וAnti-héroes Literarios•×

El conejo salió de la madriguera

Greg estaba aburrido. La lección estaba aburrida. Tenía tantas ganas de comer unas donas con café y luego irse a dormir. Soltó un bostezo y miró a John, el rubio sí se había quedado dormido en el pupitre. Le pinchó la mejilla con un lápiz para despertarlo mientras el profesor explicaba temas de la clase anterior, pero parecía muerto de lo exhausto que estaba. Dejando el lápiz de lado, Greg tomó un mechón de cabello entre sus dedos y lo acarició lentamente, extrañaría su color artificial.

-Con toda esta locura olvidé lo aburridas que eran las clases

Cuando finalmente se escuchó la campana del receso, Greg se estiró en el asiento y sacudió a John para despertarlo. Al salir del salón los sorprendió Hamlet, quien los había estado esperando.

-¿Qué haces aquí? Debías estar en el cuarto o la biblioteca- dijo John.

-Necesito intercambiar unas palabras con Guildenstern, si no es mucha molestia

Greg se encogió de hombros y se despidió de John antes de volver a ingresar al salón ya vacío junto a su majestad. Una vez a solas, Hamlet cerró la puerta, se acercó a Greg y frunció el ceño.

-Sé quien eres- dijo el príncipe.

-¿Qué?

-No eres mi amigo Guildenstern, el cortesano

-¿No lo soy?

-No. Eres lo que amenaza mi existencia y por lo tanto mi vida junto a John

-¿Disculpa?

-Gregory Lestrade, tú eres mi destinado enemigo. Laertes

-¿La... Laertes? ¿Cómo sabes eso?

Hamlet empujó contra el pecho de Greg el libro que estuvo cargando todo este tiempo. Ahora fue turno de Greg para fruncir el ceño.

-¿Leíste tu libro? ¡No se supone que hicieras eso! ¡No se supone que sepas tu final!

-Quería saber si tenía alguna oportunidad con John, si había algún hueco en la historia que me permitiera rechazar a Ofelia para entregarle mi corazón a él. Pero ahora sé la verdad y que no te quepa duda, no te dejaré desterrarme del trono ni que me arrebates a John

-Hamlet espera, yo estoy de tu lado. Todos lo estamos, solo queremos ayudar

-No necesito la ayuda de un traidor. Te aconsejo que te separes de nosotros o no tendré piedad en el duelo de espadas próximo a venir, Laertes

El príncipe se fue del salón dejando a un muy confundido y preocupado Greg atrás, quien luego salió corriendo en busca de su amigo.

📗📗📗

Volviendo a su tarea personal de investigación, John volvía a repasar los libros de sus amigos, pero le faltaba uno. En ese momento golpearon a su puerta y Sherlock se adentró en la habitación.

-Olvidé devolverte esto- dijo el de rizos extendiendo la chaqueta del equipo hacia el rubio.

-Puedes dejarla en la cama- respondió John. -Escucha, creo que sé quiénes somos en la historia de La Criatura

John giró en la silla de su escritorio y se levantó caminando hacia Sherlock con la mirada entre las páginas del libro.

-Lo había olvidado, pero en algunas versiones Frankenstein al inicio de la historia está en el Polo Norte y se cruza con un barco que lo rescata, allí le cuenta la historia de su creación al capitán de la nave. No hay ilustraciones de su rostro, pero escucha esto, todos nosotros tenemos nombres con las mismas iniciales o similares a los personajes que nos corresponden