El monstruo

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El golpe que dio su cabeza contra el escritorio al resbalarse de su mano lo despertó. Se frotó la frente adolorido y miró a su alrededor. Volvía a estar solo. Se levantó de la silla, tomó los libros y los ocultó rapidamente bajo la cama. No volvería a pasar de nuevo. Mientras los acomodaba, un olor fuerte y apestoso le llegó, escuchó los pasos de Greg al entrar y cuando se sentó en la cama.

-¿Qué haces?

-Solo acomodo mis zapatos

-Lamento el olor, pero dimos un buen partido. Vale la pena

John escuchó el golpe de los zapatos contra el suelo. Greg se tiró sobre las sabanas dejando salir un suspiro.

-Estoy muerto

John estaba nervioso, todo se estaba repitiendo. Pero si no veía los libros no diría lo que seguía. Empujó los libros lo mas lejos que le dio el brazo y se sentó en la cama mirando a su amigo.

-¿Cual fue la diferencia?

-7 a 5

Greg se acomodó en el colchón y sostuvo su cabeza en alto con la mano.

-¿Puedes creer que seguiremos los entrenamientos aún en las vacaciones?

Oh,no.

-¿Por qué los profesores hacen eso? Tenemos una vida también. Cielos, ser profesor debe ser muy aburrido

Y como John esperaba, se dio la vuelta para dormir. El rubio no se molestó en quitar la tapa de su cama, se puso de pie y salió del cuarto, no quería estar allí ni un minuto mas. Pero apenas había puesto un pie fuera cuando escuchó un estruendo en la habitación. Giró rapido para entrar y chocó con la puerta cerrada.

⚡⚡⚡

No sabía como. No sabía porque. Pero despertó en su escritorio con un libro abierto en el centro. Lo que leyó no le gustó nada; "La historia del monstruo".
Un fuerte golpe lo paralizó, no se atrevió a mirar. Creyó saber lo que le esperaba esa noche y estaba asustado.

El escuchar los gemidos espantosos que soltaba esa criatura le provocaba pavor, algunos parecían gruñidos de animal. Tragó saliva, no podía estar así toda la noche; respiró profundo y volteó lentamente. Contuvo la respiración al presenciar la figura de un hombre mas alto de lo que jamás había visto, con ropas desgarradas y cicatrices a la vista en todas partes donde su cuerpo estuviera desnudo; incluso en la cabeza que a falta de cabello dejaba ver esas horribles marcas.

La criatura estaba encogida sobre su cama, con la cabeza colgando al reves, espiando lo que ocultaba debajo de ella. Estiró su largo brazo para alcanzar algo. John estiró el suyo para tomar una goma de borrar y tirarsela a Greg con la esperanza de despertarlo, no funcionó. El monstruo sacó uno de los libros que John había escondido, lo miró y lo mordió. Se echó hacia atrás quedando sentado sobre la cama y siguió mordisqueando el libro bajo la sorprendida mirada del chico.

John llevó el puño a la boca y se aclaró la garganta para llamar su atención. Cuando la criatura lo vio se abalanzó contra él, cerró los ojos aterrado, pero al sentir nada mas que un horrible olor los abrió. El monstruo lo miraba atento, repasaba cada una de sus facciones, incluso tocó su cabello y a la vez su propia cabeza. Soltó gemidos inentendibles, le dio dos palmadas en la cabeza y regresó a la cama. John tenía una de sus piernas colgando de la silla y la otra doblada sobre esta, así se sentó el monstruo.

-¿Pu...Puedes hablar?

La criatura soltó mas gemidos y un grito. Sus movimientos eran desincronizados, duros y bruscos, tenía movilidad pero no fluida. Su comportamiento era errático, John no sabía cual sería su próximo movimiento. Era como un bebé adulto. El chico se señaló a sí mismo.

וAnti-héroes Literarios•×Where stories live. Discover now