Sam se llevó las manos a las sienes mientras asimilaba lo que acababa de ocurrir. Nada más regresar a la ciudad con el V Ejército, Alex le pidió reunirse con ella a solas en su estudio pero, para su sorpresa, cuando se reunieron no llegó sola, sino acompañada por Toni Topaz, a quién había introducido en la Fortaleza Luthor de forma clandestina.
– ¡Estás loca! –dijo finalmente – ¿Tienes ideas del lío en el que nos podemos meter? Lena está furiosa y, cómo se entere de esto...
– Sam, por favor, tienes que escuchar lo que tiene que decir. Algo grave le está ocurriendo a la reina Cheryl, por eso se echó atrás en lo de la reunión.
– Por favor –dijo Toni con voz de súplica –. He oído que vuestra reina es comprensiva. Necesito hablar con ella.
– Es comprensiva, si. Pero, ahora mismo, no sé lo comprensiva que será. La decisión de tu reina de suspender la reunión cuando todo estaba preparado le ha sentado fatal.
Toni se apresuró a asentir.
– Lo sé. A mi también me sorprendió este repentino cambio de parecer. Desde que fuisteis a Riverdale para hablarnos de él, he sido siempre muy favorable al proyecto Resurgimiento y siempre le he hablado bien de él a mi reina. Por eso, cuando decidió que iba a acceder a tener una reunión con vuestra reina, me alegré mucho y, cuando cambió de parecer de forma tan drástica, también me pareció una decepción. Pero, por desgracia, esta no es la única decisión polémica que está tomando estos días. Ya le hablé a Alex de ello durante el camino y ahora necesito hablarlo con vuestra reina.
Sam suspiró antes de hablar.
– Afortunadamente, Lena lleva varias horas con Kara y seguro que ella habrá logrado animarla. Vosotras, esperad aquí. Voy a buscarla.
Salió de la habitación dejando solas a Alex y a Toni, que se miraron con mucha preocupación.
***
Lena y Kara se encontraban en uno de los merenderos de los jardines de la Fortaleza Lurthor. La reina degustaba la comida que la kryptoniana le había traído. Pese a estar acostumbrada a comer los grandes manjares que preparaban los cocineros reales, quienes se encontraban entre los mejores cocineros del Imperio, Lena disfrutaba de aquella comida como si probara por primera ves la alta cocina.
– Están deliciosos ¿Eh? –dijo Kara con una amplia sonrisa al ver a Lena tan animada.
– Mmmmmmm... No se cómo sabrá la ambrosía que comen los dioses, pero creo que es algo parecido a esto ¿Cómo has dicho que se llaman?
– Potstickers. Un plato tradicional kryptoniano. Son mi comida favorita, por cierto.
– No me extraña... ¿Los has hecho tú?
Kara negó con la cabeza.
– Mi madre me pasó la receta, pero soy un desastre en la cocina. Tuve que ir a buscarlos.
Lena arqueó las cejas.
– Espero que no hayas ido hasta Argo a buscarlos.
Kara volvió a negar con la cabeza mientras soltaba unas pequeñas carcajadas que contagiaron a Lena.
– No me hizo falta. Aquí en Metrópolis, en el borde exterior, hay una taberna regentada por kryptonianos donde los preparan y les salen muy buenos.
– Pues habla con esos taberneros y diles que quiero que sean los proveedores de Potstickers de la corte. La Corona les pagará muy bien.
Kara soltó unas nuevas carcajadas.
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EL REINADO
FanfictionLa saga Resurgence continúa. Los daxamitas ya no son una amenaza, pero aún son muchos los enemigos de Lena que están dispuestos a destruirla y hacerse con su trono. Pero también son muchas las personas que darían su vida para protegerla. Como Kara...