Hyukjae lo pierde todo tras un "error", cree que jamás podrá recuperar su antigua vida pero el destino le pone en el camino a Donghae, gerente de una tienda de repostería reconocida quien está dispuesto a ayudarlo a rehacer su vida.
»Género: amor, d...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Donghae comenzó a fruncir el ceño, estaba revisando el libro de contabilidad de otra sucursal y algo no le cuadraba, mando a llamar a Yesung quien llegó de inmediato.
—¿Crees que puedas revisar esto? —Le extendió el libro.
—Claro, Hae. —Dijo gustoso tomando el libro y saliendo. Hyukjae lo miró detenidamente, se paró de su lugar y se acercó a él poniendo una mano en su cabeza.
—¿Todo bien? —Le preguntó preocupado, Donghae soltó un suspiro para girar su silla y abrazar el torso de Hyukjae.
—Todo depende de lo que diga Yesung. —Le dijo, Donghae cerro sus ojos aspirando el aroma de Hyukjae, en las últimas dos semanas después de que formalizaron solía abrazarlo mucho y que el ahora su novio acariciará su cabello.
—Sé que lo vas a resolver. —Hyukjae acaricio su sedoso cabello negro tratando de no despeinarlo.
—Gracias, Hyukkie. —Se separó para voltear hacia arriba y sonreírle. Hyukjae le dió un beso en la frente y regreso a su lugar.
Seguían en la misma dinámica, ambos eran cariñosos pero solo en privado. A Donghae le fascinaba ver cómo con él era tan natural el tacto, Hyukjae no parecía molestarle las muestras de afecto con él.
Yesung llegó tres horas después con una cara no agradable, supo que estaba en lo correcto.
—Hae, están desviando dinero. —Le dijo después de una serie de explicaciones. —Si las cuentas son correctas que lo son porque yo las hice. —Yesung alardeó. —En los últimos seis meses se han robado una cantidad de medio millón de dólares. —Le dijo preocupado.
—Gracias, le avisaré a mi padre y mañana iremos. —Donghae le dijo con una sonrisa forzada.
Después de eso, Donghae estuvo en llamadas y coordinando una junta para ir a la otra sucursal. Su rostro lucía evidentemente preocupado y se sentía estresado, Hyukjae comenzó a ocuparse de su trabajo habitual cosa que agradeció demasiado.
Esa noche llegaron a las 12 a su casa, Donghae estaba tan agotado que no quiso comer y se fue a habitación y se tiró sobre su cama. Hyukjae entró tras de él y se sentó a su lado.
—Ve a cambiarte y duerme, mañana tendrás otro día pesado. —Le dijo Hyukjae mirándolo.
—¿Puedes dormir conmigo hoy? —Preguntó Donghae con un puchero.
—Esta bien, niño bonito. —Le dijo con una sonrisa. —Iré por mi pijama. —Se acercó para dejar un pico en los labios y salió cruzando el pasillo.
Trato de controlar su desvocado corazón, sería la tercera vez que dormía con él pero está vez era diferente porque ya eran novios así que se cambió y nervioso se adentro a la habitación principal donde Donghae estaba acostado y tapado revisando su celular.
