Prisma - Tzuyu & Tú.

23<~>

Desperté mal, quizá presintiendo que sería el peor día de entre todos, dos promociones juntas.

Para colmo, Lily quemó algo en la cocina por lo que todo tenía olor a quemado.

Olvidé todo menos mi celular, devolviéndome a medio camino.

En la cafetería de la empresa no había nada que me gustase.

Y aunque no podría catalogarse como malo, en esas condiciones, Sullyoon exclusivamente me pidió clases en el estudio, sumándole pre nerviosismo a la producción de después.

—Y así es cómo puedes usar tu diafragma mejor— Señalé a la cabina desde el pequeño micrófono. Ella lo intentó, teniendo buenos resultados, a lo que me dejé caer en la silla.

— ¿Le pasa algo? — Preguntó, viéndome quizá desanimada. Negué con la mano. Acerqué el micrófono. —Quizá solo sea el día, no te preocupes — Le quité peso al asunto.

Noté como salió del cubículo. — ¿Hay algo que pueda hacer para animarla? — Escuché de su boca, sonriendo ante mis pensamientos. Negué sin más.

—No soy de titanio, no todos mis días serán buenos— Respondí, dejándole claro todo. Miré al cubículo un momento, luego a ella. —Creo que ya has progresado bastante de todos modos— Me levanté. Viendo los notables diez centímetros de más que tanto ella como Tzuyu compartían, aunque verlas a ambas en el mismo día ya no me causaba tantos nervios.

Eran sensaciones distintas, aunque parecidas, ambas podría decirse que eran prohibidas, por razones distintas, pero lo eran.

Luego de eso, un pequeño consejo de cómo cuidar su garganta y despedida por un rato hasta volver a clases, si no es que comer, cosa que seguía pendiente era primera, se fué.

Me quedé pensativa en la silla, mirando al ahora solo cubículo.

Sobre aquello, sobre todo en realidad.

Era un ser muy racional, o al menos eso pensaba yo… pero aquella sensación de lo prohibido más que alejarme, me estaba empezando a gustar.

Lo que una persona normal quizá haría es distraerse perdiendo el tiempo, pero yo, estando en un estudio, una cosa llevó a otra y terminé con una canción sin letra, por lo que, dejé grabando el micrófono y entré al cubículo.

—Me tienes tan atrapada, apenas puedo respirar— Empecé con la canción y prácticamente todo lo que tenía en mente. —Y todo lo que quiero hacer es sumergirme contigo— Cerré los ojos como hábito al improvisar.

—Estar cerca no es lo suficientemente cerca… — Mi mente se estaba imaginando más a la mayor. —No hasta que crucemos está línea— Mi modulación empezó a cambiar.

—Nombra algún juego, tiraré los dados— No paraba en ningún momento, quizá había quitado el freno que me puse hacia tanto. —Solo mira lo que empezaste… — Empecé a moverme un poco además.

— ¿Realmente esto va a pasar? — Deseaba decirlo de frente a ellas. —He estado esperando y esperando por ti— Seguí confesando al micrófono.

—Solo ven e iluminame, quizá te deje hacerlo todo—

—Quizá es un poco peligroso, pero así es cómo me gusta— Saqué aquello que en mi mente estaba dando tantas vueltas.

—Menos conversación y toca más mi cuerpo— Solté.

—Estoy tan perdida en ti, tan y tan en ti— Lo repetí un poco.

—Todos nos estarán mirando— Mi mente empezaba a irse de lo amigable e infantil.

—Asi que, cariño, mantengamos este secreto— Por suerte estaba sola cantando eso pese a todo.

—Sería un poco escandaloso— Reí internamente.

Para no perder tiempo, simplemente me dediqué a hacer los adornos vocales y alguna que otra cosa con mi voz, terminando realmente.

Abrí mis ojos, viendo a las dos chicas por las cuales había dicho e imaginado todo eso del otro lado viéndome.

La canción es Into You de Ariana Grande.