And if you don't mind can you tell me all your hopes & fears
And everything that you believe in
Would you make a difference in the world
I'd love for you to take me to a deeper conversation
Cuando Jinsol cumplió veintiún años estaba ilusionada por conocer a su alma gemela. Casi todas las noches se las pasaba viendo su muñeca esperando por la tan ansiada marca que la conectaría con su otra persona.
Han pasado dos años y, para sorpresa de los demás, ella sigue esperando. Aunque no con el mismo entusiasmo, Jinsol de vez en cuando mira su muñeca y siempre termina resoplando cuando solo su piel blanca puede verse. Ninguna marca, ninguna mancha.
—¿Y si no tengo a alguien? —ella le dice a la nada. Las noches son la parte del día que usa para hablarse a sí misma en el silencio de su apartamento. —¿Puedo ser uno de esos casos?
A lo que ella se refiere es a los casos excepcionales en donde no tienes un alma gemela predestinada y, o puedes terminar solo o ir buscando quien podría ser para ti. Los dos tiene riesgo ya que puedes dañar tu corazón con el paso del tiempo.
Jinsol tiene miedo y también está molesta. ¿Por qué ella tiene que pasar por esto?
—No te desanimes, Jinsol. Vamos, te ayudaré a superarlo. —dice Haseul su gran amiga cuando ve que pasa el tiempo y Jinsol sigue deprimida. —Hay un lindo acuario que ha abierto no hace poco. A ti te gusta el mar, ¿no? Vamos, ya he comprado las entradas.
Jinsol no quiere salir de casa, pero, es el acuario a donde van y ella ama los peces. Además no puede decirle que no a Haseul.
En menos de lo que pensaba estaban entrando al gran acuario. Haseul la guiaba como si hubiera ido varias veces y Jinsol poco a poco se iba adentrando en la belleza que el mundo marino le ofrecía. Ama ver a los peces de varios colores a los tiburones de varios tamaños y a los lindos pinguinos que caminaban por su lugar.
Todo es hermoso, sin embargo, en el área en donde se está quedando más tiempo es en el de las medusas. Cada una es especial y tiene un color diferente, es fascinante. Sin embargo, no hay mucha gente apreciándola y Jinsol no lo entiende.
—Son hermosas, ¿no? —Jinsol siente la presencia de alguien a su lado, ese alguien dijo esas palabras que hicieron que Jinsol alejara sus ojos del estanque que guardaba aquellas hermosas criaturas.
Jinsol posa sus ojos en una chica no más alta que ella, cabello negro, contextura delgada la cual está ahora mirando al estanque. Jinsol se queda unos segundos mirándola antes de contestar. —Sí, lo son.
—¿Sabías que son 95% agua? Su cuerpo es prácticamente suave. Aún así, son letales. —la pelinegra dice y Jinsol asiente. No sabía esa información. —Han vivido por miles de años y aún sigue aquí, son impresionantes y me hacen preguntar qué más cosas hay en el fondo del mar.
—¿Te gusta el mar? —Jinsol pregunta y de repente la peliengra se voltea y atrapa su mirada. Sus ojos son negros y brillantes y su sonrisa en sincera.
—Lo amo. —ella dice y luego coge una manga de su hoodie negro y la levanta revelando algo que dejó a Jinsol boquiabierta.
En la muñeca de la pelinegra no había nada, no hasta que la luz de los estanques hicieron que una imagen, la de una media luna, apareciera.
Jinsol lo había leido, esa es una marca especial. Poca gente la tenía y si eras portadora de esta no solo te llevaba a su alma gemela, sino posiblemente a la persona con la que tienes un vínculo más allá, una con la cual puedes trascender.
—No puede ser... —la pelinegra deja de sonreir y Jinsol se pregunta porqué y también porqué la está mirando debajo de ella.
Con cautela sigue su dirección y da un pequeño salto al ver que hay una pequeña luz emanando de su muñeca que gracias a las otras luces hace que se vean vario colores. No duele, pero Jinsol está curiosa. Ella extiende su brazo y hace que su muñeca quede expuesta no solo a ella, también a la desconocida.
Cuando la luz iba bajando y Jinsol pudo ver mejor todo estaba anonadada.
Una media luna brillaba en su muñeca.
—Eres... eres tu. —la pelinegra dice, faltandole el aire. —Después de tanto tiempo, al fin te puedo conocer —y Jinsol siente unos brazos alrededor de sus hombros y en vez de sentirse abrumada se siente en paz, como si esa calidez la transportara a otro mundo.
—Eres mi alma gemela. —Jinsol dice como un hecho y la pelinegra asiente. Jinsol en respuesta la abraza con más fuerza, dejando que su cabeza se acomode en el pecho de, en efecto, su alma gemela. —Eres real, no puedo creerlo.
—Soy real y tu tambien. —la chica dice y luego mira su marca. —Y somos especiales.
Jinsol terminó derramando un par de lágrimas de la emoción y del amor con el cual escuchó esas palabras.
Sí, tiene un alma gemela.
Un muy especial.
Jungeun...
Kim Jungeun ...
Kim Jungeun y Jeong Jinsol
De alguna forma, nuestros nombres combinan.
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LOONA DRABBLES & ONESHOTS
Fanfic• Inspirados en canciones, la mayoría de veces. • Las parejas comunes y las que no lo son tanto. [playlist de canciones en el link de mi perfil]
