SEGUNDA PARTE DE ARTEMISA QUEEN
Artemisa sobrevivió. Está viva y por fin tiene una vida normal... o al menos eso es lo que espera.
Luego de salvar a Tommy y que el techo de la CNRI le cayera encima, Artemisa estuvo en coma tres meses y muchas cosas...
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Oliver estaba haciendo su mayor esfuerzo en ese momento para no gritarle a su hija delante de todos. Artemisa por su parte, le mantenía la mirada a su padre, casi retándolo, sin importarle la presencia de los héroes de ciudad Central.
Kid Flash la había descubierto en cuanto entro, junto con Roy, a la habitación, pues su curiosidad habia sido tan grande que no pudo evitar recorrer el cuarto con la mirada desde que la puerta se abrió. Wally les agradeció a todas las deidades llevar bien puesta la máscara.
Habia sido una sorpresa, sabía que ella era hija de Green Arrow, pero no creyó que se la encontraría en su guarida, aunque siendo sinceros, también le sorprendía que le tuviera todo un cuarto y además un arcade de juegos. No es que hubiera convivido mucho con Oliver Queen, pero GA era demasiado... frio a simple vista como para ser tan... accesible o consentidor.
Fue el gritó de sorpresa de Wally lo que alerto a los adultos y lo que los había llevado a aquella situación, con un Oliver sumamente molestos y una Artemisa claramente desafiante.
— ¿Qué haces aquí? – fue lo primero que salió de los labios de Oliver, realmente se estaba conteniendo para no gritarle a su hija.
Artemisa, no cedió, no lo haría. No le importaba cuan fiera pudiese ser la mirada intimidante de su padre, ella habia sido entrenada para resistir eso y mucho más.
— Artemisa. – advirtió en un tono bajo, a lo cual la adolescente siguió estoica.
Wally no sabia ni donde meterse. En parte el enfrentamiento padre e hija habia sido culpa suya. Ver como espectador tal duelo de miradas y el desafío que se reflejaba en el rostro de la rubia era algo... asombroso. La mirada de Oliver era casi tan intimidante como la de Batman (énfasis en el "casi" pues ningún ser humano podía competir con esa mirada fría y tétrica), además, a su lado, Roy parecía bastante divertido con la situación.
— ¿Pasa seguido? – se atrevió a preguntarle al pelirrojo local.
— Casi no, pero... siempre es entretenido. – contesto con una risa contenida.
Wally podía ver la mirada preocupada en el rostro de Overwatch, casi como si quisiera intervenir en la discusión silenciosa que se llevaba a cabo frente a ellos.
— Ve a casa. – terminó por decir Oliver. – Hablaremos después. – advirtió.
Y Artemis se dio media vuelta aun sin pronunciar palabra para subir a pisotones la escalera.
¿Su perspectiva de la joven había cambiado? Por supuesto, ahora veía a una Artemisa diferente a la que visitaba en el hospital, más parecida a la chica que saco de las garras de Carámbano aquella tarde.
En un movimiento solo perceptible para su tío, Wally tomo papel y pluma, escribió una nota y la dejo en la mano derecha de Artemisa, para ella, fue solo una brisa de manchones rojos y amarillos.
