Capítulo 40: Nothing like us.

18.8K 1.8K 1.1K
                                    

Jungkook reaccionó apenas Taehyung salía a toda prisa del restaurante... ¡No podía dejar ir a su novio en ese estado! ¡Rosé mentía!

Se levantó de inmediato de su asiento sin importarle los presentes, la pelirubia intentó tocarlo para tratar de detenerlo cuando pasó por su lado, pero Jungkook logró esquivarla mientras le dedicaba la peor de las miradas, odiaba tenerla cerca. Odiaba todo lo que la involucrara a ella.

¡Eso no podía estar sucediendo! definitivamente él no podía tener un hijo porque en cada ocasión que estuvo con otras personas fue muy cuidadoso al respecto, ella no fue la excepción. En aquel entonces no quería ninguna clase de compromiso, por lo que siempre se aseguraba de usar protección con sus conquistas de un noche y revisar los condones para deshecharlos una vez que terminaba.

Sin embargo, aunque su corazón le decía que ese niño no era nada suyo, su mente le recordaba que la vez en que Taehyung los encontró follando en la fiesta, él había estado tan desesperado por salir corriendo detrás del doncel que solo se había quitado el condón sin si quiera verificarlo ni ver por donde lo tiraba.

Todo era un jodido desastre, su propia mente era un caos en ese momento. Solo quería ver a Taehyung y que este le asegurara que resolverían ese problema, que estarían bien porque se amaban.

Corrió lo más rápido que sus piernas le permitieron, llegando a la entrada del lugar pero su novio ya no estaba ahí. Preguntó al valet parking, hasta que le dijeron que habían visto al chico dirigirse hacia el estacionamiento del restaurante, donde se encontraba la salida.

Se dirigió al lugar de inmediato, percatándose de que en el estacionamiento no habían más personas, solo automóviles, así que pudo visualizar a su chico de espaldas a él. Al parecer estaba haciendo una llamada telefónica, por lo que no lo notó hasta que estuvo cerca.

—Tae... —dijo con la respiración agitada de tanto correr, lo abrazó por detrás y sintió al doncel temblar bajo sus brazos—.Yo te juro que no sabía nada de esto, no sé que hace ella aquí y te aseguro que ese niño no es mio. ¡Ella miente!

—Suéltame —pidió con indiferencia. Jungkook tenía miedo de soltarlo y que se fuera de su lado, esta vez, para siempre. Negó, apretándolo más fuerte contra su pecho, pero el castañito se volvió a remover hasta que logró safarse—. Te he pedido que me sueltes, Jungkook.

Taehyung volteó hacia él y sus miradas se conectaron. Los ojitos almendrados del doncel estaban rojos y llorosos, como si dentro de ellos se apresara un gran diluvio de infelicidad y decepción, pero no se estaba permitiendo derramar ninguna sola de sus lágrimas.

No lo haría enfrente de Roseanne ni de él nunca más.

—Mi amor, tienes que creerme... por favor —el pelinegro trataba de explicarse, pero le resultaba difícil por el muro que el doncel estaba constuyendo entre los dos—. No sabía nada, y sé que ese niño no tiene la culpa y que mal que tenga una madre como la que le tocó porque sé perfecto que nadie elige a sus padres, pero te aseguro que yo jamás volví a tener contacto con ella, no sabía que estuvo embarazada ni nada al respecto. No te oculté nada, he sido sincero contigo en todo momento.

Taehyung no decía nada y su silencio le estaba doliendo más que cualquier reclamo que pudiera hacerle. Porque Kim no era de las personas que hacía drama y reclamaba, sino más bien de las que simplemente se iban cuando creía que no había nada que rescatar. Jeon estaba mareado, la desesperación e incertidumbre lo estaban consumiendo internamente.

—¿Cómo puedes estar tan seguro de eso? ¿de que no eres su padre? —cuestionó en voz baja, apenas audible—. No sé cuantos años tenga con exactitud ese niño, pero parecen congruentes con los que han pasado desde aquella vez.

All that I want is you... (KOOKV/KOOKTAE)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora