Alyssa.

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- Y entonces lloraste como una bebé y él se quedó en silencio escuchándote - me seguía contando Alegría y yo me quería morir.

A penas y logro dejar de pensar en que el chico del 911 me corto la última vez y ahora tengo que lidiar con el hecho de que llore toda la noche y él me escucho en silencio.

Más vergüenza no pude haber pasado, ni siquiera estos niños podrían jamás superar eso.

Obviamente a Alegría toda la situación le parecía de lo más graciosa, yo por otro lado no recordaba ni cinco segundos del espectáculo que había dado.

- Y entonces cuando te quedaste dormida, yo tomé el teléfono y el me pidió que te cuidara - me seguía contando mientras empezaba a trenzar mi cabello.

- Oye Lissy, ¿Esto es yogurt? - preguntó Henry, pero yo no podía girar la cabeza porque Alegría me trenzaba el cabello, así que solo le dije que si.

- ¿Y que más te dijo? - le pregunte asustada de la posible respuesta.

- Y entonces me dijo que si algo pasaba que llamara y él atendería, pero tú roncas mucho y me fui - dijo con su voz parlanchina cómo si fuera lo más normal.

- ¿Y no le dije nada más? ¿Estás segura?

- Si si, y entonces tú le dijiste que Jack era una palabra que no puedo decir porque me dijiste que si la digo me pegarías del techo, y entonces el te preguntó si era tu novio y entonces tú le dijiste otra palabra de esas que no debo decir.

Dios mío, no voy a tomar nunca más si voy a hacer el ridículo por llamada con un chico que me parece... interesante.

Hubiera sido más sencillo hacer el ridículo frente a él y no por llamada, ahora debe pensar que soy una loca.

- Y entonces el dijo...

- Alegría por favor deja de decir, "y entonces" - le pedí - Estás mareándome.

- ¿Y entonces cómo quieres que te lo cuente?

- Creo que ya escuche sufi...

- ¡Esto no es yogurt!

- ¿Henry, qué pasa? - le pregunte en un grito.

- ¡No es yogurt! - lloriqueó y habló palabras que jamás entendería - ¡blue deja de reírte, no es gracioso!

- ¡Eres idiota!

Escuche que blue se partía de risa y traté de levantarme, pero no pude pues jale de mi cabello demasiado fuerte para darme cuenta de que estaba trenzado a una sábana sobre la que estaba acostada Lulú.

- ¡¿Alegría que me hiciste en el cabello?!

- ¡Comiste crema corporal! - siguió riéndose Blue y enseguida se le unió Bastian.

- ¡Alyssa ayudame! - lloriqueó más Henry.

- ¿Hola?... Si, Henry comió crema corporal - hablo Alegría por el teléfono y no supe si alegrarme o reírme o ambas.

- ¡Escúpelo Henry, por dios! ¡Alegría ven a desatarme!

No podía ver nada más allá del techo, el mesón de la cocina y a Lulú.

- No... le hice una trenza muy linda.

Si, que casi me deja calva.

- Lulú cielo, ¿Puedes levantarte un momento?

Pero Lulú me volteo la cara.

- Oh, oh, disculpe usted por perturbar su sueño, su majestad, pero si no te levantas de la sabana te voy a dejar sin dulces una semana - le dije y sonreí al ver que levantaba las orejas.

- ¡Tómale otra foto Bastian! - Blue iba a hacerse pipí si seguía riéndose - ¡Saca la lengua Henry!

- Si, así como me escuchaste y voy a empezar por quitarte esas que tanto te gustan - sonreí victoriosa cuando Lulu se levantó de la sabana.

- ¡Alyssa! - gritó Henry y yo rode los ojos.

- Henry si piso la cocina sera para cortarte la lengua - amenace y escuche más risas, le quite el teléfono a Alegría antes de que dijera algo más.

- ¿Hola? ¿Alegría sigues ahí? - y me arrepentí enseguida, ¿Que iba a decirle?

Ay dios, debía hablarle en algún momento.

- Soy yo - fue lo primero que dije.

Estupida, soy estupida.

- Ah, la chica de los niños, ¿O debería decir la chica problemas? - escuche su risa al otro lado y sonreí un poco - ¿Como estuvo tu resaca?

- Es increíble la cantidad de cosas que puedes hacer ebrio y no recordarlas al otro día - le dije muriendo de vergüenza.

Pero entrar a la cocina fue encantador, Violeta sostenía la cabeza de Henry con la boca abierta mientras Blue con unas pinzas le sostenía la lengua fuera y Bastian tomaba fotos.

- Muy bien ayudantes, gracias por preparar al individuo - les dije pretendiendo estar lo más seria que podía estar con una sabana colgando de mi cabello - Es hora de cortarle la lengua.

- ¿A quien vas a cortarle la lengua? - me preguntó el chico del 911.

- A ti si no me dices todo lo que te dije en mi inconveniente estado - lo molesté.

- Y yo pensando en pedirte tu número pero creo que lo pensaré mejor - puedo jurar a que estaba sonriendo, se le escuchaba en la voz.

¿Iba a pedirme mi numero?

- Pero ya tienes mi número - le recordé - Desde hace un buen tiempo.

- ¡Alyssa mi lengua! - me gritó Henry.

- ¡No hables! - le dijo Blue.

- Si Henry, te cortaré la lengua en un momento, no podemos salvarla - le dije restándole importancia con la mano.

- ¿No te parece un poco acosador si hubiera solo tomado tu número en vez de pedírtelo?

¿En serio estamos teniendo esa conversación?

- Podrías ser un loco, mejor no tomes mi número - le dije y se rió.

- ¿Que te parece si solucionas la situación que tienes entre manos y luego te cuento todo lo que me dijiste?

- Hecho.

No iba a pensarlo demasiado si no quería arrepentirme.

- No le cortes la lengua a nadie - me pidió.

- Si me convences, no lo haré.

- ¿Y cómo quieres que te convenza? Esta difícil - escuche y sonreí.

- Ya se te ocurrirá algo, pero te aconsejo empezar por decirme que no hice el ridículo.

Se carcajeó y disfruté aquel sonido.

- Hasta luego, chica de los niños.

911, ¿Cuál es su emergencia?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora