Capítulo 6- Una búsqueda peligrosa.

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La celda en la que se encontraban era estrecha y olía terrible.

Sasuke se removió dolorido, no dejaba de pensar, ¿cómo diablos acabaron allí?.

Obito seguía inconciente y tenía un enorme tajo en la mejilla que no se estaba curando como debería.
Izuna parecía dormido, su respiración lenta y pausada, iba acompañada de gestos de dolor.

Sasuke gruño bajo. Tratando de llamar la atención de sus hermanos. Se quiso poner de pie y notó las cadenas que envolvían sus tobillos, como también, ambas muñecas.

—Jodida mierda en la que nos metimos— resopló— ¡Pst, chicos!— llamó a sus hermanos varias veces hasta que Izuna se movió de lado, su quejido fue agonico, luego enfocó sus ojos en él.

—¿Qué pasó?— gimió, trato de incorporarse, pero fue inútil— creo que tengo un par de costillas rotas.— trato de moverse y sumado al dolor, se encontró atado.— ¿Dónde estamos?— gruño bajo.

—No lo sé, nos emboscaron. Casi estábamos en el bosque.— mascullo furioso.

—Obito— llamó Izuna a su otro hermano.

—No te gastes, está inconsciente.— afirmó Sasuke.

—¿Porqué sigue sangrando?— cuestionó Izuna.

—No lo sé, seguro sea por la mina razón que tus costillas siguen rotas, y a mí me duele todo el cuerpo— soltó irónico— sinceramente es lo que menos me preocupa en este momento. Tenemos que salir de acá. No creo que estos tipos estén enojados por sus ovejas y los cerdos.

—¿Los viste? A los que nos atraparon.— Izuna se sentó con un esfuerzo enorme y volvió a gemir del dolor.— Mis costillas están tardando en arreglarse. Creo que podrían habernos hecho algo.

—Si, creo lo mismo. Si planean matarnos, deben querer que suframos hasta lo último.— reconoció Sasuke.

—¿Qué pasó con los animales que cazamos. Abrí en canal a esos cerdos y ya los había limpiado y salado.— se lamentó Izuna.

—Supongo que les facilitaste el trabajo. Luego de que ustedes se desmayaron, peleé en vano, estaba mareado, cai sin mucha más resistencia. Se llevaron las presas que traíamos.— murmuró Sasuke.

—Malditos humanos— resopló Izuna— usaron alguna clase de humo para adormecernos.

—No lo sé, puede ser. Ya casi estábamos sobre el borde de árboles, la niebla era espesa.

—¿Intentaste contactar con Madara?— Izuna se acercó a su hermano lentamente, estaban en el suelo de lo que parecía ser una celda, había barras de hierro a su alrededor— Joder, no es una celda, estamos en una enorme y puta jaula.— dijo furioso.

Sasuke analizó la estructura. Confirmando lo que su hermano acababa de decir.

Una puerta se abrió y la luz de una vela iluminó todo el lugar, era demasiado estrecho. Solo estaba la jaula, en lo que parecía ser una bodega.

—Las bestias están despiertas— escupió el granjero.

Sasuke estaba tan furioso. No sé explicaba como habían pedido un par de granjeros, atraparlos.

—Oye tú— gruñó— Será mejor que nos sueltes.

—Oh, yo no haría amenazas si fuera tú niño. El Rey se va a divertir mucho con ustedes. Cuando los cuelguen en la plaza, iré día tras día a escupir sus podridos restos.

Todo el color, abandonó el rostro de Sasuke al escuchar lo que el granjero dijo.

Otro sujeto gritó desde lo que pareció ser el piso de arriba.

Revenge- Saku-harén 🔞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora