𓆩Lily𓆪
Pasó unas 2 semanas después del atentado contra nuestro pueblo y el equipo y demás ciudadanos de la zona ayudamos a reconstruir poco a poco la aldea, y en esas semanas alimentamos y dimos cobijo a muchas de las personas afectadas. A causa de tanto trabajo no logré hablar con Gareth durante todo ese tiempo y eso me estaba poniendo cada vez más ansiosa...
Mientras ayudaba a la última familia llevándoles materiales de construcción me encontré con Maximino y Li.
—Hey chicos, ¿Ya habéis terminado de patrullar? —pregunté dejando la caja de herramientas en la puerta principal de la familia que la necesitaba—.
—Si, ahora vamos al albergue, ¡a descansar y luego a entrenar para el partido contra Japón! —dijo esto último con confianza antes de continuar caminando— ¡Ahora nos vemos! —se despidió agitando su mano en el aire—.
Miré al frente y Li seguía parado frente a mí, lo mire extrañada hasta que el me hizo una seña para que me acercara.
Mi compañero se acercó hasta mi oído y susurró:
—Gareth te busca, está en la playa —mi piel se erizo a pesar que estábamos a más de 30°grados—Tiene que hablar contigo...
Me separé de Li, el cual me miró y sonrió para luego marcharse por el mismo camino que se fue Maximino.
Había terminado de ayudar a los pueblerinos así que no tenía excusa para no ir.
Decidí ir a él albergue antes de hablar con Gareth, así que camine durante unos minutos hasta llegar a el campo enfrente del albergue, allí se encontraba gran parte del equipo hablando de algo... que por sus caras, parecía ser importante.—Chicos, ¿que ocurre? —pregunté acercándome hacia la multitud—.
En el medio estaba Héctor, mostraba una gran impotencia en su rostro y sus puños estaban ligeramente cerrados.
Drago, quién estaba al lado de Héctor miraba hacia el suelo mientras apretaba sus dientes y sus puños.
Nadie contesto a mi pregunta así que decidí alzar la voz.—¡¿Alguien, por favor, me explica que está ocurriendo?! —.
Héctor fue el primero en mirar hacia mi dirección, fijo sus ojos negros sobre los míos, tenía un aura... triste.
—Lily, a partir de ahora necesitaremos toda tu ayuda para ganar el partido contra Japón en unos días... —lo miré confundida mientras esperaba a que continuará con lo que iba a decir, aunque lo interrumpí—.
—¿Por qué?, Nelly también est-... —.
—Nelly oficialmente a dejado el equipo... —abrí mis ojos de par en par, después de que Maximino dijera eso, me miró y continuó— Ha decidido volver con Inazuma Japón...
Agaché mis hombros y mire hacia el suelo, ¿En serio se había marchado...?, se que era un pensamiento bastante frecuente en mí, pero... aún tenía la sensación que ella no se iría... bueno, me equivoqué.
—El partido es en tres días, así que Lily, necesitaremos toda tu ayuda en este momento, aunque no tengamos a Nelly, te tenemos a ti, y eso es lo que más nos consuela... —dijo Héctor apoyando levemente su mano sobre mi hombro mientras me miraba con una leve sonrisa—.
Mis mejillas se enrojecieron en cuanto note su tacto y rápidamente todo el equipo nos dimos un abrazo.
—Lily—.
Levanté mi vista y vi a Gareth a un lado de las escaleras. Rápidamente me solté el abrazo de los chicos y, mientras ellos continuaban arreglando el campo, me acerque a Gareth para oír lo que tenía que decirme.
—Gareth, lo siento, quería llegarme a la playa pero primero fui al albergue y entonces me contaron lo de Nelly y...—.
Gareth sonrió y acarició mi cabeza.
—No te preocupes, ¿que te parece si vamos ahora? Aún tenemos tiempo antes de que empiece el entrenamiento.
Le sonreí y comenzamos a caminar fuera del área, alrededor del pueblo, mientras tanto hablamos sobre el acto de Nelly, el partido que tendríamos en unos días con Inazuma Japón entre otras cosas sin llegar a profundizar lo que realmente le iba a confesar.
Finalmente llegamos a la playa. Montones de recuerdos vinieron a mi mente y cada vez más me sentía más culpable por lo que le diría.
—¿Nos sentamos en la arena como la última vez...? —mire a Gareth a los ojos y le asentí no muy entusiasmada—.
Gareth me ayudó a sentarme sobre la área y después se sentó a mi lado, esta vez, un poco más lejos de mí.
Lo mire de reojo, podía notar como sus manos tocaban levemente la arena y sus ojos violetas de posicionaban sobre el ancho mar que teníamos en frente de nosotros. Pasaron algunos largos minutos hasta que el finalmente suspiro y sonrió con melancolía.
—¿Sabes por qué te traje hasta aquí? —asentí levemente, Gareth me miró y sonrió de lado— Bueno, entonces... ¿Que has pensado...?
Mis manos comenzaron a temblar al igual que mis piernas, mientras que un gran nudo crecía cada vez más en mi garganta.
—Yo... —mascullé intentando no soltar lágrimas, sin éxito—.
Mis lágrimas comenzaron a rodar por mis sonrojadas mejillas, me sentía culpable por no aceptar a Gareth, su trato hacia mí siempre fue bueno, si lloraba el estaba ahí para mí, si había algo que me inquietase él estaba ahí para escucharme, desde el momento en que nos conocimos siempre estuvimos el uno para el otro y ahora... yo no estaría para él, no podía negar mis sentimientos por Héctor.
Gareth, al verme llorar, acerco mi cabeza hacia su hombro para luego abrazarme.—¡Lo... siento! ¡Lo siento mucho...! —dije aferrandome a él— Tu eres como mi... alma gemela... pero Héctor... el me gusta y me di cuenta recordando todo lo que hacíamos cuando éramos pequeños y todos los momentos bonitos que tuvimos... Lo siento Gareth... Mereces algo mejor que yo... Lo siento mucho de verdad...
Gareth hizo que levantará mi cabeza de su hombro para que lo mirara a los ojos, posteriormente paso su pulgar por mis mejillas para apartar así mis lágrimas.
—¿Sabes? Por mucho que quiera se que no podré cambiar los sentimientos que tienes hacia Héctor, tampoco es algo que quiera hacer, los dos de aman, ¿que tipo de persona sería si arruinará vuestra relación? —Gareth negó un par de veces y miró de nuevo hacia mis ojos— Ambos están hechos el uno para el otro, y sólo espero que seáis felices juntos. Aunque te dejare en claro, si algún momento daña tu corazón no lo perdonaré... No perdonaré que haya roto lo que tanto he añorado durante el tiempo que llevamos conociéndonos...
Mis lágrimas volvieron a caer y yo cubri mi rostro esta vez sobre su pecho y, desde aquel momento Gareth no dijo una sola palabra, solo se mantuvo en silencio mientras acariciaba levemente mi espalda, aunque podía notar que no era la respuesta que tenía pensado escuchar, creo que en el fondo el pensaba que le daría una oportunidad. Aunque no sea así, realmente lo amare toda mi vida, aunque no sea con el sentimiento romántico el que querría...
///Hola a todos, primero de todo os debo una disculpa.
Quiero dejar en claro que no tengo mucho tiempo para escribir y en cierta parte tampcoo me da la cabeza para sacar inspiracion, cosa que me pone triste ya que quiero acabar de una buena forma este fanfic ya que le tengo una gran cariño personal.
Espero que cuando lleguen las navidades pueda lograr sacar algo más de tiempo pero 2° de bachillerato me tiene frita, espero que lo entendáis...
Bueno, ya que estoy por aquí, ¿Os gustó el capítulo? ¿Como se encuentran? Espero que estéis bien ^^.
Nos vemos pronto!! //
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.____ᴇʀᴇs ᴍɪ ᴍᴇᴊᴏʀ ᴀᴍɪɢᴏ (Héctor Helio/Rococo Urupa y tú)
Fanfiction𓆩ᴄᴏɴᴛᴇɴɪᴅᴏ ʜᴇᴛᴇʀᴏsᴇxᴜᴀʟ𓆪 𓆩ɴᴏᴍʙʀᴇ ᴅᴇ ʟᴀ ᴘʀᴏᴛᴀɢᴏɴɪsᴛᴀ ᴅᴇʟ ғᴀɴғɪᴄ: ʟɪʟʏ𓆪 𓆩ғᴀɴғɪᴄ ᴀᴜ́ɴ ᴇɴ ᴘʀᴏᴄᴇsᴏ‼️𓆪