Revenge- Saku-harén 🔞

42- La joya de luz.

"—La princesa duerme plácidamente.— la voz de Temari, fue suave y delicada. Pero el rey sabía que el espíritu de la hija de Karura era puro fuego. Adoraba a la joven doncella que se ocupaba de su niña. La corte y los asuntos del reino le llevaban demasiado tiempo.
Por alguna extraña razón que no podía explicar, su hija odiaba a su tío. Si tan solo Minato fuera más agradable con los niños. Pero Sakura, sollozaba cuando él estaba cerca. Así que no podía llevar a la niña con él a las reuniones. Por suerte la hija de su oráculo de confianza, era una joven muy hábil para manejar al pequeño terremoto rosa que llamaba su tesoro.

—Gracias Temari. Puedes retirarte. Estaré en mí recámara pronto.— un carraspeo sonó a su espalda y Kakashi se volteó para ver a Kizashi aún de pie, junto a la larga mesa donde tenía sus reuniones privadas con los Lores.

Minato, se había retirado, mientras hablaba con Lord Sabaku, sobre los envíos de pieles que se esperaban para la época fría.

—¿Qué me dice de tomar una copa lejos de esta sala?— dijo Lord Haruno.

Kakashi asintió. Agradecido de pasar un rato con un viejo amigo además de un leal súbdito.

Su amistad precedió su nombramiento como Rey.
Su amistad lo unió a la mujer que más había amado.
Si bien. Aun lamentaba la pérdida de Rin. Le quedaban muchas cosas por delante.

—Has estado disperso. Ultimamente le otorgas mucho poder a tu joven hermano. A veces olvida su lugar.— gruñó Kizashi.

—No seas mal humorado viejo amigo. El reino prospera. Kabuto está hablando con los clanes y manadas para que tengan un lugar en la mesa del Rey, son parte de esta tierra.

—Eso es algo que tú y yo aceptamos, pero no podría asegurar que los demás Lores no estén bajo la influencia de tu hermano.— un trago largo, seguido de un suspiro.— Me preocupas. Llámalo sexto sentido.

— Relájate un poco Kizashi, tus tierras también prosperan.— sirviendo una copa mas para cada uno, Haruno miró de soslayo a su rey. Estaban en la antecámara que llevaba a su habitación principal.

—Me relajaría si supiera que no corres peligro.— se quejó.

—Estamos hablando de mí hermano. Te permito el comentario porque eres tú. Pero tampoco olvides tu lugar. Amigo o no, debes recordar que Minato sigue siendo mí sangre. Sería mí heredero si no hubiera nacido Sakura.

—Eso es lo que tanto me preocupa Kakashi. ¿No puedes verlo? Los celos vuelven loco a tu hermano.

—He notado que no es muy apegado a su sobrina. Pero ¿quién podría juzgarlo? No a todos les gustan los niños pequeños.

—¿Tienes a la pequeña contigo?— la consulta de Kizashi iba acompañada de una sonrisa.

—Si. Le ha estado costando dormir. Creo que extraña mucho a su madre.

—Ella sigue protegiendo a la pequeña. Sabes que era poderosa a su modo. Siempre admiré eso de la joven Nohara.
Fue una gran reina Kakashi. Algún día tu pequeña también se sentará en el trono.

—Ansio llegar a ver ese día.— reconoció Kakashi con pesar. — Me he sentido tan cansado.

—Lo verás.— afirmó Lord Haruno.

Fue en ese momento, que la pequeña princesa comenzó a llorar.

Kakashi sabía que no habría otra oportunidad.

—Le he traído un obsequio, perteneció a la familia de su madre. ¿Me permites? — fueron las suaves palabras que dejó salir.

Ambos se pusieron de pie y el Lord, siguió a su rey dentro de la habitación principal.

La cuna yacía pegada a su cama con dosel. Kakashi, tomó a Sakura en sus brazos y la mesio para tranquilizarla.

De un bolsillo dentro de su chaqueta bordada, Kizashi saco un pañuelo, envuelto en su interior había un colgante con una piedra blanca.

Sin preguntar, le coloco la joya a la niña sobre el pecho. Pronto la piedra se volvió negra frente a los ojos del Rey y su leal amigo.

—La oscuridad te reclama pequeña— mascullo Kizashi.

La legendaria piedra de Luz. Que había pertenecido a la Diosa, aquella que eligió un rey humano.

La piedra con el poder de absorber la oscuridad.

—Ella no puede llevar eso.— Bramó el Rey. Si alguien la ve, aún no se han firmado los tratados, nuestra gente teme. Es muy pronto para que salga a la luz.

—Ella necesita protección Kakashi. La magia oscura reclama a tu hija. La sangre de tus antepasados es poderosa. Pero también lo era la sangre de su madre. ¿Puedes verlo? La piedra absorbe la oscuridad. Es el legado de la abuela de Rin. No le hablo a mí rey, le hablo a mí amigo, que es padre. Cuida a tu niña.

Kakashi, retiró la joya y la puso en las manos de Kizashi.

—No ahora. Es demasiado pequeña. Un día reclamaré está joya. Pero ahora, debo mantener esto en secreto.

Haruno asintió. Regresando la piedra de luz a su bolsillo."

Tantos años protegió la piedra besada por las Diosas.
Capaz de absorber la oscuridad y reestablecer la luz.

Ahora debía emprender un viaje para reencontrarse con su rey, su amigo.
La piedra se sentía pesada en su bolsillo.
El peso de los años, sin duda.

—Mi señor, los informes dicen que la carreta se largo con esos intrusos en cuánto nos fuimos.

—Gracias Gaara. Preparen todo. Partimos de inmediato.

Kizashi miró al joven guerrero, hijo de una humana y un cambiaformas de lobo.
Él y su hermano habían sobrevivido a la masacre que Lord Sabaku llevo a cabo en sus tierras.
Muy jóvenes, desnutridos y solos. Kizashi, los había encontrado en un viaje de negocios y no habia dudado un segundo en ayudarles y darles refugio. Nadie revisaba la caravana de un Lord.
Sacarlos de las tierras de Sabaku había sido muy fácil.

Eran leales, los trataba como a los hijos que no tuvo y al parecer no eran los últimos lobos. Los rumores de una manada de hermanos en las profundidades del bosque oscuro, se hacían cada vez más fuertes.
Haruno tenía ojos y oídos en todos lados.
Por eso nunca confío en el hermano de Kakashi.
La piedra de luz se había vuelto loca en su bolsillo, durante la reunión aquella vez. No podía ser por la bebé, ella no había estado presente, la joven adivina estaba a su cuidado.
Tenía que ser Minato. Había oscuridad en su ser. Tanto que Lord Haruno apenas podía estar en su presencia.

Había soportado veinte años de hacer lo que al joven rey se le antojaba. Había visto todos los proyectos de Kakashi, pisoteados. La paz y la unión que su amigo buscaba. Nunca estuvo en los planes de Minato.

Debió insistirle a Kakashi, suplicarle que tome medidas. Pero estaba ciego. El dolor de perder a Rin, tener que cuidar se su pequeña y de su reino.
¿Quién podía culparlo si se volvía loco?
Con eso había jugado Minato. Y todos lo creyeron. Incluso él, durante un tiempo.
Hasta que los rumores de una bruja poderosa llegaron a sus tierras.
Una joven portadora de una lanza de luz.
Kizashi, supo que no podía ser otra más que la princesa heredera.
Se decía que la lanza de Luz, solo aparecía en manos de una descendiente de la Diosa original. La primera reina.

—Es hora de llevar esto a su legítima dueña.— dijo mientras palpaba el bulto en su bolsillo.

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Bueno, una pequeña vista al pasado.
El comienzo, es una conversación de Kakashi, con Lord Haruno, poco tiempo después de la muerte de Rin.
Sakura, aún era un bebé.
Como se habrán dado cuenta, el mensaje que Naruto entregó a Lord Haruno, tiene que ver con este recuerdo.
Muestra algo de la relación que compartían y las sospechas que empezaban a rondar entre los súbditos. Leales, traidores... Un poco de todo.

Gracias por seguir apoyando la historia a pesar de que no puedo actualizar tan seguido como con otras.

Besitos Húmedos y Vómito de Unicornios ❤️

👑 Reina Arcoiris 🌈