La Reina Trihíbrida: Un nuevo comienzo. #2

39.

Rose.

Abro mis ojos exaltada.

Cierro mis ojos por el horrible dolor de cabeza que me azota. Puedo sentir que mi cabeza va a explotar.

Abro los ojos nuevamente y miro a mi alrededor para averiguar en donde me encuentro.

Parece que estoy en una celda.

Empiezo a recordar la conversación con él y en como me drogo.

Hijo de puta.

Noto que en una esquina de la celda esta Gabi, quien aún permanece inconsciente y en el otro extremo esta Ethan sentado en el suelo mirándome fijamente.

Miro sus manos y pies que tienen cadenas privándolo de su libertad. Inmediatamente me miro las manos y los pies y también tengo cadenas.

Las jalo con fuerza tratando de romperla pero es inútil; estas cadenas están anulando todo mi poder.

- Si sigues, terminaras llena de moretones.

- ¿Acaso estas siendo empático? – Lo miro sorprendida por su actitud.

Él rueda los ojos irritado.

Me levanto y me acerco a las verjas que nos mantienen dentro de este asqueroso lugar.

- ¿Hay alguien ahí? – Grito esperando que alguien me escuche.

- ¿Mamá? – Escucho una dulce voz a lo lejos.

- ¿Elle? – Grito para confirmar que es mi pequeña.

- ¡Mamá! – Grita con fuerza.

Mis piernas me fallan y caigo al suelo. Después de todo si la encontré, pero no la puedo salvar.

- Hola pequeña. – Digo con la voz rota. - ¿Estas herida? – Pregunto.

- No. – Responde. Lágrimas en abundancia salen de mis ojos y no puedo controlarla. Todo lo que tanto me contuve durante estos días lo dejo salir. - ¿Mamá, sigues ahí? – Dice Ellie con su dulce y tierna voz.

No hay nada en este mundo que quisiera más que abrazarla.

- Si corazón, aquí estoy. – Trato de ocultar la voz llorosa.

- Mi papá, también está aquí conmigo. – Mis sentidos se iluminan.

- ¿Puedes fijarte si esta herido? – Le pido.

Hay un pequeño silencio por un rato.

- ¿Elle? – La llamo. Él silencio me altera de nuevo.

- Papá está bien. – Su voz me devuelve el color al cuerpo.

- Eso está bien.

Golpeo la pared con impotencia una y otra vez sin importarme el dolor que eso me causa.

- Mamá, quiero ir a casa. – Dice Ellie con voz débil.

- Pronto iremos a casa, te lo prometo.

Quiero creer que eso si es cierto.

Mi mirada recae en Ethan y un odio hacia él se hace presente.

Me le acerco y lo empiezo a golpear con toda mis fuerzas.

- Todo esto es tú culpa. – Escupo con odio. – Idiota, hijo de puta, psicópata...– Le digo todo los insulto que se me vienen a la mente mientras lo golpeo una y otra vez. Me sorprende al ver que él no intenta detenerme, solo deja que lo golpee. – Te mataré. – Tomo mi cadena y la coloco alrededor de su cuello asfixiándolo.