◽36◽"Principio del fin"

109 23 1
                                    

Maldiciendo por dentro, el joven rubio se retira de aquel lugar que fue testigo de los hechos, socavando en su cabeza de cuántas maneras podría remediar esto, y sin encontrarle una correcta vuelta.

Ya saciado en sus más bajos instintos y en lo que respecta al alimento. Camina sin mirar hacia ningún lado pero cuando cruza la mesa del comedor, observa que el consanguíneo del medio se está ocupando de la recuperación de la descompuesta fémina en un rincón del salón.

Y ella, tomando lento un vaso de agua escucha atenta las palabras que se dictan como un mantra, vocablos calmantes que salen desde los labios del artista hermano : "Te haz descompensado". "Todos nos alarmamos". "¿Necesitas algo?". "En cualquier momento llega tu amado".

Y eso último asqueó de mil modos al joven rubio, que intenta de todas formas no mostrar su peor cara y acercarse de buena manera al costado de su desorientada y supuesta prometida.

—¿Te encuentras bien? —Cuestiona tratando de ocultar su malestar general y su creciente molestia —¿Quieres qué te acompañe a tu hogar? Deberías regresar, aunque yo, debería quedarme a trabajar.

Ella, negando continuamente con su cabeza y con sus ojos bien abiertos, se aferra -de repentina manera- hacia el torso del supuesto amante perfecto. Y éste, tensado y preocupado por partes iguales, trata de calmarla siendo correcto y diciendo: —Tranquila, ya te sentirás mejor. Solo fue un leve mareo o tal vez algo que comiste con antelación.

—¿No estarás embarazada? —cuestiona el hermano del medio ante lo observado y como para meter bocado, pero sin darse cuenta de lo que implica dar una suposición como esa.

—¿De mí? No creo... —suelta Jimin sin pensarlo siquiera y enseguida percibe como la mujer se tensa, separándose y elevando su cabeza.

—Amor ¿pero qué cosas dices? —cuestiona ella, con una de sus tantas caretas puestas.

Y el joven rubio, recientemente empapado en vividos pensamientos sexuales de ella y otros más tangibles recuerdos de sucesos, le suelta: —La verdad, algo que venía suponiendo desde hace un tiempo pero que luego de ciertos sucesos, no tengo dudas al respecto. Esto —señala entre ambos —lo que sea que teníamos o supuestamente tenemos, se termina aquí, no pienso aguantar ni un minuto más.

La joven, iracunda en sus arranques, empieza con ademanes sin entender el asunto. Y por otro lado, Jin observa inaudito y descolocado el suceso frente a sus ocelos. Carraspeando para retirarse luego no sin antes decirle al joven rubio, que si gusta, el chófer de la familia puede llevar a la damisela de regreso hacia su hogar, dando pie a que el mismo pueda despegarse lo más rápido del asunto.

Pero tras varios segundos de golpes y algún que otro improperio por parte de aquella que no entiende de razones, el joven rubio no soporta más los supuestos, vomitando sucesos que solo podría saberlos de haberlos presenciado en su momento. Dándose cuenta en el acto, del error que se le ha escapado...

—Señor Park, debería volver al trabajo, se lo precisa con urgencia. Así que señorita, le voy a pedir -amablemente- que se retire. Afuera, la está esperando el carruaje para arrimarla hasta su hogar. 

Resuena la voz del no muerto menor, provocando el instantáneo estremecimiento de aquel que puso fin a todo esto. Siendo éste, preso de la profunda mirada que le otorga el pálido susodicho, en cuanto anuncia con profunda y ronca voz la salida de la que era su prometida.

—Esto no se quedará así Jimin, ya se enterará mi familia. ¿Cómo te atreves a dejarme? ¿Con qué cara me presento ante los ojos de los otros, siendo una miserable abandonada?

"Con la misma que tuviste tanto tiempo para engañar, cuando yo te respetaba". Resuena, de repente, en los entre tejes de los pensares de la fémina. Provocando su cara de total desconcierto y avivado susto, en cuanto se da cuenta de que algo anda mal y mira nerviosa para todos lados.

Así que huye, sale despavorida buscando escapar, tratando de zafar del escrutinio del par de indagadores ojos del lugar.

—Gracias... no era neces...

—Lo hice porque se escuchaban los golpes y gritos desde la otra ala. Y porque realmente debes trabajar, hay variada papelería atrasada por andar haciendo lo que no se debe. Así que espero que estés preparado para aburrirte a muerte.

Suelta de repente, el vampiro cortando la plática del rubio, dando indicaciones al viento y sin mirar a los ojos del otro bajo ningún aspecto. Y el joven rubio, aflojado de pesares y lamentos, no puede quedarse quieto y dejar que el vampiro actúe como si nada hubiera sucedido entre ellos.

—Jungkook ¿Puedes mirarme aunque sea?

Pregunta el joven rubio, en un hilo de pesares bajo la dermis de sus ojos.

—¿Con qué fin? Deberíamos volver a los papeles.

Resuelto le suelta, tratando de no dar rienda suelta a lo que él necesita, sino más bien, manteniéndose al márgen de todo. Aunque tuvo que acudir -de inmediato- en cuanto su pecho se contrajo ante un posible arrebato anímico del rubio.

—Terminé con ella...

Suelta veloz el joven rubio a medida que se acerca a un quieto y pálido morocho... Morocho que siente como el eco del retumbe de los pasos de aquel que se acerca, lo altera a sobremanera, estremeciendo cada hebra de su pelo y haciendo su piel de gallina.

—No debes darme parte —suelta, de repente, el no muerto.

—Lo hago porque quiero... —dice, velozmente, el joven rubio.

Los siguientes minutos suceden en cámara lenta cual película expuesta, mientras sinuoso lo rodea hasta quedar desnudo de emociones frente suyo.

—Bien por ti, te felicito —dice sin titubeos ni rodeos el no muerto ante la cara de asombro y de total incredulidad del rubio.

—Las acciones, valen más que mil palabras ¿no lo crees? —anuncia el joven rubio, demasiado cerca del gélido cuerpo ajeno.

—A las palabras, se las lleva un simple viento —suelta el no muerto a escasos centímetros del rubio —. Pero no por eso, hay que dejar de ser conscientes de lo que implica hacerse cargo de los actos —finaliza acortando la escasa distancia que separa los acaudalados labios de uno con los menesterosos del otro y viceversa.



















Gracias por leer😍

Los amito mucho♥️

"𝑽𝒆𝒔𝒕𝒊𝒈𝒊𝒐𝒔 𝒅𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝒎𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒂𝒏𝒖𝒏𝒄𝒊𝒂𝒅𝒂" (Jikookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora