🧁 S i e t e 🧁

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Cuando llegó el cuarto mes desde que se había ido de su casa y tres meses desde que empezó a vivir con Donghae se dió cuenta de algo, su estilo de vida había cambiado lo suficiente para saber que ahora se sentía más libre y feliz. Sin la presión constante de sus padres de ser el hijo perfecto, sin tener que escuchar de casarse con una mujer pero sobre todo, amar su trabajo.

Él jamás había querido ser administrador pero por ordenes de su padre no tuvo más remedio que resignarse y hacerlo, era frustrante tener que levantarse e ir a la empresa y trabajar en lo que no le gustaba pero ahora se levantaba a las 5 de la mañana contento por otro día más.

Poco a poco comenzó a adaptarse a los ideales de Donghae y comprendía el porqué era tan amable con sus empleados pero sobre todo, Donghae se había hecho un amigo genuino, ahora entendí la diferencia entre aquellas amistades que solo lo buscaban para salir de fiesta y él pagará todo a la amistad que sabe cuál era su comida favorita y como le gustaba su café por las mañanas. A este punto, sabía que su vida había mejorado demasiado y ya no se sentía solitario y esperaba ya no estarlo nunca más.

—¿Puedo preguntarte algo? —La voz de Donghae lo sacó de su trance, habían regresado del trabajo y ahora cenaban.

—Ya lo hiciste. —Le dijo sarcástico ganándose un golpe con una bolita de papel. —Dime

—¿Qué pasó con tu familia? —Se atrevió a preguntar, Hyukjae se tenso por un segundo pero después suspiro y le dió un sorbo a su café. —Quise respetar tu espacio pero me preocupa un poco verte decaído.

—Fue una discusión, cometí un error que mis padres no van a perdonar a menos que regrese y me disculpé. —Relato Hyukjae.

—Pero tú no sientes que que sea un error, ¿verdad? —Le preguntó Donghae mirándolo fijamente.

—¿Por qué lo dices?

—Si lo pensarás igual quizá te hubieras disculpado desde hace mucho. —Observo Donghae.

—Si, creo que tienes razón. —Se limitó a decir.

—¿Quieres decirme que fue lo que hiciste?

—No, no quiero que me veas diferente...—Dijo mirando a la nada, se podía palpar que le ocasionaba a Hyukjae. —No quiero que me veas igual que todos.

—Te abrí la puerta de mi departamento y te di un lugar en mi trabajo aún sabiendo a que familia pertenencias. —Donghae recalcó aquello. —Y no me ha importado en lo mínimo considerarte mi amigo, no creo que lo que hayas hecho me haga cambiar de opinión.

—Algún día te lo diré. —Hyukjae tomó lo último de su café, se paró y lo dejo en el fregadero. —Buenas noches, Hae. —Se despidió, camino por el pasillo y entro a su habitación.

Sabía que Donghae no lo juzgaría pero no quería que las cosas se tornaran incómodas entre ellos, después de todo era un homosexual reprimido viviendo con un chico que aparentaba ser heterosexual pero de eso no estaba seguro, jamás había visto a Donghae salir a citas ni siquiera coquetear con alguien.

Se recostó en su cama, era gracioso como su habitación era mil veces más pequeña que la anterior y aún así la sentía más reconfortante, sentía más calidez y eso lo hacia sentir mejor.

—¿Terminaste con eso? —Preguntó Donghae en punto de las tres de la tarde.

—Si, solo falta meterlos a la carpeta. —Dijo, agradecía que Donghae no haya tocado aún el tema de hace una semana.

—Deja eso y acompáñame. —Se paró con una amable sonrisa, esas que solo Donghae sabía dar. Obedeció y lo siguió, ambos bajaron a la cocina pero no entraron, se quedaron detrás del cristal de vidrio donde se veía todo lo que hacían adentro.

Lonely Cupcake »EUNHAE« TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora