XXXI. Entonces sé mi Hetty Merton

142 4 5
                                    

- ¿Papá? - preguntó Zayn al oír cómo se cerraba la puerta de la calle mientras comíamos nosotros solos, pues sus hermanas estaban en el instituto y la otra trabajando junto a su madre.

Ambos nos levantamos de las sillas y salimos de la cocina para ver quien había entrado a la casa, aunque Zayn me cortó el paso cuando llegamos a las escaleras que subían arriba.

- ¿Papá? - repitió más alto caminando hasta la puerta principal.

- ¿Crees que si no es él, te contestaría? - pregunté.

- ¿No te he dicho que te quedases ahí? - casi gritó al verme a su lado.

- Si llega a ser un ladrón quien entra por la puerta os habría pillado a la primera - rió una voz detrás nuestra.

Nos giramos rápidamente para ver al hombre en las escaleras.

- ¡Papá, tú eres gilipollas! - gritó el moreno a mi lado y eso causó que el hombre riera más.

- ¿Qué pasa para que estéis los dos tan asustados? - preguntó bajando las escaleras con los brazos cruzados.

Tras lo ocurrido y decirme que me protegería, supongo que estaba asustado por si ese momento llegaba antes de lo que él pensaba.

- No has avisado y tú dices siempre que hay que tener cuidado cuando estamos solos en casa - respondió.

Miré hacia el mismo punto al que miraba el padre de Zayn, el cual todavía no sabía su nombre, y vi nuestras manos entrelazadas fuertemente.

Ni siquiera me había dado cuenta de aquello.

- Pero veo que no estabas solo - sonrió el hombre e intenté soltar nuestras manos pero Zayn apretó el agarre.

- Eh - dijo nervioso -... Esta es Clarissa, papá. Este es mi padre, Clarissa.

- Yaser - me tendió su mano.

- Clary - se la estreché.

- ¿Con que italiana, hijo? - lo miró de una forma que me hubiese reído si no estuviese hablando de mí.

- En realidad el italiano es mi padre - contesté mientras caminábamos hasta la cocina nuevamente.

- ¿Y tu acento? Es demasiado cerrado para que solo sea tu padre el italiano - preguntó mientras Zayn ponía algo de verduras en un plato para él.

- Me mudé cuando era pequeña a Nápoles - contesté terminándome mi plato.

- ¿Y eso a qué se debe? - preguntó curioso, como su hijo cuando lo conocí.

De tal palo tal astilla.

- Papá, deja el interrogatorio para tus presos - dijo su hijo dejándole el plato en la mesa de un golpe sordo y se sentó nuevamente a mi lado.

- Solo quiero conocer a mi nueva nuera - aquello hizo que ambos nos atragantásemos con lo que había en nuestras bocas.

- Ella no es mi novia y mucho menos tu nuera, papá - dijo después de un rato tras beber algo de agua de su vaso.

- Lo que tú digas - murmuró.

- ¿A dónde vas? - le pregunté en un susurro al ver que cogía nuestro platos y los dejaba en el fregadero.

- ¿Has terminado, no? - asentí - Pues voy a ayudarte con los deberes y vamos a esperar a ver qué pasa con tu hermano y el tío ese.

Entrelazó nuestras manos y me dirigió hasta la puerta para subir al piso de arriba.

- ¡Estamos en mi habitación! - gritó.

- ¿Te pasa algo? - pregunté sacando mis libros sentada en su cama mientras él se sentaba en el banquito de la ventana y la abría.

The afraid of falling in love ➳ z.m. punk [finalizada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora