All that I want is you... (KOOKV/KOOKTAE)

Capítulo 47: I belong to you.

Dos meses más pasaron con rapidez, Jungkook tenía un cúmulo de sentimientos revoloteando en el interior de su cabeza. Aún no podía creer que el precioso doncel que llamó su atención a sus diecinueve años, era el mismo que ahora estaba sentado a su lado con una enorme sonrisa en el rostro, disfrutando de la cena de ensayo junto a sus familiares y amigos más cercanos.

El salón estaba hermosamente decorado con luces y una gran mesa larga en la que se encontraban todos sentados conversando amenamente. El evento se estaba llevando a cabo en uno de los salones del Country Club, al día siguiente sería la recepción para los invitados en general, la cual se se desarrollaría en el jardín. Ese era el mismo sitio en el que los futuros esposos se habían dado su primer beso luego de años de distanciamiento, donde ambos aceptaron que su amor no había muerto y que querían luchar por su relación.

Ani, la wedding planner del evento, definitivamente era tan solicitada por su excelente trabajo y profesionalismo, pues todo lucía justo como Taehyung y Jungkook lo eligieron. Si eso era en la cena de ensayo, no podían esperar a ver el altar bajo el que se darían el "acepto", seguramente sería etéreo.

Todas las personas que les importaban a los novios estaban ahí, desde los abuelos de Jungkook, Sana y su actual pareja, pasando por Jimin, Yoongi, Lisa, Choi Soobin y los señores Kim. Incluso Namjoon se encontraba ahí, había llegado desde Italia apenas unos días antes ya que no quería perderse a su amigo de la infancia contrayendo nupcias, en verdad lo alegraba ser testigo de que por fin sentara cabeza con alguien como Taehyung.

También estaba Hoseok, un ex compañero de la Universidad, el cual había sido requerido junto a su pareja pues era buen amigo de los dos donceles. Para grata sorpresa de todos, Park Bogum también llegó al evento por invitación de Taehyung y Jungkook, más no lo hizo solo, sino con un sonriente Kim Seok-Jin enganchado a su brazo.

Eran una preciosa pareja, los dos eran muy atractivos. Bogum parecía muy a gusto con la actitud tan efusiva e inesperada de su Jinnie, quien no paraba de hablar y contar chistes que quizá solo él entendía, pero que de todas maneras a Park lo hacían sonreír porque adoraba el sonido de su risa.

Fue inesperado hasta para Jimin y Taehyung, pues aunque aún mantenían comunicación entre los tres para saber cómo se encontraban, Bogum no había querido revelar su relación y Jin estuvo de acuerdo, solo ellos dos entendían la forma en que funcionaban y se veían muy a gusto juntos.

Lo mejor es que las cosas sucedieron de manera natural pues Jin y Bogum trabajaban juntos en la empresa de Kim Tae-Pyung en Japón. La convivencia y el entendimiento mutuo los llevó a su relación, luego a mudarse juntos para comprobrar si lo que sentían era solo atracción o si de verdad se acomplaban el uno al otro.

Los donceles estaban felices por su hyung pues era un chico excelente en todos los sentidos, merecía ser feliz y encontrar un amor que le perteneciera únicamente a él. Al momento del reencuentro el ambiente fue como si nunca hubieran pasado los años, Bogum y Jin le tenían un enorme aprecio a Taehyung y Jimin.

Taehyung lo conversó con Jungkook antes de invitar a su hyung pues la boda era de ambos y lo que menos quería era que el padre de su bichito se sintiera mal o incómodo. Lo sorprendió la madurez con la que el pelinegro le respondió, pues lejos de estar celoso o molesto por lo que Kim había vivido con su ex, estaba agradecido porque el chico siempre lo supo respetar y estar a su lado cuando más lo necesitaba, siendo un gran soporte en su vida.

Hizo justo lo que Jungkook le pidió en algún momento antes de emprender camino a Busán. Cuidó de Taehyung, ninguno se había metido en la relación del otro mientras estuvieron con el doncelito, además de que Jeon sabía lo importante que el chico era para su prometido pues desde niños habían sido amigos. Junto a Jimin fueron durante años un trío inseparable, aunado a ello, el pelinegro estaba seguro del amor que le profesaba su castañito, no había nada que temer.