Alyssa.
La casa estaba llena, era día de almuerzo familiar así que ni siquiera Lulú pudo salvarse y escapar.
Mamá esta con Elena en la cocina y papá horroriza a mi cuñado con sus historias, blue lee sus libros y violeta le pinta una oreja de azul a Lulú mientras Alegría le pinta la otra de morado.
Henry lee las instrucciones de la pintura en voz alta y cada vez que traté de subir el volumen del televisor, él subía más la voz.
- ¡Bastian, espero que no estés considerando mudarte al baño! - gritó papá caminando a la cocina.
- ¡Si! - gritó Bastian desde el baño.
- ... Evite que el producto entre en contacto directo con su piel - Leija Henry pasando su dedo por la hoja - Si nota alguna reacción negativa, retire el producto inmediatamente - entonces se detuvo - ¿Lulu, te sientes bien?
- Contigo ahí hablando como un perico revuelto, Henry, yo dudo que ella se sienta bien - dije rodando los ojos.
Hacia un calor y con mamá en la cocina horneando la comida la casa parecía un infierno.
Terminaba de pasar canales cuando todos escuchamos un muy fuerte gemido seguido de un golpe.
Todos nos detuvimos y nos miramos en silencio, agrandé mis ojos cuando se empezó a escuchar un sonido constante.
- ¡¿Bastian que demonios estás haciendo en el baño?! - grité levantándome.
- ¡No soy yo! - gritó devuelta y entonces la puerta de nuestro apartamento sonó agresivamente - ¡No sé cómo se apaga esto!
- ¡Abre la maldita puerta! - gritaron fuera, los sonidos y los gemidos seguían mientras Elena tapaba los oídos de Alegría y Lulú se escondía debajo de la mesa.
- ¡Ayúdenme! - lloriqueó Bastian en el baño.
Mamá salió como una furia desde la cocina a abrir la puerta y enfrentar a Berta.
- ¿Te escapaste del manicomio o que? - preguntó mamá con el trapo de la cocina en la mano.
- ¡Son unos degenerados todos ustedes! - gritó Berta apuntando a mamá con el dedo - ¡Su porno se escucha por todo el edificio, los voy a demandar!
- ¡Eso no viene de nuestra casa, vieja psicopata! - gritó mamá y yo corrí al baño.
- ¡Berta, ya basta!
- Ay, va a matarlo - dijo Henry al ver cómo Berta se acercaba a su esposo.
- Busca la cámara Blue.
- ¡Cállate Roberto, que te detuviste a escuchar, esto es inaudito!
En el pasillo Berta manoteaba a su esposo y apuntaba a mamá con su dedo.
Dedo que probablemente desaparecía pronto de su mano.
- Como sigas gritándome y apuntándome con tu asqueroso dedo, voy a despellejarte - amenazo mamá en cuanto yo logre abrir la puerta del baño.
Bastian estaba aún vestido sentado en el piso con la cara pálida y tratando de apagar su celular.
- ¡No soy yo, es un anuncio! - me miró asustado - ¡No se cómo quitarlo, no puedo desconectar el teléfono del Bluetooth!
- ¡¿Por que demonios no tienes música en tu teléfono como la gente normal?!
- ¡Solo quítalo!
Entonces escuchamos más gritos y cuando apague el Bluetooth salí enseguida para encontrar a mamá rodando encima de Berta con su cabello en las manos.
Alegría gritaba que le diera más fuerte y Lulú le ladraba a Berta mientras le mordisqueaba una pierna como si estuviera jugando.
En su cabeza debía de ser lo más divertido.
Elena calmaba a Henry mientras papá trataba de quitar a Lulú del problema cuando Roberto tomó a mamá y la levantó liberando a su esposa.
- ¡Eres una envidiosa y tu marido te engaña, vieja bruja! - gritó mamá y entonces Berta saltó sobre la espalda de su esposo para alcanzar a mamá.
El pobre hombre se tambaleó y luego cayó al suelo con ellas dos encima, papá metió a Lulú al apartamento.
- Yo no puedo cargarla, mi cadera se saldrá - volvió y dijo mirándome.
- Esa es una vil excusa - rodé los ojos y me adelanté a la inminente batalla.
Algunos vecinos habían salido a ver que era el alboroto y recibí una patada en la pierna cuando me acerqué.
- ¡Son como malditos animales! - tome la mano de Roberto y lo saque de ahí como peso pluma, el pobre cayó al suelo rezando por su vida - ¡El porno venía de tu corneta, vieja estupida!
Entonces todos terminaron por salir al pasillo y logré ver a violeta grabando la escena y a Lulú con sus orejas pintadas mientras la cara de Henry era de total horror.
- ¡Callate, deberías irte al circo con todos tus monos, suéltame o te mato! - grito Berta y mamá tomó su pierna entre sus brazos y la torció en un feo ángulo haciendo que Berta soltara un quejido, alargó su mano y tiró de la mía haciéndome caer al piso.
- ¡No toques a mi Alyssa! - gritó Alegría corriendo hacia mi cuando papá la atrapó en volandas.
- ¡No toques a mi hija!
Y justo en ese momento tres policías aparecieron por el pasillo, solo entonces todos nos detuvimos.
- El porno, vieja estupida, venía de su corneta no de la nuestra - le dije en un susurro.
- Eres una arpia.
- ¿Que está pasando aquí?
- ¡Está mujer puso porno en todo el edificio y es inaceptable!
- ¡Ella no quiere aceptar que su esposo la engaña y quiere culparnos por el porno que ella no le da a él!
- ¡Ella tocó a mi Alyssa! - grito Alegría desde los brazos de papá.
- ¡Mi esposo no me engaña!
- ¡Pregúntale a la masajista que si le da el porno que quiere, por eso yo sigo con mi Ernesto!
Por todo el pasillo se escucharon sonidos de asco y lo siguiente que escuchamos fueron las esposas ser cerradas en las manos de todos, el auto arrancando, la reja cerraras y todos quejándose.
Suspire y llene mis pulmones.
Espero que esto no se haga costumbre.
- ¡Señor oficial, tengo derecho a hacer una llamada!
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Hoola, otro extra para ustedes, al fin María le dio piñas a Berta y todos agradecemos que noestuvieron juntas en la misma celda.
Espero que les haya gustado♥️
Estoy trabajando en una historia más diferente a esta, un poco más pesada y elaborada, me gustaría saber si alguno de ustedes es bueno escribiendo sinopsis, soy realmente mala para eso (esta fue pura suerte)
Subiré solo un extra más sobre Alyssa y Caleb y sera el final oficial de esta historia, espero que la hayan disfrutado mucho.
- Vero🧡
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911, ¿Cuál es su emergencia?
Storie breviCaleb trabaja en el servicio de emergencias. Alyssa trabaja el arte de no perder la cabeza. Caleb no tiene hermanos menores. Alyssa tiene una sobrina llamada Alegría y una casa llena de niños. Caleb está siempre en la línea telefónica. La sobrina de...