Capítulo 39: Cumpleaños

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EVA

15:21 p.m.

Paula: — Bueno, ya os he depositado la paga de este mes. Habéis trabajado muy bien, como siempre

Josep: — ¡Espero que me hayas dado un aumento!

Paula: — Por ser vacaciones, sí, pero solo esta vez. No te acostumbres

— Os echaré de menos todo este mes

Paula: — Yo también os extrañaré

Josep: — Y yo, pero me dan más ganas de irme a Cancún a disfrutar de las playas

Paula: — ¿Llevarás a tu novio?

Josep: — ¡No es mi novio!

— Pero la última vez nos dijiste que os disteis un beso

Josep: — Pero eso no significa nada

— Así dijo Paula cuando conoció a Julián, ¡míralos ahora, comiéndose hasta enfrente de la gente sin tener vergüenza alguna!

Paula: — ¡Ay sí! Mira quién lo dice, quién tiene a un príncipe azul de novio que coge bien

Josep: — ¿Coge bien?

— Yo no he dicho que eso

Paula: — No lo has dicho, pero se le nota

Josep: — Ya quisiera uno así

Paula: — Menos mal que el mío sí sabe hacerlo. ¿El tuyo no?

Josep: — No lo sé. Solo nos hemos acostado una vez y fue muy tranquilo, quizás porque era nuestra primera vez juntos

Paula: — Tal vez, pero no te creas lo que muestra. Quién sabe si llega algún día y te sorprende, te pone dos esposas y te hace una escena de cincuenta sombras de Grey — dijo y reímos.

Josep: — Ojalá, bueno, chicas, nos vemos en septiembre

Paula: — Vale, nos vemos.

— ¡Adiós, Josep, pásala bien tú y tu futuro novio!

Josep: — Gracias, Eva

Paula: — Adiós, Josep, ya nos veremos

Josep: — Adiós, Paula

Todos nos despedimos y cerramos la peluquería por vacaciones. Tomaríamos todo el mes de agosto y volveríamos a abrir en septiembre.

Después, me metí en el auto.

— Hola, García

García: — Buenas tardes — saludó con una sonrisa y de repente, recibí una llamada del señor Leonardo.

— Hola, señor, ¿cómo está?

Leonardo: — Hola, Eva. Estoy bien, gracias por preguntar. Te llamaba para que felicitaras a Matías de mi parte. Estoy en una reunión importante en Italia y no puedo volver a España. Quisiera estar ahí, pero no puedo. Sin embargo, espero que me perdone por no estar. He intentado comunicarme con él, pero no contesta el teléfono porque recuerdo que también tenía una reunión hoy, quizás esté muy ocupado

— Sí, me dijo que tenía una reunión hoy, pero ¿felicitarlo para qué?

Leonardo: — Por su cumpleaños, ¿no lo sabías?

— No

Leonardo: — Pues sí, hoy es. Lo siento, pero tengo que colgar porque tengo que volver a la reunión

— Vale, no hay problema

Leonardo: — Adiós y pásala bien tú y Matías

— Gracias

El Secreto De Mi AbogadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora