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Locura de un enamorado

-Su majestad,el emperador le envió un regalo

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-Su majestad,el emperador le envió un regalo.-dijo una de sus damas de compañía.

-¿Un regalo del emperador?

-Tal vez su majestad quiere arreglar todo lo sucedido,ya que encerró a la señorita Rashta por golpear a la señorita Afrodita.

-Bueno,que me traigan el regalo.

Era un gran ramo de veinticinco rosas contadas que venían en un jarrón con un decorado color rojo,junto con una carta en un envoltorio simple.Se sorprendió sinceramente que le enviara un regalo y menos rosas cuando estos meses ni la miraba a cara tras conocer a Rashta,no conocía la razón exacta de su cambio de actitud.

-Es un detalle.-dijo mientras leía el contenido de la carta.

"-Estoy agradecido con usted emperatriz por convencer a la señorita Afrodita,quiero compensártelo,¿tal vez quiera cenar conmigo esta noche?-"

-¿Qué dice en la carta su majestad?-preguntó Laura,una de sus damas de compañía.

-Quiere cenar conmigo esta noche..

-¿Va a aceptar?

-Claro que sí,después de todo es una petición del emperador.-dobló la hoja y la puso a un lado.

|•••|

Mientras tanto Afrodita se encontraba en el ducado Danais porque probablemente era su último día ahí antes de irse al palacio por petición del emperador,ya que todas las concubinas vivían en el palacio imperial para asegurarse de que no tuviera más relación amorosa con otro a parte del emperador.

El olor de rosas que inundaban sus fosas nasales,uno cual no volvería a sentir.Hermosas flores que fueron plantadas por su misma madre antes de morir en un estado más que lamentable y deplorable,esta mansion le traía recuerdos dolorosos.El jardín de rosas del ducado era una parte importante de ella,ya que era lo que quedaba de su madre,Irina,en este cruel mundo.

-¿Sigues aquí?-su padre apareció tras ella.-Pensé que te fuiste esta mañana que estaba en el mercado.

-Quise despedirme de usted,esta casa de memorias es simplemente...

-Angustiante,he vivido aquí toda mi vida.

-Tal vez sea un adiós pero le visitaré cuando pueda,sabes que estoy en buenas manos y que no me faltará nada.

𝘼𝙁𝙍𝙊𝘿𝙄𝙏𝘼 𝘿𝘼𝙉𝘼𝙄𝙎  ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora