La Reina Trihíbrida: Un nuevo comienzo. #2

40.

Rose.

Ethan se detiene. Me mira y no se ve muy contento.

- ¿Qué sucede? – Pregunto.

- Ya llegamos. – Dice. – Están detrás de esa puerta.

- ¿No mientes? – Pregunto.

- Ojala. – Responde.

Empiezo a caminar en dirección a la puerta que Ethan me señalo, pero él me toma del brazo deteniéndome.

- No me toques. – Lo miro seria.

- ¿Qué piensa hacer una vez que los tenga enfrentes? – Pregunta Ethan.

- Matarlos. – Respondo.

- No puedes matarlos. – Me dice Ethan.

- Claro que sí. – Respondo a la defensiva. – Si los tomo por sorpresa, puedo hacerlo.

- No, no puedes. – Me recalca de nuevo.

- ¿Por qué no? – Pregunto curiosa. - Si no los matos pronto, ellos se volverán un gran problema, y si es cierto todo lo que dijiste debo de apresurarme.

- Desearía estar en cualquier lugar menos aquí. – Dice Luke asustado. Coloco mi mano en su hombro para relajarlo. En lo que veníamos, lo puse al corriente de quien nos encontraremos porque él no dejaba de hacer pregunta, algo normal en él.

- Primero que todo, si es cierto, yo no miento. – Le doy una mirada juzgona. - Y segundo, ellos no están conscientes de lo que hacen, no podemos matarlos, ellos no son culpable de las decisiones que nuestro padre les hizo tomar.

- No es mi padre. – Dejo en claro. Ethan rueda los ojos irritado por mi comentario. - Entonces que quieres que haga? porque no se me ocurren más ideas. – Digo.

- Tengo una idea, pero voy a necesitar que me liberes. – Dice él.

- Ni loca. – Niego.

- Si no lo haces, ellos nos atacaran, tú y yo sobreviviremos, pero no creo que tontín aquí presente sobreviva. – Dice Ethan.

- ¡Oye! – Luke se defiende.

Miro hacia la puerta, al escuchar un movimiento.

- ¿Qué ocurre? – Pregunta Luke.

- Saben que estamos aquí. – Luke se pone aún más nervioso.

- Libérame. – Miro las esposa y luego a él dudosa.

La puerta se abre dejándome quien se encuentra del otro lado de la puerta.

Hay unos dos chicos y cuatro chicas mirándonos con una mirada que podría matarnos y detrás de ellos hay más.

- ¡Rápido, nos quedamos sin tiempo! – Me grita Ethan alterado. Sigo indecisa.

- ¡Toma una decisión ya! – Me grita Luke.

Termino liberando a Ethan.

Lo siguiente ocurre en cámara lenta.

Veo como todos a la vez corren hacia nosotros decididos a matarnos.

Me volteo y rodeo a Luke con mis brazos para protegerlo. Creo un escudo alrededor de nosotros. Cierro los ojos y espero el impacto, pero nunca llega.

Suelto a Luke poco a poco. Me volteo para que sucedió y veo a todos tirados en el suelo inconscientes.

Miro a Ethan, él los mira sonriente.

- ¿Ese era tu gran plan? – Le pregunto Agitada. - ¿Hacerlos dormir? – Lo miro furiosa.