The afraid of falling in love ➳ z.m. punk [finalizada]

XVII. Otra vez no, por favor

- Hola, Clary – saludó el rubio con una gran sonrisa al verme.

- Hola – dije con una sonrisa tímida.

- ¿Os conocéis? – preguntó mi hermano extrañado mientras abría la puerta de casa.

- Es amigo de los chicos – contesté entrando rápidamente al interior.

- ¿Qué pasa? – volvió a preguntar Travis mientras me veía correr hacia mi habitación – ¿Quién se casa? – se burló haciendo reír a Stephen.

- Me acabo de dar cuenta que tengo que pedirle los apuntes a Natalie de italiano para ponerme al día – mentí pues ni Natalie daba italiano, ella daba Traducción e Interpretación francesa, ni los necesitaba ya que me había ayudado Abby al ser su hermano el profesor; pero no sé, necesitaba... no sé.

- ¿Qué me pasaba?

Ni yo misma lo sabía.

“Si tuvieras unos años más y no fueras Salvatore te daba de todo menos consejos”

- ¡Joder! – grité al golpearme la frente con la puerta de mi habitación al recordar las palabras de Stephen semanas atrás que me hicieron tropezar.

- ¿Qué pasa? – gritó mi hermano desde abajo.

- No encuentro el móvil – mentí sobándome la parte afectada.

- Está aquí en la cocina – mierda, mierda y más mierda.

Ahora que me acordaba lo había dejando en el bolsillo de mi abrigo y al llegar me lo quité y lo tiré de mala manera sobre la isla de la cocina.

Bajé con paso lento las escaleras hacia dicha habitación y vi como Travis hacia algo de comida – seguramente pasta, lo único que sabía hacer en condiciones – mientras que Stephen, sentado en un taburete apoyado en la isla, observaba mis movimientos.

- Tienes la cabeza para llevar pelo – rió Travis.

- Pues como tú – me burlé sin apartar la vista del teléfono mientras caminaba hacia la puerta y subir de vuelta a mi habitación.

- Ten cuidado, pajarito – dijo Stephen cogiéndome por la cintura ya que me había tropezado con su taburete y si no me llega a coger hubiese caído de bruces al suelo.

- Gracias – dije mirando al suelo.

“Si tuvieras unos años más y no fueras Salvatore te daba de todo menos consejos”

- ¡Ya vale!

Alcé la vista y observé sus bonitos ojos azules que desde aquel día no paraban de hacerse presentes en mis sueños.

 “Si tuvieras unos años más y no fueras Salvatore te daba de todo menos consejos”

- ¡Joder!

¿Por qué me dijo eso?

A ver, sé que le parecía guapa a la gente, solían decírmelo bastante, pero nunca me lo decían así de… ¿directo? Ni mi ex Mauro me había dicho algo parecido – aunque sí que Zayn al llegar a Londres me dijo aquello de que “él era mi futuro marido” aunque también como que me podía olvidar de eso ya que había empezado algo con Perrie.

“Si tuvieras unos años más y no fueras Salvatore te daba de todo menos consejos”

- ¡¿Te puedes callar ya?!

- Ahora lo normal de las películas románticas esas es besarse pero, por favor, Clary eres mi hermana así que separaos antes de que vomite.

Stephen me soltó la cintura riendo mientras que yo parecía, segurísimo, uno de esos tomates que hay en el frigorífico.