É𝖝𝖙𝖆𝖘𝖎𝖘

𝓒𝓾𝓪𝓷𝓭𝓸 𝓷𝓪𝓭𝓲𝓮 𝓿𝓮

Josephine

Por primera vez es mucho tiempo no me quiero morir, de hecho, siento una sensación de felicidad que no puedo explicar ¿Con que así se siente estar enamorada? Había leído muchos, libros, escuchado muchas canciones, visto muchas películas de amor romántico, pero jamás lo había experimentado, creí que era algo inventado por el capitalismo para vender productos en San Valentín, además ningún muchacho me había llamado la atención antes de Hero, así que todo esto es relativamente nuevo para mí.

Creo que acabo de perder la cabeza completamente. Hoy en la mañana por ejemplo me levanté más temprano de lo habitual, para intentar verme más decente para ir al instituto, por lo regular me importa un rábano mi aspecto físico, pero hoy tuve la inquietud de mejorarlo, así que me puse un hidratante en el cabello con olor a frutilla dándole forma a mis ondas con los dedos, en los labios me puse un bálsamo sabor coco y me puse pendientes nunca uso pendientes decidí que hoy empezaría usarlos, ya que se ven lindos.

Al bajar a desayunar saludé a mis padres con una sonrisa en el rostro, hasta le di un beso en la mejilla a mi mamá, ellos me miraron algo confundidos ya que no había estado tan de buen humor desde hace mucho tiempo.

―Hoy nos levantamos felices he ―observo mi papá con una sonrisa en el rostro, posteriormente dándole un sorbo a su tasa de café.

―Supongo que si ―Me encogí de hombros.

― ¿Y a qué se debe esa felicidad? ―Inquirió mi madre observándome con el mismo semblante frio de siempre.

― ¿Acaso se debe de tener algún motivo específico para ser feliz? Siempre me dices: Debes de agradecer a nuestro señor por darnos otro día de vida, techo y alimento en la mesa ―Digo mientras le señalo mi cuenco de cereal ―. Estoy feliz porque tengo todo lo que necesito Margaret, sé que vas a extrañarlo, pero hoy no habrá pelea matutina entre nosotras, porque me levanté feliz ―Sonreí.

― ¡Gracias al cielo! ―Exclama mi padre con emoción ―. Por primera vez en mucho tiempo podre desayunar sin gritos.

Mi madre se queda callada por un instante analizando la situación.

―Bien, me alegra que al fin estés madurando ―Dice al fin.

Al llegar al instituto me dirijo a clase de historia emocionada por ver a Hero, al entrar al salón me sorprende que no haya llegado aún, siempre llega antes que yo, talvez se quedó dormido esta vez, bien no debo de preocuparme sé que pronto entrara por eso puerta, tome asiento donde suelo sentarme junto él. Pasaron cinco minutos, pasaron diez minutos y la Ester comenzó la clase. Mientras la Ester explicaba la caída del imperio Otomano, no pude evitar pensar en mil y un razones por las cuales Hero no habría entrado a clases a primera hora, que por cierto es la única que tenemos juntos, primero me preocupe pensando que talvez estaba enfermo, me dio dolor de estómago el simple hecho de pensar que talvez tuvo problemas con el idiota de su padrastro, me enferma el simple hecho que tenga que sufrir tanto a causa de ese horrible hombre, pero después decidí pensar que se quedó dormido ya que esta última opción me deja más tranquila.

El resto del día no lo vi, pero estuve pensando en él mucho, realmente mucho, y no sé si está bien. Cuando llego la hora del almuerzo me senté con Blue en nuestra mesa usual de la cafetería. Blue me hablaba de porque nadie de debería usar sandalias con calcetines, tenía argumentos buenos, pero me distraje cuando vi entrar a Hero con su grupo de amigos del equipo de futbol.

Entorne los ojos.

―Con que si vino ―Se me escapo en voz alta.

― ¿Hero? ―Pregunto Blue.

―Sí, Hero ―Tomé una manzana sujetándola con fuerza después le di una mordida ―. Esta ignorándome.

―Siempre lo hace ―afirmo Blue como si fuera obvio ―. No me lo tomes a mal, pero en público nunca hablan cariño, solo los he visto hablar como dos veces y una de ellas fue después de la fiesta de Tyler, y no había gente alrededor.