Heejin miró su reflejo en el gran espejo de la sala de prácticas hasta que los cinco segundos de haber terminado la canción acabaron. Luego, cerró sus ojos y se dejó caer en el piso, su cabello corto tapando toda su cara.
Trataba de normalizar su respiración, pero era difícil porque hacer una coreografía de casi cuatro minutos unas tres veces sin descansos no era un viaje por un camino de flores. Ella sufría tanto como las demás chicas. Lo sabía con tan solo abrir uno de sus ojos y mirar a un lado para encontrarse con la imagen de Hyeju recostada en el hombro de Vivi, ambas respirando entrecortadamente, cada una con una botella de agua. Además, también tenía oidos y podía escuchar los quejidos de Jungeun y las quejas de Yeojin a Haseul porque no se movía de su estado desfallecido en una de las esquinas de la habitación.
—¿Lo hacemos otra vez?
Cierto, había una excepción en todo el grupo y esa era Ha Sooyoung.
Heejin no sabe si es porque Sooyoung ha estado por años en una academia de baile o porque su condición física era muy buena o simplemente porque nació con eso, pero de lo que sí está segura es que tiene celos.
Sooyoung estaba parada a su lado. Podía ver sus zapatillas de baile gastadas (sus favoritas) y luego la vió a ella. Su cabello rojizo en una cola baja, algo despeinada, gotas de sudor bajaban hasta tocar su mandíbula y sus leves abdominales flexionados por la actividad física que acababan de realizar. Ella también estaba respirando de manera irregular, pero su voz no estaba temblando y su sonrisa cerrada no se había esfumado.
Heejin tenía tantos celos de que Sooyoung se viera decente y no como un perro mojado (o sea ella) al terminar las sesiones de baile.
—Podemos hacerlo mañana, ¿no creen?
—Apoyo a Haseul, deberíamos de ir a descansar.
—Apoyo todo lo que tenga que ver con irme de acá.
Sooyoung soltó una sonrisa débil asintiendo a las palabras de Haseul y al de las menores del grupo que la apoyaban. La verdad era que ella también quería terminar la práctica del día, pero no quería descartar la posibilidad de volver a hacer la coreografía si es que alguna de las chicas aceptaba su propuesta. Ella es tan considerada.
No iba a dar la orden que se podían ir, porque ya estaba viendo como Chaewon cogía sus cosas, se despedía y salía por la puerta. Lo mismo con Jinsol, Yerim, Jiwoo... todas y cada una salieron levantando la mano en señal de despedida y la dejaron ahí, parada en medio de la sala de prácticas.
—Yo me tengo que quedar más tiempo.
Junto con Heejin quien aún seguía en el suelo, uno de sus brazos bloqueando las luces de la sala para poder mirarla mejor.
—¿La razón? —Sooyoung se sentó en cuclillas, dirigiéndose a Heejin y moviendo la cabeza de lado al ver como la castaña se sentaba con las piernas cruzadas, mirándola de frente. —No me digas, ¿quieres pasar tiempo conmigo?
—¿Piensas que todo se trata de ti? —Sooyoung solo tuvo que sonreír de lado ante tal pregunta para lograr que la menor volteara los ojos y la hiciera caer hacia atrás con el empujón que le dio. —Levántate rápido, tenemos una coreografía que hacer.
—Tu fuiste la que me hizo caer.
Sooyoung y Heejin, a ambas se les dio la responsabilidad de hacer una coreografía de la segunda canción promocional. Es un gran reto, pero lo aceptaron. Querían hacer ver a la compañía que, así como ellas podían dar un buen aporte al concepto del grupo, sus demás compañeras también.
En un futuro querían hacer un regreso con un concepto pensado por las doce. Era un sueño que podía ser alcanzado empezando desde donde estaban: solo ellas dos, en la sala de prácticas y con varias hojas en donde estaban escritos los pasos pensados.
ESTÁS LEYENDO
LOONA DRABBLES & ONESHOTS
Hayran Kurgu• Inspirados en canciones, la mayoría de veces. • Las parejas comunes y las que no lo son tanto. [playlist de canciones en el link de mi perfil]