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Una vez tanto mi pulso como respiraciones se estabilizaron, por fin podía ver y oír como se debía.

Aunque lo primero que vi fué la mano de Tzuyu acomodando mi largo cabello. Básicamente por el sudor de aquello.

-Estás lista- Dijo una Nayeon intentando ventilarme. -No deberías de hacer una coreografía así y cantar a la vez- Me di cuenta que estaba en el regazo de Jihyo.

Sentí como una mano envolvió uno de mis brazos. -Deberías de comer más- Dijo una Tzuyu más o menos nerviosa.

Luego de ya si estar lo suficientemente bien para levantarme y ser autosuficiente, fuí por un poco de agua.

- ¿Estás bien? - Preguntó una Dahyun con una mano en mi hombro. Termine de tragar y asentí. -Solo me hace falta entrenar mi resistencia y estaré perfecta para lo que sea- Sonreí. Miró mi cuerpo por un momento.

-Quizá deberías de venir un día a casa a probarte algo de nuestra ropa, eres de nuestra talla ya- Explicó. Volví a sonreír, y mucho.

-Hay mucha ropa que no usamos además- Se apoyó en el borde. -Y ahora que ya dominas el coreano, quizá podamos salir algunas juntas... - Propuso. -Queríamos invitarte antes, pero habría sido díficil solo hablar- Detalló. -A decir verdad, tanto Tzuyu como yo fuimos la de pensarlo.

-Nayeon es un caso aparte, ella te quiere solo para ella- Se enderezó y regresó con las demás, quienes se fueron a retomar algunas actividades.

Todo parecía ir de bien en mejor, por primera vez en mi vida, tanto que parecía una historia contada para alguien que quiere justamente escuchar eso.

El día siguiente llegó, siendo otro día de trabajo.

Y esta vez, más que cualquier otra, todas estaban involucrándose más y más en la música.

Aunque Jihyo era la que más, tocaba hacer una canción triste, y ella te la incluso escrita mucha parte de la letra y composición, por qué una iba colocando una parte, y la otra completando y dando paso a que la otra siguiera.

Haciéndola entera ambas en menos de quince minutos.

Y podía imaginarme un poco el asunto debido a la letra, eso de «No quiero saber cómo estás» o «No tengo curiosidad por ti» venidos de ella y su historia me eran muy obvios a mi, que estaba fresca en sus historias.

Aunque luego ella misma me dió la composición de otra la cual la hizo porque se le murió un cactus y aligeró el ambiente.

Y gracias a ella misma, su canción de mini grupo. Algo mucho más movido que aquellas dos canciones.

Finalmente la cuota máxima y mínima de tres canciones fué suplida, mucho más fácil que cualquier otro día, Jihyo había tenido una inspiración contenida por lo visto.

Prisma - Tzuyu & Tú. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora