Y Te Conocí ^Bughead^

Capítulo 67

—¿A donde creen que van?— Preguntó Helena, acercándose a ellas con un arma en mano.

Emily solo gritó y empezó a temblar mientras Betty solo la sostenía con fuerza.

—¡Estas loca!— Gritó Betty. —¡Si quieres algún problema con alguien mejor métete conmigo y no con la niña!—

—Es que mi objetivo no es hacerle daño a nadie— Aseguró Helena, apuntándolas con el arma. —Mi objetivo es destruir a Forsythe y sacarle algo de dinero de paso—

—Pero no tienes que incluir a Emily en esto— Opinó Betty, enojada.

—Helena...— Habló Jughead, acercándose a ellas, algo tambaleante. Aparentemente había sufrido un golpe y su cabeza sangraba un poco.

—Por Dios Juggie...— Murmuró Betty, mirándolo, aterrada.

—¡Papá!— Exclamó Emily, mirándolo y asustándose. —Papi... ¿Estas bien?—

—Chicas... prometo que no va a pasar nada malo. Helena... basta. Aquí estoy— Avisó, acercándose un poco más a ella. —Aquí me tienes. Deja ir a las chicas, por favor. Es conmigo y no con ellas—

—Cállate Forsythe— Exigió Helena, apuntando al chico con el arma. —Dame lo que te pedí—

—Te daré lo que quieras... pero por favor déjalas ir— Suplicó Jughead.

—Eso me gusta— Aseguró Helena, dejando de apuntarlo con el arma. —Pero ten por seguro que...

Helena dejó de hablar cuando de repente cayó al suelo, y detrás de ella estaba Betty con un pedazo de madera y con Emily escondida detrás de ella. Obviamente Betty le había pegado a Helena en la cabeza, porque ésta había empezado a sangrar.

—Oh Betts...— Dijo Jughead, acercándose a la rubia y abrazándola mientras también abrazaba a la niña.

—Juggie... ¿Estas bien?— Le preguntó la rubia, sin dejar de abrazarlo.

—Si ustedes están bien, entonces yo lo estoy— Aseguró el pelinegro, abrazándolas con fuerza.

—Vámonos papito. Tengo miedo— Suplicó Emily, aferrándose a ambos adultos.

—Ya nos vamos mi amor— Avisó Jughead, separándose del abrazo y tomándolas a ambas de la mano. —Por Helena no se preocupen porque ya se encargarán de ella—

—¿Quienes?— Preguntó Betty, empezando a caminar fuera del callejón con Emily tomada de manos.

—Por eso no se preocupen. Estará muy bien en la cárcel un tiempo— Supuso Jughead, soltando una risa mientras caminaba tomado de manos con Emily y Betty.

—¿Ya se acabó? ¿Ya la mujer mala no nos va a molestar más?— Preguntó Emily, aun asustada, caminando tomada de manos de los más grandes.

—Ya estamos bien mi vida. Mami te defendió como una leona— Admitió Jughead, mirando a la rubia con una sonrisa mientras los tres caminaban tomados de la mano.

—Por mi familia... lo que sea— Aseguró Betty.

—¡Se arrepentirán malditos!— Gritó Helena, apareciendo de la nada y disparando contra ellos tres.

Y todo pasó tan rápido que a nadie le dio tiempo de reaccionar ni de procesarlo a tiempo.

Solo se escuchó ese disparo y Helena se fugó enseguida. Cuando Betty, Jughead y Emily se dieron cuenta, la rubia era quien se estaba desangrando por un evidente disparo en la parte derecha del abdomen y solo segundos después ella cayó al suelo en agonía.