*Kim Lip/ Chuu & Heejin*

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-Realmente quiero pelear con alguien ahora. -fue lo primero que Jungeun escuchó viniendo de Jiwoo cuando pasó la puerta de su estudio.

-Buenas tardes para ti también.

-No estoy de humor, Kim. -parecía que humo salía de su cabeza. Preocupación ahora llegaba a Jungeun quien hizo girar su silla para prestar toda su atención.

-¿Qué sucede?

-Es... es una cosa, nada más. -Jiwoo dijo por lo bajo de brazos cruzados.

-¿Puedes explicarlo mejor? -Jungeun se levantó y se dejó caer en el sillón al lado de la mayor. Colocó una mano en el brazo ajeno y lo empezó a acariciar. -Aunque, si es difícil de decir, lo entendería.

Jiwoo evitaba aquellos ojos marrones, mirando a cualquier otro lado.
Es verdad que había ido al estudio de Jungeun a quejarse y dar amenazas violentas, pero, ahora viendo la gran preocupación de su amiga por lo que le había pasado se sentía mal, porque, se había enojado por algo... ah, que no era para tanto ahora que lo piensa.

-Lo que pasa es que, Heejin-

-Ah, es eso. Dime, que te ha hecho esa chica. ¡No! No me digas, acaba de hacer una tremenda idiotez y ahora están peleadas. Yo sabía, ¡Yo sabía! Que ella se traía algo por eso no me cayó bien desde un inicio.

-No, Jungeun. -Jiwoo dijo con simpleza, agarrando su cabeza al tener que hablar para limpiar la imagen de su novia. -Analizando mejor la situación, yo fui la del problema.

Y allí le explicó, como hace no menos de una hora ella estaba con Heejin en su apartamento viendo una película y de repente le pregunta: ¿me querrías aún si fuese un gusano? Y claro, Heejin se sacó de onda y la miró raro para pasarse a reír y luego decir ¿por qué piensas esas cosas? Y eso fue un grave error, porque Jiwoo saltó del sofá y contraatacó el porqué con ¿por qué no? Y al final Heejin llegó a aceptar que sí la querría aun si fuera un gusano. Pero era demasiado tarde porque, según Jiwoo, ella no respondió rápido. Ella dudó.

Y por eso llegó donde Jungeun toda emputada.

-¿Es...es en serio? -Jungeun dijo mirándola sin poder creerlo.

Aún estupefacta pudo escuchar un golpe fuerte a la puerta y luego varios más de manera rápida, después el timbre y eso fue suficiente para enloquecer.

-¿Quién jode tanto? -pregunta dando pasos largos hacia la entrada y, ¿quién era? Jeon Heejin junto con un ramo de flores y una caja de dulces.

-Kim Jiwoo, sabes que te amaría aun si fueras un gusano, una cucaracha o un grillo ¡o cualquier insecto que te puedas imaginar! Todos los días iría a ver cómo estás e investigaría en internet lo que podrías comer o a saber cuál es el mejor ambiente para ti. Porque te amo, en serio lo hago.

Jungeun siente que alguien sorbe su nariz a su lado y era Jiwoo quien además tenía lágrimas en sus ojos. La pequeña llorona se lanzó a Heejin hasta que esta la atrapara.

Las flores y los dulces terminaron en el suelo al igual que las ganas de vivir de Jungeun porque, que par de dramáticas.

-Bueno, creo que- -se detuvo al ver que ahora esas dos se estaban besando a más no poder, fuera de su apartamento, en pleno pasillo. -Sí, creo que mejor cierro la puerta -y lo hizo, no sin antes coger la caja de chocolates.

LOONA DRABBLES & ONESHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora