un archivo con las fotos de quienes participaron en el... secuestro, solo para que Perú le respondiera el mismo día indicado que ninguno de esos hombres era a quien buscaba. Y ese había sido su último contacto, un misero correo, hace ya siete días.

El americano daba vueltas en su cama, dudado entre contactar o no a Perú ¿qué le diría?

Un sonido agudo y rítmico lo saco de sus cavilaciones. Miro su teléfono y contesto justo al último segundo.

-Hola Big Bro- era NZ, animado como siempre- Oye, vine con papá al centro para hacer unas compras, estaba pensando que podríamos comer los tres.

-Claro, ¿Dónde están?

-En la Plaza Eme, vamos al Jazzbie-

-Perfecto, los alcanzo allá- USA colgó, tomo su saco y llaves. Sabía lo impacientes que eran aquellos omegas, si demoraba demasiado, ellos terminarían yéndose.

No le tomo más de 10 minutos llegar al restaurante. Observo las mesas a su alrededor hasta localizar a su papá y hermano, ambos destacaban entre el tumulto de personas como un par de bellas flores en medio del pasto. Su papá era alto, delgado y siempre llevaba un porte de prepotencia, elegancia y finura. En cambio, su hermanito era bajo, aún más delgado y su aura era la del típico personaje caprichoso, alegre y explosivo.

-¡Al fin llegas!- soltó NZ apenas lo vio, agitando su mano para invitarlo a unirse a ellos.

-Perdón, hubo un poco de tráfico- respondió USA mientras tomaba asiento.

-Ordenamos por ti, espero no haya problema- dijo el inglés.

-No, no hay problema-

-En fin, papá, te decía, la agencia necesita crecer, esperaba que padre o tu pudiesen invitar a algunos socios...- USA se perdió de la conversación. Unas mesas más atrás, estaba el espacio donde había almorzado con Perú, donde su trato había tenido lugar.

Lo recordó con esa camisa blanca y ceñida al cuerpo, con su cabello quebrado descubriendo su tierno rostro y la luz que hacía que sus ojos pasaran del color de la miel al color verde de las manzanas. Suspiro, solo entonces percatándose de que realmente esperaba verlo pronto.

-¡Hola! U-S-A, tierra a USA, vamos hermano, ni que estuviera tan buena- NZ le chasqueo los dedos enfrente de él.

-¿Qué?

-Es que te le quedas viendo a esa señora- señalo sin disimulo a una mujer mayor que tenía un ligero rubor en las mejillas. Claramente su esposo no parecía ni una pizca feliz con el americano.

El más alto solo sonrió a forma de disculpa y regreso la mirada a sus acompañantes.

-Perdón, estaba distraído- confeso.

-Eso espero, lo último que quiero que te gusten las mayores- se preocupó el inglés.

-Por supuesto que no- se defendió USA, "de hecho me gustan los omegas bajitos y tiernos, de esos que provocan que FBI derribe tu puerta" se sorprendió pensando USA.

-Creo que los omegas más maduros no encontrarían atractivo a mi hermano- soltó NZ en tono burlón- A no ser que quieran un niño gigante al cuál cuidar.

-Cualquier omega se sentiría feliz de recibir mi atención- apenas USA dijo eso, las caras de su hermano y papá cambiaron a unas serias.

-De verdad no crees eso, ¿cierto?- lo cuestiono NZ.

-Es mi culpa, Francia le metió muchas ideas erróneas- murmuró su papá.

-¿Y ahora que dije mal?- rodo los ojos ante las miradas juzgadoras de sus parientes.

-"Soy un gran alfa, todos omegas quererme"- NZ hizo la imitación de un gorila.

-¡Yo no dije eso!

-Si, si lo hiciste- rebatió divertido UK ante la imitación, pero añadió en tono serio:- Hijo, el que seas un alfa no significa que todos los omegas van a estar muriéndose por ti. ¿En serio crees que tu hermano y yo babeamos por cualquier alfa que se nos cruce en la calle?- hizo una pausa- Bueno, ¿al menos crees que yo hago eso?

-¡Oye!-

-No, papá.

-Exacto, my sweet boy, el hecho de que seas un alfa solo es el punto de salida, por lo menos eres guapo, eso te da otra ventaja. Pero si realmente quieres una pareja, bueno, tienes que trabajar por ello. Y aceptar que no siempre vas a ser el gusto de todo el mundo.

-Uh, hablando de gustos, llego una nueva chica a la agencia, una alfa y...- NZ hizo una pausa dramática- creo que le gusto. Miren, se las muestro.

UK y USA intercambiaron una mirada cómplice, no era la primera vez que NZ se enamoraba de alguna de sus modelos, solo para terminar rechazado o finalizando la relación al poco tiempo, desde su punto de vista, el supuesto enamoramiento de Nueva Zelanda no era más que otro de sus caprichos.

En fin, el supuesto enamorado les mostro la foto de una chica alta, de cabello rojo como el fuego y ojos verdes esmeralda.

-Se llama Bielorrusia- dijo él- Es del continente Norte y, lo más importante, esta soltera. No lo sabe aún, pero será mi esposa.

-Bielorrusia- repitió UK con un claro tono de alarma- No NZ, ni lo intentes.

-¡Papá! Ya no soy un niño como para que me digas con quien sí y con quien no puedo salir-

-Escúchame niño, Bielorrusia es hija de URSS ¿no recuerdas? Ese clan está podrido, ni pienses que te dejare salir con una chica que pertenezca a esa familia.

-¿Es hija de URSS?- USA no cabía en su incomodidad.

-Si, ¿acaso no prestas atención?- UK empezaba a molestarse de verdad.

-Oh vaya, supongo que será un amor prohibido entonces.

-New Zeland, no.

-New Zeland yes.

-Invítala a comer a la casa.

-¡USA!

-¿Qué? Así la conocerás y podrás determinar si es o no una buena persona. Además- se inclinó al oído de su papá y murmuró: - entre más se lo niegues más se va a aferrar.

UK lo miró unos instantes para terminar suspirando.

-Bien- acordó y no dijo nada más.

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Bonita noche <3