Te veo...

La gran pérdida. (Parte 5).

Disculpen el contratiempo, lectores 😣
A mí esposo le dió Covid y por su asma requirió muchos cuidados y vigilancia...

Afortunadamente ya está mucho mejor y sin mayores problemas ❤️❤️❤️❤️

Continuamos!! ✨✨✨

5/?

Al notar que no importaba lo que hiciera, ella no abriría sus ojos otra vez, se desmoronó.

No importó cuánto la llamó y le suplicó... Ella no volvió a despertar.

No recordaba mucho más allá, después.

Recordaba haber escuchado a su hijo llorar desconsolado nuevamente.
Recordaba a muchos intentando calmarlo...
Recordaba haber salido corriendo, pero nada más.

Corrió y corrió toda la madrugada y parte de la mañana a través del fango y la hierba empapada que la tormenta había dejado atrás.

Ni siquiera supo qué dirección tomó o a dónde quería ir exactamente.
Y es que no había lugar al que quisiera ir.
Solo quería salir de ahí.

Solo quería huir.

Como si el alejarse lo suficiente hiciera desaparecer todo.
Cómo si la distancia lo pudiera convertir en otra persona; alguien a quien no le había sucedido aquello...

Quería que todo desapareciera.

Se encontró entonces pasada la media tarde, sentado en la cima de un inmenso risco, al límite de todo territorio conocido, mientras veía y escuchaba las olas del océano golpear furiosas las rocas del peñasco...

La neblina empañaba el horizonte por completo ahí...
Cómo si no existiera nada más adelante.

Pensó que nada se asemejaba más a lo que sentía ahora...
No podía ver nada.
No podía ver un "después" de Ayame... Cómo podría??!!

Todo lo que veía ahora era exactamente lo que podía ver en ese risco: nada.

Después de ella, no había nada.
O eso era lo que sentía ahora...

Su pensar fué abatido entonces, por un par de voces que lo llamaron al unísono y que reconoció inmediatamente...

-------- KOGA!!!!!

Entornó los ojos con molestia.
Ciertamente no tenía ni ganas de moverse de su lugar, pero al final, se secó las lágrimas lo mejor que pudo, se puso de pié y dió media vuelta, a tiempo para encontrarse con los recién llegados...

------- Oh, santo, cielo..!!! ------ jadeaba Ginta, deteniéndose finalmente y apoyando sus manos en sus rodillas para descansar.

------- Gracias a los dioses que te encontramos... ------ Jadeaba también Hakkaku.

----- Qué hacen aquí?? ------- Cuestionó Koga, queriendo sonar molesto, pero su dolor lo opacó todo, haciendo que aquella pregunta sonara más bien débil... Cansada... Rota. Dejando también escapar más lágrimas de sus ojos sin que siquiera lo pudiera anticipar. 

------- Cómo que qué hacemos aquí??!! ------- Reprendió Ginta, logrando incorporarse entonces... -------- Venimos a buscarte!! Te fuiste así nada más!!

-------- Tienes que regresar, Koga!! ------ Decía Hakkaku con firmeza. ------ La manada te necesita!! Muchos murieron!! Los sobrevivientes del clan del sur están prisioneros, Kion no sabe que hacer con ellos...!!

-------- Y más importante, aún, Okami te necesita!! La señora Kagome dice que se niega a comer de las nodrizas y no ha dejado de llorar...

-------- Entendemos que es difícil para ti...

------- No, no lo entienden!!!! ------- Exclamó el joven líder. ------- Ustedes no lo entienden, Hakkaku!!! Y créanme que no les deseo que alguna vez puedan entenderlo... ------- Se talló los ojos, luchando por apartar sus lágrimas... ------ Ayame podrá haber sido su amiga... Pero ella... Ella era mi compañera... Saben?
Se suponía que pasaríamos la eternidad juntos y ahora... Ahora me queda una jodida eternidad solo!!! Entienden????!!! Y... Y yo sé que al principio no fuí más que un imbécil con ella, MIERDA, LO SÉ!!!! Pero... ------- Su rostro entero y sus puños se apretaron.
Su boca mostró sus colmillos y el dolor ensombreció sus ojos mientras ardientes lágrimas escurrían por sus mejillas ------ Pero... No saben.... No saben cuánto la amé... ------ Sollozó. ------- La amé tanto...!!!!... NO PUEDO SOLO DEJARLA IR, ENTIENDEN???!!! USTEDES NO PUEDEN ENTENDER CUÁNTO LA LA AMÉ!!!!!

-------- Claro que podemos, Koga!!! ------- Bramó Hakkaku. -------- Nosotros y toda la manada podemos verlo!!! Lo vemos en Okami!!!!

-------- Sabemos bien que tuviste que amar demasiado a Ayame primero para poder amar y desear a Okami... Lo cuidaste muchísimo, Koga... Los cuidaste a ambos... Nadie pone tanto cuidado en algo por lo que siente menos que amor...

------- Y Ayame te amaba tanto que llevó a ese cachorro todo éste tiempo, dió todo de sí para traerlo al mundo y luego te lo entregó a ti!!!! Y no solo porque eres su padre, sino porque sabe que nadie será capaz de amarlo más que tú!! Ella sabía cuánto la amabas, lo sentía!!! Y estaba segura de que amarías a Okami de la misma manera...

-------- No puedo... ------ lloraba Koga... ------- No puedo hacerlo, chicos... No sin ella...

-------- Entonces... Entonces qué, Koga? -------- Lloraba ahora también Hakkaku. ------- Lo... Lo entregarás a las matronas?? Lo... Lo vas a dejar así nada más?

------- Él está sufriendo también, Koga!! Sí, es cierto que perdiste a tu compañera, pero él perdió a su mamá!! Vas a dejar que pierda a su padre también??!

-------- Y... Y cómo se supone... Cómo se supone que voy a criarlo, eh??!! Qué se supone que le voy a decir que pasó con su madre??! Cómo se lo voy a explicar??!! Y si acaba odiándome??!!! Y si... Y si no lo hago bien??!! Cómo se supone que sabré qué es lo correcto para él??!!!

-------- Lo que le pasó a Ayame no fué culpa tuya, Koga! ------ Aseguraba Ginta. ------- Créeme que cuando llegue el momento de que lo sepa, lo entenderá!! Podrá entender que no pudiste hacer nada por su madre, pero crees que podrá entender que lo abandonaras??!!! 

------- Es tu cachorro... No importa lo que creas o lo poco capaz que te sientas ahora... Nadie va a cuidarlo como tú. Nadie va a amarlo como tú... A nadie va a importarle tanto como a tí... Eres su padre, Koga y... Sabemos que justo ahora, todo lo que sientes es dolor y miedo... Y ese bebé también lo siente... Eres el único que entiende realmente como se siente él y él es el único que sabe cómo te sientes tú... Se lo prometiste a Ayame... Ambos se lo prometieron. Tienen que cuidarse uno al otro ahora.
Son lo único que les queda.
Es lo único que te queda de Ayame, Koga, por favor... Está bien que tengas miedo. Está bien que te duela, pero... No estás solo... No  dejes que tu bebé esté solo.

El capitán soltó un sollozo y finalmente asintió...
Sus amigos tenían razón... En todas las últimas veces que él la había cagado y ellos habían acudido a hacerlo entrar en razón, habían sido certeros.
Para ese punto, no sabía que habría hecho sin ellos...

Los tres se abrazaron fuertemente, mientras expresaban lo mucho que lamentaban aquella situación...
Tal vez no había mayores remedios... Solo podían continuar aunque doliera, pero al menos ahora, podían ver cómo el sol finalmente dispersaba la neblina en el horizonte...