EL TRATO (USA X PERÚ)

XVIII. Un peruano, un abrazo y la osadía de un americano

Me gusto es capitulo, espero lo disfruten. Pero aún así he de advertir: ligera mención a Ucrania y Rusia, así que...

<<Saca un anuncio como los que ponen cuando el piso esta mojado>>

Leer con precaución

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Caminaban sin prisa rumbo al estacionamiento, caminado entre los puestos y sorteando un mar de personas. USA estaba emocionado, pues aunque no hablaban de nada pero, al menos, la atmosfera que los rodeaba era de tranquilidad relativa. Sentía que había logrado su objetivo de animar al peruano. Tal era su alegría que caminaba con una pequeña sonrisa en sus labios. 

-USA- Lo llamó el menor de pronto, con seriedad en su voz-  ¿Cuándo me dirás cómo encontrar a tu contacto?

El mayor suspiro molesto, eso le dio mala espina a Perú. Hasta entonces habían llevado un ambiente cordial entre ambos, el chico era consciente de que había arruinado la atmosfera con su pregunta, pero no sabía cómo ser sutil al respecto.

El sonido del reloj seguía presente en su cabeza, por más que quisiera distraerse, le era imposible no escucharlo.

En cambio, el americano estaba en un dilema. Era consciente de que se había aprovechado en más de una manera del tierno oemga. Había sido negligente y un idiota en todos los sentidos de la palabra.

No sabía que hacer, puede que sus encuentros con Perú no fueran muchos, pero bastaban para entender que ese omega era tan tenaz como impulsivo, sentía que al decirle esa información era como poner un cuchillo en sus manos mientras caminaban en hielo, algo podría salir mal.

Miro a Perú con preocupación y este le respondió con desafió reflejado en sus brillantes ojos miel. Mierda, en serio le era imposible negarse cuando lo veía de esa manera.

-En el bosque Savranskii* vive Ucrania Soviet, es el hijo de quien era nuestro antiguo socio y hermano del actual líder del clan- Perú frunció el entrecejo, atento a lo que él decía-. Tal vez recuerdes al heredero, era un niño alto y pálido. Ellos podrían ser la clave para localizar a quien daño a México- le respondió sin tapujos.

La mente de Perú se puso a trabajar, ahora que tenía el lugar y un nombre que buscar, solo faltaba llegar hasta allá. Podía comprarse un boleto de ida, y había escuchado que el continente norte era bastante seguro para ir de "mochilazo". Estaba tan concentrado en sus planes, que no se fijó cuando USA lo apartó del camino y lo llevó detrás de los puestos, al limite del parque y donde se juntaban varios arboles.

-Perú- hablo el mayor, sacándolo de sus cavilaciones- No hay manera en que tú puedas contactar con él.

Hablo sin pretensiones, lo único que quería es que Perú comprendiera las dimensiones de su misión imposible.

-¿De qué hablas? ¡Claro que lo hare!

-¿Cómo?

-Tengo ahorros, puedo comprar un boleto de avión y viajar en carretera...- dicho en voz alta, su plan sonaba ridículo.

-Te perderías o podría pasarte algo...

-¡No! Yo... debo hacerlo.

Puede que su voz temblara, pero sus ojos brillaban con determinación. USA negó con la cabeza, su pequeño omega era demasiado terco para su propio bien. ¿Por qué no entendía lo peligroso que era su plan?

-No, no puedes Perú. Yo iré a hablar con él y tú te quedarás aquí, fin de la historia- trato de sonar firme, imitando ese tono de voz que Francia ocupaba para regañarlos.

Se quedaron mirando, desafiándose. USA notaba la molestia del menor en sus pupilas marrones, mientras que Perú podía notar una honesta preocupación por su bienestar. "Por un carajo", puede que el rubio tuviese razón, pero Perú no se rendiría tan pronto ¿Qué garantía tenía de que USA cumpliría su palabra?