Capítulo 33

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Nuevo capítulo.

Espero les guste y dejen sus comentarios acerca de la historia.
Hay veces que no logro recordar algo o me equivoco al escribir y confundo los datos. Si ven algo como eso, les agradecería muchísimo que me lo hicieran saber.

Me encanta leer su comentarios, así que nos leemos ahí.

Bye.

😘😘😘😘😘

Scarlet no se sentía muy cómoda. No. Decir eso era un eufemismo. Estaba total y completamente incómoda. Y ahora más que nunca entendía la frase "Como pez fuera del agua" aunque para ella era como un ratón en unos sacos de harina fina. Aunque esta era cálida y acogedora.

Además de que estar rodeada de tantas personas era extraño. Extraño y demasiado incómodo. Por no decir que todo el ambiente que la rodeaba, parecía ser de color rosa o arcoíris por la forma en la que todos charlaban y sonreían, cuando todo en su vida había sido de colores lúgubres. 

Aunque encontró al padre de Hector viéndola de reojo un par de veces, como si quisiera ver a través de ella con su escudriño. Lo cual empezaba a hacerla sentir mucho más incómoda y fuera de lugar. Pero lo que más la hacía sentir incómoda, era la ausencia de Hector. El era la única persona literalmente cercana a ella, por lo que el que no estuviera ahí con ella, hacía que las cosas fueran mucho más difíciles. Aunque obviamente Anguelique y Martha trataban de incluirla en absolutamente todo. Siempre con una sonrisa y palabras suaves, mostrándo le una amabilidad que le era desconocida. Aunque eso no disminuía su incomodidad. 

—¿Dónde está Hector? —preguntó Martha viendo hacia todos lados, buscando a su hijo mayor. 

Scarlet también lo hizo aunque eso provocó una contradicción con ella y su inconsciente que le decía que no tenía por que preguntarse ni querer saber dónde estaba el idiota neandertal. Y por estúpido que se oyera no podía estar tranquila si no lo tenía frente a ella. Por lo menos no cuando ella estaba rodeada de toda su familia. 

—Vendrá enseguida, no te preocupes. —dijo Nestor sin ver a su esposa y viendo directamente a Scarlet como si la información tuviera más importancia para ella. 

Scarlet desvió la vista y después de unos minutos, trató de evitar por completo la mirada y el cruce de palabras con Nestor. Podía asegurar que el hombre al igual que era cariñoso con su familia, era igual de amenazador con los que no eran nada suyo. Categoría en la cual entraba Scarlet y por lo cual se sentía intimidada bajo su escudriño. Tal vez pensaba que de alguna forma dañaría a su hijo y por lo cual no dejaba de verla con esa mirada que la hacía sentir realmente cohibida. 

—Al fin. ¿Dónde estabas? —Martha, quien vio primero como se acercaba Hector, lo regañó nada más verlo. Y aunque él no respondió con palabras, si lo había hecho con su mirada. La cual no mostraba nada bueno. Scarlet volteó para verlo y deseó no haberlo hecho. Su mirada estaba puesta en ella con una ferocidad que le era conocida y desconocida a la vez. Como si la desnudara y la hiciera sentir humillada con solo verla, lo cual obviamente no le sentaba nada bien y deseaba hacerla retroceder. —¿Qué pasó? ¿Te sientes mal? —preguntó Martha preocupada y Hector negó con la cabeza, aun con la mirada en Scarlet. 

—No. Pero tenemos que irnos. Surgió algo y necesitamos partir de inmediato. 

—No puedes. Ya es muy tarde y la carretera está… 

—Es muy importante así que tenemos que salir ahora. —dijo sin desviar la vista de Scarlet. —Ven. Nos vamos. —Scarlet sintió una corriente recorrer su cuerpo al escuchar esa orden. Hector estaba furioso y aunque ella no sabía por qué, presentía que algo tenía que ver con ello. 

El Peso De Su Traición. (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora