All that I want is you... (KOOKV/KOOKTAE)

Capítulo 11: Buscando culpables.

Taehyung y su amigo se encontraban de nuevo camino a casa del primero, durante todo el viaje de vuelta no dijeron gran cosa, su mente aún estaba procesando todo lo que había sucedido unos minutos antes en el centro comercial. No entendía a Jungkook, lo engañó pero de igual manera lo buscaba para tratar de excusarse, inclusive lloró y eso lo confundía.

¿Jungkook lo quería? ¿por qué lloraba si fue él quien cometió la traición? 

Simplemente podía dejarlo en paz y seguir con su vida, ya fuera con Rosé o con quien él quisiera. Amaba a ese chico con todo su corazón y le dolía horrible que todo haya sucedido de esa manera, pero así eran las cosas y no podía simplemente perdonarlo y pretender que todo estaba bien.

El termino "borrón y cuenta nueva" no aplicaba porque toda esa situación lo afectaba a gran escala. Un nuevo comienzo con Jeon Jungkook sería volver a autoengañarse, él lo sabía perfecto.

—¿Te sientes bien? —preguntó Bogum a su lado. Taehyung volteó a verlo, estaba sentado en el asiento del copiloto, ya no lloraba, más su vista se notaba algo irritada por las lágrimas que había derramado con anterioridad.

Se encontraban estacionados frente a la mansión del castañito, quien durante todo el camino se la pasó mirando el paisaje con la cabeza en otro mundo, se sentía muy apenado por lo que Jungkook le había hecho a Bogum por su culpa, tanto que ni siquiera tenía el valor para mirarlo a los ojos por más de tres segundos. 

Decidieron que no irían al departamento de Jimin, Taehyung se ofreció para curar las heridas de su amigo, era lo mínimo que podía hacer luego de que lo defendió como lo hizo. 

—Sí, no te preocupes —dijo con la voz un poco llorosa aún, ver a su ex novio después de enterarse de su infidelidad le dolía de una forma impresionante—. Perdón por lo de hoy, nunca pensé que Jungkook iría a donde estábamos. Para ser sincero, no sé ni cómo se enteró.

—No te preocupes, Tae, no pasa nada, casi no me duele —pero claro que sí pasaba, las heridas y sangre que comenzaban a secarse en su rostro eran la muestra de ello. Su pómulo hinchado y el labio partido por un costado, seguramente era muy doloroso pero aún así Park Bogum le sonreía para no hacerlo sentir peor.

Él era tan amable al fingir que no pasaba nada solo para que no se pusiera más triste.

—No me mientas, sé que no es así, hyung... mira como te dejó Jeon —el castañito tomó delicadamente con su mano más próxima el mentón del chico, lo estaba supervisando y tenía el ceño fruncido mientras lo hacía. 

Bogum puso un dedo sobre su labios para que callara, acercándose un poco al doncel.

—De verdad Tata, no pasa nada, me preocupa más cómo te sientes tú —Park recorría su rostro con la mirada, pasando de sus ojitos a su nariz respingadita, deteniéndose en esos labios rosados que parecían tan suaves. 

Quería besarlo, pero estaba consciente de que no era lo correcto, por lo que solo podía contemplarlo en la posición en la que estaban.

De repente el celular de Taehyung comenzó a sonar y se sobresaltó, llevando las manos de regreso a su regazo y buscando entre las bolsas de su pantalón el aparato. Cuando lo tuvo en la mano miró la pantalla y se percató de que era Jimin. No le dio tantas explicaciones, solo le comentó que se había topado con Jeon y éste tuvo una pelea con su primo, por lo que ahora estaban en su casa para curarlo. Tendrían que posponer la cena entre amigos para otro día.

Por supuesto que el rubio estaba indignado por el cinismo de Jeon, sin embargo, comprendió que no era momento para quejarse y solo le contestó que entendía, que ya habría otra oportunidad de cenar los tres juntos en su departamento, no quería abrumar a su mejor amigo.