Lost ¦ Carl Grimes |TERMINADA|

22. Lástima

Lavinia

- parece un buen lugar, seguro - habló Carol mientras admirabamos el lugar desde afuera, miré a Rick, insegura sobre el nuevo lugar que Daryl y Carol habían encontrado.

Era una fábrica, sin embargo, parecía mejor que seguir durmiendo en la carretera o en el bosque.

- de acuerdo, nos aseguraremos de que esté vacía - la voz de Rick inundó el ambiente silencioso, no pude evitar sentir como el calor aumentaba al cruzar nuestras miradas. De reojo, observé como una pequeña sonrisa se formaba en sus labios.

Los mismos de siempre se preparaban para encargarse de los muertos, sabiendo que no podría ser parte de ellos, decidí buscar a Judith entre el grupo, algo de inocencia no me vendría mal.

Por supuesto, seguía en los brazos de su hermano.

Suspiré lentamente, tomando todo el aire que necesitaba en mis pulmones antes de acercarme al chico y a Beth quien estaba junto a él.

- Carl...

- vete, Lavinia.- apenas me vió llegar, Beth me interrumpió y se colocó frente a él, como si fuera su guardaespaldas, sin poderlo evitar reí.

-¿porqué tienes que seguirlo a todos lados? - me burlé - de cualquier forma, solamente venía a tomar a Judith...

- no te la vas a llevar - nuevamente la rubia respondió.

- ¿qué eres su madre? - sin embargo me arrepentí al instante al ver el rostro de Carl tensarse justo detrás de ella, sabía que era un tema delicado para él. - mierda Carl, lo siento - me disculpé mirándolo e intenté dar un paso hacia él pero la mano de Beth en mi pecho me detuvo.

¿Qué demonios?

Sentí como la atención de todo el grupo ahora se encontraba sobre nosotros.

- ¿cuál es tu maldito problema, rubia? - escupí, acerqué mi cuerpo al suyo, quedando solo a centímetros entre nuestros rostros, intimiandola al instante pero no retrocedió, su mirada llena de odio sobre la mía, ninguna de las dos parecía querer céder.

- tú.

- ¿yo soy tu problema? - reí nuevamente - tú simplemente estas celosa.

-¿celosa de ti? ¿De qué mierda estaría celosa? ¿De tener un padre como Merle? ¿Un padre que no le importa una mierda sobre su hija? ¿De tener una vida tan triste que necesita llamar la atención de todos para sentirse bien? ¿De estar jodida? No, Lavinia, no son celos, me das lástima.

Oh, maldita perra.

Apreté mis puños con fuerza, sintiendo la ira en mi cuerpo.

- te vas a arrepentir - levanté mi mano para golpear su orgulloso rostro pero algo me lo impidió.

Daryl tomaba mi brazo justo detrás de mi y un instante después Maggie me empujó ligeramente, haciendo que retrocediera unos cuantos pasos, solo lo suficiente para que me alejara de su hermana y ella tomará su lugar.

- no te atrevas a tocarla. - su mirada hacia mí había dejado de ser dulce, ahora era todo lo contrario.

Me solté del agarre de mi tío y suspiré cansada.

- joder, Maggie, no quiero problemas, solamente dile a tu hermana que deje de meterse conmigo.

- Vinnie ya fue suficiente - por fin habló Daryl y se colocó frente a ellas.