Capítulo 23 -Una borracha muy interesante

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Adam.

Estoy acostando en mi cama reflexionando una vez más lo que sucedió en el balcón, ahora Luisa ha comenzado a evitarme ¿Cómo lo sé? Bueno es muy fácil ella parece que huye cada que me ve y es obvio notar eso, además creo que ella piensa que está evitándola, pero la verdad es que no hacía eso y sé que es difícil creerme, pero no miento. La verdad de este asunto es que no sabía que decirle y ella no merecía eso así que he estado pensando las cosas y creo que es un buen momento para decirle que me gusta, lo tengo claro siento cosas por Luisa y es algo que no planeo seguir ocultando porque no tiene caso hacerlo, ya que si lo hago mis acciones hablaran por mí porque ahora se me hace imposible no prestar gran interés a todo lo que tenga que ver con ella. Tenía pensando hablar con ella de una vez por todas esta tarde al regresar del trabajo, pero por cosas del destino ella salió con quien sabe quién y eso debo de admitir que me molesta más de lo que quisiera reconocer en voz alta, pero las cosas son así.

Así que mis planes que nunca habían sido arruinados por nadie ahora lo hicieron porque Luisa esta huyendo de mí cosa que me incomoda muchísimo, pero tengo muy en claro que es debido a mi manera de actuar después del beso que nos dimos y tengo que pedirle una disculpa por mi comportamiento porque Luisa seguro pensó que me arrepentí de lo que sucedió cosa que no es así, pero no he tenido tiempo de aclarar las cosas y eso suena como una excusa barata, pero es la verdad, no tenía pensado huir de las cosas. Así que cuando vengan luego de salir espero poder hablar con ella y aclarar las cosas de una vez por todas, no sé que esperar de las cosas y tampoco es que este seguro de que Luisa siente algo por mí porque pudo haberse dejado llevar por el momento, pero dudo que sea el caso, aunque tampoco puedo estar tan confiado sobre esto. La verdad es que quiero dejar esto claro y no sé que espero de esto, pero tampoco deseo estar tan ilusionado porque no sé con claridad que es lo que siente Luisa por mí.

No voy a mentir diciendo que no me haría sentir mal que ella no sienta nada por mí porque eso sería un gran golpe para mí, pero tampoco digo que lo vaya a aceptar tan fácilmente y con eso no me refiero a que voy a obligarla a nada porque eso sería muy bajo de mi parte, pero si estoy diciendo que si es necesario planeo conquistarla porque sé que mis sentimientos por ella no son tan leves como quería hacerme pensar. Si ese fuera el caso le pediría una oportunidad para poder conquistarla porque no puedo dejar ir así de fácil a la mujer que me esta haciendo sentir tantas cosas después de tanto tiempo de no interesarme en el amor, ella tiene mucho poder sobre mí. Debo de admitir que al principio trate de maquillar las cosas porque no quería aceptar nada, pero supongo que al final no puedo ir en contra de lo que sucede con mi mente y corazón, y es un hecho que Luisa sea adueñado de eso con el poco tiempo que tenemos conviviendo.

Siempre he considerado que Luisa es una mujer preciosa, pero el hecho de convivir tanto con ella ha hecho que vea cosas en ella que jamás había visto y eso quizás a logrado que me guste como lo hace. Conocer cada detalle de lo que le gusta y disgusta ha hecho que me dé cuenta de las cosas hermosas que hay en Luisa y ahora no puedo dejar de ver todo lo bueno que hay en ella.

Necesito pensar con claridad como es que debo de dirigirme a ella y hacer que las cosas no estén tan tensas para que podamos hablar con calma sobre lo que sucedió y que es lo que pasara más adelante, obviamente espero que todo salga bien, pero no estoy confiado en eso porque eso sería demasiado tonto de mi parte, no sé qué es lo que piensa Luisa sobre lo que sucedió y eso me tiene un tanto nervioso. Mi celular vibra sobre la mesita y eso me hace tomarlo, pero cuando noto de quien es la llamada me siento sobre la cama de golpe porque no esperaba que me llamara y mucho menos si me esta evitando como lo hace. Me tomo unos segundos para calmarme y no actuar imprudentemente porque eso sería un caos con el cual no quiero tratar en este momento. Deslizo en la pantalla contestando la llamada, y debo de admitir que un poco de nerviosismo se instala en mi cuerpo. No puedo creer que este pasando por esto cuando por lo general soy bastante seguro de mi mismo, pero parece que nunca soy capaz de controlarme cuando se trata de ella.

Solo por tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora