Familia Corcega López

43. ¿Qué serán?

Ari y Temo se preparaban para ir a la cita del ultrasonido, este momento sería especial porque esperaban que los bebés se dejaran ver para saber qué serían.

-¿Estás listo?- preguntó Ari.
-Si, hoy nuevamente veremos a nuestros bebés- dijo Temo acariciando su pequeña pancita-. Ojalá que se dejen ver.
-Si, así ya podremos elegir sus nombres. Sean lo que sean van a ser recibidos con mucho amor.
-Me encanta que seas tan buen papá, Ari. Te amo.
-Te amo más, amor. Tú también eres un maravilloso papá, siempre te lo he dicho.

Luego de unos cuantos besitos ambos se fueron a su cita de ultrasonido.

Estaban en el hospital esperando su turno, Temo estaba recargado en el hombro de Ari mientras ambos acariciaban su pancita.

-¿Cuauhtémoc López?- lo llamó un doctor.

La pareja se levantó y entraron al consultorio, seguían sintiendo la misma emoción que sintieron la primera vez que fueron.

-Hola Aristóteles y Cuauhtémoc- habló el doctor-. Soy el doctor Martin y solo hoy haré tu ultrasonido. El doctor Cooper me comentó que ya estás en el quinto mes y ya es cuando probablemente los bebés se dejen ver. Al ser familiar quiere que sea sorpresa y por ello me pidió que yo lo hiciera.
-Conocemos muy bien a Robert y sabíamos que pasaría esto- dijo Ari-. Pero de verdad queremos que sea una sorpresa para la familia.
-Muy bien, pasen de este lado.

Temo se acostó en la camilla y el doctor puso el gel en su pancita, el castaño tomaba la mano de su esposo. El doctor comenzó a pasar el aparato por el vientre de Temo y en la pantalla se veían los bebés. La pareja sonreía al ver a sus hijos, ya habían crecido un poco más desde la última vez que los vieron.

-Aún no conocemos sus caritas pero sé que son hermosos- dijo Ari sonriendo.
-Serán hermosos porque se parecerán a ti- dijo Temo dándole un beso a su esposo.

Mientras el doctor seguía con la revisión Temo se quedó pensando lo que había dicho el doctor cuando llegaron, Robert de verdad quería que fuera una sorpresa y eso le dió una idea.

-Chicos, buenas noticias- dijo el doctor mirando la pantalla-. Los bebés se dejaron ver.
-¡¿Qué son?!- preguntó Ari emocionado.
-Son...
-Espere doctor- dijo Temo-. ¿Nos puede anotar la respuesta en un papelito?
-Claro que si, es más, se los voy a guardar en un sobre.
-Tahi, sé que te emociona saber qué serán y ya estamos organizando la fiesta para la revelación, pero quiero que también sea sorpresa para nosotras.
-No te preocupes, Tahi. Me parece una increíble idea. Lo importante es que nuestros bebés están bien.

Se dieron un beso y después de la revisión se fueron, no irían directo a casa porque querían esperar a que sus hijas salieran de la escuela para ir a comprar todo lo de la fiesta. Llegaron a un parque y se sentaron en una banca.

-Tahi, si quieres que también sea una sorpresa para nosotros lo de los bebés ¿cómo le haremos para lo de la fiesta?- preguntó Ari.
-Pensé en todo y solo dos personitas nos ayudarán con ello- dijo Temo.
-¿Quiénes?

Anya y Nidia ya se encontraban con sus papás paseando por el centro, iban planeando todo lo de la fiesta y Temo les contó lo que estaba planeando.

-¡¿De verdad quieren que nosotras hagamos lo de la revelación de género?!- preguntaron emocionadas.
-Claro hijas, ustedes tienen una gran creatividad y queremos que hagan algo sorprendente tanto para nosotros como para la familia- dijo Temo sonriendo-. ¿Qué dicen?
-¡Si, si, queremos ayudarlos!

Temo les entregó el sobre a sus hijas, ya lo abrirían después mientras elegían la idea para la revelación.