La Luz de la Magia Vol.1: Sombras de sangre

Capítulo 41: Si muero ¿Me perdonarás más allá?

Bienvenidos a este cap especial, es más extenso de lo común teniendo en cuenta mi ausencia en las últimas semanas. De ante mano les pido disculpa y espero les guste <3 recuerden votar y comentar sus reacciones ^^

...

—Entonces ¿Qué me dices?

Arrodillada ante ese ser, Akko estaba cayendo en el abismo, pues, tal era la situación, que se encontraba ante una salida de esa tortura que tenía que pasar, pero a cambio entregar todo lo que conocía.

Pues reconocía quién era.

—No tienes nada que hacer aquí.

—¿Estás segura de eso?

Recordaba aquel relato que Chariot le contó ante la luna, así como la promesa que le hizo.

—Sé quién eres, Kyubey —Ante aquella afirmación, el ser se quedó en silencio—. ¿Crees que seré tan tonta como para aceptar esa supuesta ayuda?

—No te estoy obligando realmente, tampoco te estoy implorando, es una ayuda sincera.

—Ya sé todo sobre ti, sé lo que le haces a aquellas que hacen contratos contigo. No pasará conmigo.

—¿En qué te basas para decir eso? Me imagino que en tus libros y profesoras ¿Pero en serio crees que eso dice la verdad? Debes tener mucha confianza en todas ellas como para creerles sin necesidad de cuestionar, aún a pesar de que hay muchas cosas de este mundo que no te han dicho.

—Me importa poco, lo descubriré yo misma si es caso, pero no dejaré que me guie alguien como tú —Aquella chica no veía la hora en que ese ser delante de ella se fuera, y justo cuando alzó la mirada un poco, Kyubey le dio la espalda.

—Está bien, entendí el mensaje, no quieres mi ayuda así que me iré, pero al menos escucha este consejo de mi parte, Atsuko Kagari —Kyubey giró su cabeza para mirar a los ojos de aquella jóven—. No sabes todo sobre mí, ni todo sobre este mundo. Nunca la sabrás, al menos no hasta que sea el momento indicado, cuando eso llegue, deberás tomar un bando. Prepárate para eso.

Así, con estas palabras, aquel ser desapareció en la oscuridad de ese vacío. Sin duda su presencia lo único que causaba en Akko es una profunda inquietud, sin embargo, y contrario a cualquier conclusión que podríamos sacar, una gran curiosidad se suma a la ecuación ¿Quién es él realmente? ¿Por qué fue a donde ella? ¿Cuáles son sus verdaderos objetivos? Realmente es nula la confianza que le tiene, pero aquel último consejo la dejó en un limbo interminable de dudas pues, aunque aquello no fue lo que dijo, ella realmente no sabe nada sobre él... Pero aun así se mentalizó en concentrarse, demostrar que no necesitaba ayuda, pues, iba a continuar con esto, sin importar todo lo que tuviese que pasar, y así, empezó de nuevo con el traspaso del sello, y con todo el tormento que éste conllevaba.

...

A varios kilómetros de distancia, un grupo de chicas estaban en un punto casi parecido de desesperación, donde se denotaban contra las cuerdas, negándose el hecho de que, si no se hacía nada, ese sería el último momento en donde pudiesen respirar, o al menos estar al lado de sus amigas.

—¡Déjala! ¡Maldito! —Amanda intentaba todo lo que podía, sacando fuerzas donde no habían, mientras veía como aquella máquina seguía siendo golpeada a más no poder, siendo que no podría aguantar mucho antes de que cayera en pedazos—. ¡Constanze! ¡Sal de ahí!

La bruja que estaba dentro buscaba una salida desesperada, pero que no veía por ningún lado, mientras el miedo comenzaba a correr por todo su cuerpo pensando que no había por donde escapar. Mientras afuera, la pelirroja no veía cómo deshacerse de aquellas cadenas.