Cayden.
Esta casa estaba jugando con mi poca estabilidad emocional y mental. Emilia se encontraba de luto, lloraba casi todo el día por la muerte de su supuesto esposo, que si mal no recuerdo, ella no lo amaba, pero su pantomima de ser la viuda perfecta, la verdad que me estaba sacando de quicio, por eso había aceptado con gusto viajar a Alemania para ponerme al día junto con Noah y Sasha.
Según mi amigo quería usar eso de que soy su nuevo abogado interino para hacer que Noah focalice un poco su cabeza en algo que no sea solo Kate, el bebé o su enfermedad.Esto sería una minis vacaciones de mi maldita vida.
Sevilla esta siendo una tortura.
— ¿Dónde vas? — inquiere el que debo llamar padre por obligación viendo mi valija.
— Viajo a Alemania unos días — contesto.
— ¿A qué?.
— Mi mejor amigo es lider de la Bratva, seré su abogado en algunas cuestiones...
— Me parece perfecto. Tener de aliado al rey de la Bratva garantiza muchas ventajas.
Ruedo los ojos.
A mi no me importa la mafia.
Se escucha un fuerte grito, todos otra vez corren hasta Emilia que gritaba como una loca desquiciada. Se escucha que piden una ambulancia, a mi me importa un carajo y aprovecho esa distracción para salir de esa casa. Ya mi guardaespaldas me esperaba con el auto en marcha para llevarme directo al aeropuerto.
Adiós actuación.
Berlín.
Cuando llego a esa ciudad, un largo suspiro sale de mis labios y mi cabeza piensa automáticamente en ella. Aquí terminó todo, sus mentiras, todo salió a la luz y es dónde tome la decisión de unirme a la mafia.
— Señor Salvatore — dicen cuando salgo del aeropuerto.
— ¿Si? — cuestiono.
— Soy Anker, jefe de seguridad del señor Sokolov y lo estabamoz esperando — me informa.
— ¿De cuál Sokolov? — inquiero.
— Del mejor de todos — escucho la voz de mi amigo Sasha.
Negando mi cabeza, me acerco a él y nos estrechamos en un abrazo.
— Señor rey de la Bratva — bromeo.
— En algún momento iba a suceder — contesta encogiendo sus hombros.
— ¿Y qué tal la organización? — consulto mientras subimos al auto.
— Son un dolor en el trasero. Los rebeldes atacaron la organización de mis tías y eso fue la gota que rebasó mi paciencia — me cuenta suspirando.
— ¿Y cómo haces con Mackenzie?.
— Le pedí un tiempo a Inzie ...
— Espera. ¡Qué! — exclamo sorprendido.
— Pasaron muchas cosas estas semanas, Cayden. Te contaré, pero esto no puedo saberlo Katherine, no quiero preocuparla más en su estado — me pide.
— No diré nada — afirmo. — ¿Pero qué paso?.
Me toma por sorpresa, porque no me esperaba algo como esto de pedirle un tiempo a mi prima, más sabiendo los sentimientos fuertes que ambos tienen uno por el otro.
— Me mintieron treinta años. De pequeño siempre quise saber quien era mi padre y saberlo ahora me hace sentir una mierda. Me odio a mi mismo — dice mirando por la ventanilla del auto.
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Difícil de Entender (6° SAP)
RomanceSexto libro de la Saga Atracciones Peligrosas. Todo tiene un límite. Cuando se toca fondo caes en la realidad de todo lo que hiciste mal durante toda la vida. Los excesos y descontrol sólo traen más problemas, eso le sucede a Cayden. Cayó en su desg...