⛧𝕺𝖓𝖊⛧

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Hanagaki takemichi un chico de dieciocho años está en su último año de escuela, en uno de los mejores colegios de tokyo su mejor amigo decidió pagarle la matricula hace un par de años cuando hanagaki había pensado en dejar la escuela y empezar a trabajar para sacar a su hermano adelante, los padres de ambos habían muerto cuando takemichi solo tenía diez años y kisaki ocho, no eran hermanos de sangre, el padre de takemichi se caso con la madre de kisaki unos meses antes de que ocurriera el terrible accidente.

La custodia de ambos niños había quedado en las manos de su tío, pero meses después el hombre decidió abandonar a ambos niños, takemichi lloro durante todo el día, kisaki había empezado a llorar del hambre que tenía, aquel hombre se llevó todo el dinero que había en la casa.

Takemichi reacciono cuando kisaki empezó a decirle que tenía mucha hambre y miedo, por primera vez en su vida tuvo que hacer sacrificios para poder darle de comer a su hermanito menor, le vendió todos sus juguetes a niños del parque para comprarle comida a su hermano, no comió bien durante semanas solo para asegurarse de que kisaki comiera y durmiera bien, cuando cumplió doce años empezó a trabajar de cualquier cosa, para poder comprarle un lindo uniforme a su hermanito.

No importaba la condición de su uniforme, ni lo usado o roto que estaba, mientras su hermano se sintiera bien todo ese esfuerzo valdría la pena.

Se encargo de darle una bonita infancia a su hermano, fue difícil saber que el no podía disfrutar de su niñez porque tenía que estar al pendiente de pagar todo tipo de cuentas, comprar juguetes y libros para su hermano.

Conoció a dos chicos increíbles cuando tenía diez años, en realidad ayudó a uno de ellos a sacar a un chico y una chica de un incendio, desde ese día se habían vuelto amigos, ninguno sabía todo lo que hacía takemichi para darle una vida estable a su hermano, pero cuando se enteraron empezaron a ayudarlo en todo lo que podían.

Koko buscaba opciones de trabajo para los tres, porque según el los tres necesitaban dinero, takemichi sabía que sólo lo hacían para mantenerlo a salvo de pervertidos y locos.

Cuando cumplió los catorce empezó a estudiar en uno de los mejores colegios de la ciudad, pensaba inscribir a kisaki allí también, pero este se negó porque quería seguir estudiando con su amiga hinata tachibana, takemichi solo conocía a la chica de ojo, jamás había intercambiado palabras con la chica, aceptó siempre había velado por la felicidad de su hermano y si lo hacía feliz estudiar en ese horrible instituto el lo iba a dejar.

Inupi y koko estudiaban con el, los tres tenían notas perfectas, habían ganado trofeos en campeonatos contra otras escuelas, inui por el lado de matemáticas había llevado a la escuela a las estatales, koko en deportes llevó a la escuela a un gran concurso de Basketball el cual su equipo ganó y takemichi llevó al club de cocina muy lejos, los tres eran estrellas y chicos impecables en la escuela. Pará el director ellos tres eran sus alumnos perfectos, esos que siempre dejaban el nombre de la escuela en alto.

Koko siempre pensaba en el dinero al igual que takemichi, ambos sabían lo que era pasar dificultades por no tenerlo, así que cuando koko cumplió los dieciocho abrió un bar con sus ahorros y los de takemichi, en estos momentos los bares eran de los más famosos de Japón, ambos ganaron mucho dinero con eso con dieciocho y dieciséis años tenían más dinero del que podían contar.

Eso fue un gran logro para takemichi tal vez más nunca en su vida iba a tener que pasar hambre ni maltratos de las demás personas.

Kisaki no sabía nada de esto, para el pequeño rubio su tío les mandaba dinero cada mes debido a que estaba fuera del país, eso le dijo takemichi, no quería preocupar a su hermano con problemas que el podía solucionar sólo.

Inupi quizo montar un restaurante, koko y takemichi lo ayudaron ahora tenían muchos restaurantes lujosos por todo Japón a su nombre, los tres ganaban mucho dinero y eso era increíble para todos, los tres siempre estaban en el primer bar que abrieron, era el más grande y lujoso que tenían, ese era su lugar de reuniones.

Después de años de eso, takemichi estaba en su último año de escuela ya con dieciocho años, inui y koko empezaron en la universidad hace un par de años para poner en regla todos los papeles de sus negocios, se podría decir que su vida era perfecta entonces ¿por que estaba pasando esto?.

—¿¡qué mierda te importa!? ¡Deja de meterte en mi vida! — una vez más kisaki volvió a tirar la puerta de su habitación.

Takemichi solo le preguntó quién demonios lo había golpeado porque los moretones que tenía en la cara no podían ser causados por una simple caída, suspiro y terminó de servir la cena ¿por qué su hermano había empezado a actuar como un Completo idiota?  ¿por qué siempre llegaba lleno de moretones por todos lados?.

—¡kisaki, si no comes hoy voy a dejar de darte dinero! — le grita, el también estaba enojado por la situación, había lidiando con los caprichos de su hermano durante toda su vida, pero definitivamente no iba a dejar que ese mocoso lo tratara mal, él que limpio sus mocos y lo peinó cuando iba a la escuela, no merecía tal trato.

La puerta de la habitación de kisaki se abrió y el rubio salió sentándose en la silla empezando a comer ignorando su presencia, ugh como le daban ganas de darle un par de nalgadas para que dejara de ser tan maleducado.

—quiero mi mesada — le dice pero takemichi lo ignora y continúa comiendo —no tienes el derecho de quitármelo, ¡tu no eres el que trabaja por ese dinero!

Takemichi apretó sus puños totalmente molesto, ¿el no era el que trabajaba por ese dinero? Ja, que le cuente otro chiste, él fue el que sacrifico todo para darle así sea un maldito pan para que no durmiera sin nada en es estómago, fue él el que se encargo de darle todo lo que tiene, el lindo penthouse donde vive, la linda ropa de marca que tiene, las cinco jodidas comidas al día, okey definitivamente estaba enojado.

—callate la maldita boca y termina de comer —le dice totalmente enojado, estaba harto de que su hermano no valorará lo mucho que se sacrifico para darle una buena vida — quiero que tengas una mentira creíble o me digas la maldita verdad de lo que te paso para cuando vuelva.

Le dice poniéndose de pie y caminar hacia su habitación, kisaki estaba, sorprendido, su hermano estaba muy molesto, solo lo había visto así dos veces, la primera fue cuando uno de sus profesores se atrevió a pegarle y la segunda fue cuando un tipo les dijo que eran unos malditos huérfanos sin hogar ni familia, ese día vio a takemichi pelear como una maldita bestia, takemichi siempre se había enojado por él, más no con él.

Continuó comiendo, su hermano siempre le dejaba el desayuno almuerzo y cena listos, más sus dos meriendas, entendía que su hermano se preocupara por él, ¿pero como le decía que lo molestaban en la escuela sin razón alguna? Que cada día le decían cosas más crueles y le hacían bromas pesadas, que era el objetivo de una pandilla despiadada y cruel, simplemente no podía, no quería que lastimaran a su hermano, no podría soportar perder a la única persona que siempre había estado con él desde la muerte de su madre.

Ni siquiera era la responsabilidad de takemichi cuidarlo, sin embargo se quedó junto a él y lo ayudó a afrontar todos sus problemas, lo cuido todas las veces que se enfermaba y lo ayudaba con su tarea cada vez que no podía hacerla solo.

No podía meter a su hermano en el ojo de la tormenta, el iba a afrontarlo solo, no iba a dejar que la kantomanji lastimara a su hermano mayor.

¡Holaaa, siempre quise escribir una historia así, llena de matoneo escolar y drama!

Espero y les guste mucho.

𝕻𝖗𝖔𝖇𝖑𝖊𝖒𝖆𝖙𝖎𝖈 𝖘𝖈𝖍𝖔𝖔𝖑Donde viven las historias. Descúbrelo ahora