Chat había dejado escapar a Felix, a propósito, y lo que era peor: Marinette no se estaba subiendo por las paredes.
—Volverá —le aseguró Chat a Rena por enésima vez.
—¿Y tú confiaste en su palabra? —replicó ella, tratando de atenuar el enfado en su voz. Le parecía una locura.
No quería montar un escándalo, no tenía derecho a hacerlo, pero hacía una semana Ladybug no hubiera permitido que Chat Noir se saliera de rositas después de tal metedura de pata (o por lo menos así lo veía ella).
La dinámica del equipo había cambiado mientras Rena había estado ausente, aunque ella no había tenido tiempo de notarlo hasta ahora, y a Alya no le gustaba ni un pelo.
—Por si sirve de algo, yo creo que fue la decisión correcta —intervino Viperion, pero Rena le dirigió un gesto que significaba que, en efecto, sus palabras no servían de nada.
Habían vuelto al estudio de Felix a buscar pistas sobre su paradero, pero nada más entrar por la ventana, Rena y Chat se habían puesto a discutir. O más bien, Rena se había puesto a insistir en que dejar a Felix marchar no había sido una buena idea, esperando que su mejor amiga la secundase, pero Ladybug se estaba manteniendo al margen y Chat estaba contestando a Rena con una calma digna de Adrien.
Al ver que no tenía vela en ese entierro, Viperion decidió alejarse de aquel lío. Desde su punto de vista, Adrien probablemente había tenido sus razones. Al fin y al cabo, él era el que mejor conocía a Felix, ¿no?
Aun así, se alegraba de que Marinette estuviera comenzando a confiar en Adrien. Esos últimos meses habían sido todo un desafío para su relación —la mayor parte del equipo se había dado cuenta—, así que Luka pudo respirar más tranquilo al saber que por lo menos no tendría que preocuparse por ese frente en su misión de "vigilar a Adrien" (aunque aún no tenía muy claro en qué consistía su misión exactamente).
Viperion comenzó a pasearse por el estudio. Había polvo en las esquinas, señal de que nadie había vivido allí durante mucho tiempo y que Felix solo había hecho una limpieza superficial. Además, como Ladybug aún no había usado su poder, el escritorio seguía hecha pedazos y la puerta que Chat había arrancado de sus goznes seguía partida en dos encima del sillón.
Viperion se escribió una nota mental para nunca retar a Adrien a un pulso.
Se acercó al escritorio. Lo único que había hecho Chat, según le había contado por el camino, había sido lanzar su bastón hacia la mesa, y sin embargo parecía que una bola de demolición le había caído encima.
Luka se lo quedó mirando durante unos segundos, teorizando sobre el poder de la Destrucción.
Y entonces vio algo rojo entre las astillas.
—Chicas —los llamó, apartando los trozos de madera—. ¿Qué es esto?
Con cuidado, Viperion sacó el Tomo II del Grimorio de los Miraculous de debajo de los restos del escritorio.
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Última jugada
FanfictionDespués de Strike Back, Hawk Moth se encuentra en posesión de todos los miraculous. Marinette le hace el vacío a Adrien en clase. Chat trata de animar a Ladybug mientras oculta su propio dolor. Y Félix trama sus propios planes. Pero entonces Adrien...