𝐔𝐍 𝐅𝐈𝐍𝐀𝐋 𝐅𝐄𝐋𝐈𝐙 | ❝ A él le gusta ella, a ella le gusta él, todos los sabemos, excepto ellos. ❞
Sirius Black: Engreido, mujeriego, arrogante, testarudo, casanova, idiota... esas son solo algunas de las palabras con las que Sabrina describ...
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" ¿Qué es el cine? "
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SABRINA VIO A Narcissa y a Regulus alejarse a paso rápido para ir hasta dos lugares libres que quedaban en la mesa de Slytherin. Los estudiantes de la casa verde ya estaban todos en sus lugares y la extensa mesa ya estaba casi completamente ocupada.
Era sorprendente ver la comparación entre Slytherin y Gryffindor. Los miembros de la casa de las serpeintes acostumbran a ser puntuales, mientras que los miembros de la casa de los leones se entretenian por el camino charlando y siempre llegaban tarde, por lo que la mesa de Gryffindor estaba casi vacía.
Los ojos de la castaña se encontraron con los de Sirius Black que estaba sentada a unos pocos metros de ella con sus amigos. El chico le dedicó una sonrisa burlona que ella no comprendió y luego siguió a sus dos amigas hasta la mesa de la casa escarlata, donde ya estaban sus amigos de Hufflepuff sentados. Era asombroso ver como en las mesa predetrminadas para Gryffindor, Ravenclaw y Hufflepuff había un monton de estudiante de las otras casas. Estas tres solían mesclarze mucho, mientras que en Slytherin eran todos de la casa verde; muy de vez en cuando veías a un Ravenclaw o a un Hufflepuff comiendo con ellos, y Gryffindors nunca había en aquella mesa. Solo Sabrina solía ir a sentarse con Regulus.
La castaña saludo a sus amigos con un abrazo a cada uno, a pesar de haber visto a Luke y a Alex hacía poco. Las chicas se sentaron junto a ellos y comenzaron a hablar.
—¿Qué hiciste en tus vacaciones bella Donn? —le preguntó Lucas directamente a la Hufflepuff, apoyando su barbilla en sus manos y mirándola como si fuera la cosa más expendida del mundo.
Donn estaba justo en frente de Lucas, lo que le daba una amplía visión al chico.
Todos voltearon a ver a la chica, interesados; ella, por su parte, se sonrrojó ante tantas miradas puestas sobre ella.
—Cuide a mi hermanita pequeña mientras mis padres iban a visitar a mi tía —dijo vajitó por la timidez que tenía consigo en ese momento.
—¿Qué tiene tu tía? —le preguntó Sophie preocupada.
Creyo que algo grave le pasaba a la tía como para que sus padres dejaran solas a sus hijas pequeñas para irse a visitarlas.
—Nada, pero mis padres estan teniendo unos problemas económicos que yo no entiendo y mi tía tiene que ver así que fueron a resolverlos, ella vive en Canadá. No tenían suficiente dinero como para pagarnos a mi hermana y a mi, así que yo me ofrecí a cuidarla.
