Desterrados (yoonmin, KookV ¿Namjin?)

CAPITULO XXXV

MALGEUN
Palacio real

La mayor ventaja de Hoseok era su calma.
Siempre fue tranquilo y pensaba demás las cosas, sobre todo cuando se trataba de planes, ahora entendía que era herencia sanguínea.

El día anterior había quedado impactado por todos los planes que Taehyung le contó, Hoseok podía jurar que si ese chico pudiera ver y no fuera considerado "inútil", Malgeun sería potencia comercial.

Después de exponer diferentes variables y puntos de vista decidieron jugar un rato.

Hacía tanto tiempo que Hoseok no jugaba, que le dolía el estómago de tanto reír.
Conoció más a fondo a sus padres, a sus hermanos menores, a Jackson y a los lobos, veía como todos hacían lo que el rubio menor quería y como todos reían junto a el. Hoseok llegó a la conclusión de que Taehyung todavía era un niño y que a pesar de ser ciego, veía mejor que otras personas.

Estaba tan entretenido jugando a la cacería que no noto que su brazo ya no dolía al moverlo.
Un día genial a su parecer.

Y en la noche, cuando todo volvió a la normalidad, comenzó a reflexionar sobre la relación de Jimin y Yoongi.

Todas las señales estaban ahí, desde el primer momento. Pero claro, no sabían lo que era el amor y por lo tanto, no sabían identificarlo.

Suspiro con cansancio cuando fue bruscamente movido, abrió los ojos y noto que era de día.

-¿Estás mejor?, Estabas dormido cuando llegamos anoche- pregunto Yoongi.

-estoy muy bien, ¿A qué hora volvieron?- pregunto Hoseok con más energía de la normal.

-cuando la luna salió, solo que acomodamos las cosas para el reino del sureste y verificamos que fueran enviadas con seguridad- respondió Yoongi.

Hoseok vio cada expresión que ponía, aflicción, tristeza.

-¿Que tenemos para hacer hoy?- pregunto Hoseok.

-es nuestro día libre, Jungkook tampoco llegó a dormir hoy, ¿Que haré con ese niño?- pregunto Yoongi, sacando su mochila de tela.

Hoseok sonrió, había olvidado su día libre, incluso había olvidado que llevaba meses viviendo como guardia.
Su vida había cambiado mucho, por años fue marginado, por meses fue guardia y ahora sería príncipe, la vida daba muchas vueltas.

La puerta fue tocada, Hoseok se levantó para abrir topandose con, quien sabía ahora, era su hermano menor.

-principe Jimin, ¿Que haces aquí?- pregunto.

Fingir era difícil, no todos eran grandes actores como Taehyung y Jungkook.

-traje su paga, ¿Ya se van?- pregunto con, ¿Pena?.

En ese momento Yoongi se acercó.

-no, no, aún nos falta Jungkook- hablo el pálido.

Y Hoseok supo que estorbaba ahí, se disculpo con ambos y salió de la habitación.
Camino a la cocina y tomo un poco de pan, salió de ahí y cuando volvió vio a la pareja dónde mismo.

-tengo que irme, mi madre quiere hablar de algo. Por cierto, mi padre los buscaba, estaba en la habitación del lago, nos vemos- se despidió Jimin.

Era la primera vez que Hoseok lo veía así, pero no era el único, Yoongi estaba más distraído de lo normal.

-¿Les fue bien ayer?- pregunto el rubio.

-ah si, el camino es largo y hablamos demasiado, nos hiciste falta- respondió Yoongi.