Mi vecino misterioso

¡Qué comience nuestra aventura!

¡Hola de nuevo! He aquí otro capítulo más. Les voy a hacer una sugerencia que me parece muy divertida. Cuando vean este símbolo (#), quiero que pongan la canción "Summer" de Calvin Harris. Cuando le den "play" ya sabrán por qué me parece divertido. Va en una escena que me pareció perfecto poner la canción. Si no les gusta la idea, la quitan 😜

Bueno disfruten mucho el capítulo. Gracias nuevamente por sus votos y comentarios. Me hacen muy feliz y eso me motiva. Capítulo dedicado a mi hermoso @PlinioMartnez, por siempre motivarme a escribir... Los quiere, Karina Lizbeth❤️

P.D: Manuel en multimedia OMG😱

Capítulo: ¡Qué comience nuestra aventura!

Me levanté de mi cama, exaltada. ¿Por qué demonios Jason estaba ahí? ¡En mi casa! ¡A las ocho de la mañana! ¡Un sábado! ¡Tenía que ser una broma de Elizabeth!

- ¡No me jodas, Elizabeth!-le dije, mientras me ponía las zapatillas.

- ¡No lo hago! Jason está afuera y dice que no se va a ir hasta que te vea-me dijo, tranquilamente. ¡Jason Thompson estaba en mi casa y ella estaba tranquila! Caminé hacia mi ventana y vi a Jason recostado de su auto, esperándome. ¿Era enserio? ¿Qué le pasaba a ese chico? ¿Enserio no se daba por vencido nunca? ¡Ugh...!

- ¡Tendré que ir!-murmuré para mí misma.

Fui al baño a lavarme la boca. Luego, me cambié rápido y bajé a la planta baja. Mamá estaba preparando el desayuno y Sebastián estaba sentado en la mesa. Patricio seguía durmiendo o eso supuse.

- ¿Quién es ese?-Preguntó mamá, rápidamente cuando me vio. Yo traté de disimular mi nerviosismo.

-Es un compañero de la escuela, mamá-balbuceé, mientras me hacía una coleta. Elizabeth ya había bajado y me miraba con los ojos como platos.

-Mmm... ¿Y qué hace aquí?-Preguntó mamá, entre molesta y curiosa.

-No lo sé. A eso voy...

Salí de mi casa y me dirigí hacia Jason, muy molesta. ¿Quién demonios se creía para venir a mi casa así porque sí?

- ¿Qué haces aquí, Jason?-Le espeté y él tenía una sonrisa coqueta.

- Hey, primero lo primero. Buenos días, preciosa-dijo, acariciando mi barbilla y yo aparté la mano de un tirón.

-Primero que nada, no me digas preciosa y segundo, ¿a qué viniste?-Le dije, ya irritada. Ese chico tenía la habilidad de hacerme enojar enseguida.

-Está bien, está bien- dijo, moviendo sus manos como en rendimiento-. Vine, porque no me has contestado mi pregunta.

-No pienso ir al baile contigo, Jason- le dije, poniendo los ojos en blanco. Él rió.

-Vamos, nena, sabes que quieres ir. No te hagas la difícil.

- ¿Por qué piensas que quiero ir al baile con un cretino como tú?-Le dije, riendo falsamente.

- Porque ninguna se resiste a mí. Además, no creo que logres ir con alguien más. Nadie como yo-dijo, con su tono egocéntrico de siempre. No soportaba a ese imbécil.

- Mira, lárgate de mi casa. Ya te dije que no pienso ir contigo al baile. Por Dios, déjame en paz-le dije, exasperada. No aguantaba un segundo más con ese cretino.

-No me pienso ir hasta que aceptes. Te lo preguntaré formalmente. ¿Quieres ir al baile conmigo?

-Creo que ya la señorita te dijo que no-habló una voz ronca. Era Derek y se dirigía hacia nosotros. Mi corazón se paralizó. Él tenía la vista fija en Jason. No me miró ni por un segundo. Tenía su rostro tenso y su mandíbula apretada. ¡Dios mío! Temía de lo que pudiera pasar, pero tenía que conservar la calma.