𝕻𝖗𝖔𝖇𝖑𝖊𝖒𝖆𝖙𝖎𝖈 𝖘𝖈𝖍𝖔𝖔𝖑

⛧𝕿𝖍𝖎𝖗𝖙𝖞⛧

Cuando llegaron al bosque takemichi estaba muy molesto, pero no porque tuviera hambre o algo por el estilo, al contrario ya había comido horas antes ya qué cuando sanzu volvió trajo más comida y se la tiro a la cara debido a que mikey estaba dormido, su molestia se era a por que desde que bajaron del autobus las insectos no habían parado de perseguirlo, desde mosquitos entrenado a su boca hasta mariposas negras parándose en su cabello y hormigas picando sus brazos, por eso odiaba la naturaleza.

Detrás de él caminaba mikey muy al pendiente de que no se fuera a caer, incluso una de sus manos iba encajada en su cadera, su costosa maleta era llevada por mikey, takemichi lo hubiese mandado al demonio si no fuera porque no tenía fuerzas y las ganas de vomitar le hacían tropezarse.

-maldigo el día que pensé que venir a esta mierda iba a ser buena idea... -murmura enfadado cuando por segunda vez se resbaló con el fango, si no fuera por el rubio a su lado posiblemente hubiera caído -jodidas escuelas públicas y sus actividades de porquería.

Mikey lo miraba con cierta diversión, desde hace un rato escuchaba los murmullos del lindo chico a su lado, definitivamente el bosque no era un lugar para alguien como takemichi.

-si dejaras de quejarte tanto ya hubiésemos llegado -susurra en el oído de este y la verdad no mentía, ellos junto a sanzu eran los últimos.

Takemichi lo miro con una sonrisa algo coqueta -¿mikey-kun y si me cargas como un sirviente fiel? -pide escuchado el bufido molesto de sanzu.

-vuelve a llamarme así y te voy a dejar aquí tirado -contesta de forma burlona obteniendo la aprobación de sanzu.

-hazlo, me da igual. Solo llamaré a kazutora o izana para que me ayuden, no olvides que soy tu único ligue, pero tu no eres el mio, al contrario tengo a muchas personas detrás de mis huesos -el rostro de mikey fue todo un poema, sanzu por su lado sabía que el chico no mentía, podía ser un completo imbecil fastidioso y entrometido pero más de una vez había escuchado en el baño como era alagado, hasta por kakucho, sin olvidar que su físico no estaba nada mal... lo vio por "casualidad" en las duchas.

-puedo acabar con esos imbéciles en cuestión de minutos -susurra el rubio para después tomarlo por la cintura y cargarlo como si fuera una princesa.

Takemichi sonrió mientras le acariciaba el cabello como si fuera un perro, sanzu observaba esto desde lejos con total molestia, su rey se estaba volviendo suave con ese idiota, eso no le estaba gustando para nada.

—mikey tienes la cara muy roja —se burla takemichi —¿es porque estas tocando mis piernas? No me quiero imaginar como te pondrás cuando no tenga ropa.

Mikey se ahogo con su propia saliva y el rubio solo empezó a reírse mientras apoyaba si cabeza contra su pecho, ante la vibracion de su risa mikey mordió su labio y suspiro con nerviosismo.
Sanzu atrás trataba de pensar en algo para que su rey le pusiera un alto a ese chico, a este paso si el rubio se lo pedía su rey era capaz de deshacer la kanto.

Finalmente llegaron, takemichi fue bajado por mikey si rostro molesto ahora se mostraba asqueado —¿nos quedaremos en esta porquería?

Izana estaba frente a él, al escucharlo empezó a reírse. Pero takemichi estaba preguntando enserio, eran varias cabañas en mal estado una más lejos que la otra, en el medio había un círculo con rocas donde había madera mojada y ya, literal eso era todo, empezaba a pensar que lo más divertido por hacer era picar insectos con palos.

—Muy bien chicos los grupos de seis integrantes y las chicas de cuatro ya están formados, por favor vayan en orden y busquen su nombre y el número de su cabaña —takemichi miro a su hermano, esto no podía ser real.