911, ¿Cuál es su emergencia?

Caleb.

¿Cómo es que se me ocurrió pensar en pedirle su número? ¡Ni siquiera la conozco!

Y dudo que ella me lo hubiera dado de todas maneras.

Es que no se me pudo ocurrir algo mejor, pero...

¿Como lucirá la chica de los niños? ¿Sera cómo la chica que vi en el centro comercial? Su cabello era de color chocolate y su piel trigueña.

¿Se ofendería si le pido su numero?

¿por qué carajos no pensé eso antes de empezar a hablar como idiota?

Eres increíble, Caleb, lo eres, pedazo de idiota.

¿Que se supone que iba a decirle de todas maneras?

"¿Oye puedes darme tu número? Es qué haces que mis días en el trabajo no sean tan patéticos"

Ella iba a reírse de mi, aunque claro que no le diría eso jamás.

Soy un estúpido, fin del caso.

Nuevamente suena el teléfono.

- 911, ¿Cual es su...

- ...Y voy a arrancarte los malditos ojos si sigues viendo a mi esposo! ¡¿Me escuchaste?! ¡Te los voy a arrancar.

Ok...

- ¿Hola? ¿Tiene alguna emergencia?

- Janeth, cálmate - escuche del otro lado de la línea - ¿Hola? ¿Hola?

- Si hola, ¿Tiene alguna emergencia?

- Si, acaba de haber un accidente, en la avenida principal un carro nos chocó, parece que la conductora estaba...

- ¡Estaba babeando mientras te veía, eso era lo que estaba haciendo!

Creo que ya entiendo de que va esta llamada, suspiré.

- Como me sigas gritando de esa manera, vamos a tener un problema - se escucho otra voz de fondo.

- Señoras, por favor...

- ¡Tú cállate! - dijeron ambas.

- ¡No mandes a callar a mi marido! ¡Mejor ve por dónde vas!

- Janeth, la señora no hizo nada malo.

- ¿Ahora vas a defenderla? ¿Que sigue, te irás y me dejarás así? Voy a matarla.

- Señor, acabo de enviar una grúa y fiscales para que le ayuden a solucionar su situación, ¿Hay algún herido?

- No hay heridos - hablo el señor derrotado.

- Ah, pero pronto va a haberlos, si, mande una maldita ambulancia.

- Y un par de oficiales, de verdad disculpe la molestia.

Esta gente, nunca aprende, las mujeres están locas.

Ah, pero yo quería pedirle el número a la chica de los niños.

Los hombres estamos mal.

- Esta línea está abierta las veinticuatro horas, no dude en llamar y contactarnos con solos marcar en su celular el nueve, uno, uno.

- Gracias.

Suspire y me quite el audífono.

Definitivamente prefiero las locuras de la chica de los niños.