Blome | Edluca

Dance with you

-¿Qué se supone que haga contigo?-

Edgar se cruzó de brazos, mirando con el ceño fruncido al pequeño conejito. Ratio lo observó por unos segundos, luego tomó el zapato que estaba a medio morder y salió del lugar rápidamente, Edgar no pudo hacer más que suspirar. El día de hoy, Blome iba a organizar una fiesta, una fiesta que se celebrará en conmemoración a los fundadores. Claro que Edgar ya tenía su atuendo; Golden Ratio, pero su pequeño conejo había mordido uno de sus zapatos. 

Edgar logró encontrar de nuevo al conejo, pero el zapato ya había sido destrozado, suerte que había previsto esta situación y había comprado un par extra. El pintor miró la hora, faltaba poco tiempo para que el inventor llegará, así que se apresuró en subir las escaleras y en ir a cambiarse los zapatos. Claro que mientras que se los ponía, alguien llamó a su puerta.

-¡Ya voy!-

Gritó el pintor desde el segundo piso, colocándose el zapato a medias y bajando torpemente las escaleras. Al abrir la puerta, se pudo encontrar al inventor en un hermoso conjunto; Paranormal detective.

-¡Hola, Eddie!-

Saludó el inventor, mirando de pies a cabeza a Edgar. Edgar hizo lo mismo, ¿No era ese atuendo demasiado para una simple fiesta?

-Luca... Se te ve genial, pero, ¿No es demasiado?-

-Eddie, esta fiesta no es cualquier cosa, es una fiesta creada para agradecer los descubrimientos de nuestros fundadores, todos visten su mejor traje para esta ocasión-

Explicó el inventor, guiñándole el ojo al pintor, quien no pudo evitar ruborizarse por aquella pequeña acción de Luca. La verdad, Edgar sabía que era una gran fiesta, por eso optó por ponerse el traje tan llamativo "Golden Ratio" Lo consideraba lo suficientemente elegante para una fiesta de esa clase. Edgar asintió, saliendo de la casa, sacando con delicadeza sus llaves y cerrando la puerta. Pero al salir, por alguna extraña razón, seguía sintiéndose observado, como si alguien lo acechara en la oscuridad. El pintor miró a Luca, cada vez que estaba con él, se sentía seguro, así que llevó su mano hasta el punto en donde estaba la de Luca, rozando ambas manos. Luca se sorprendió ante la acción, más, al girarse hacía Edgar, pudo notar el nerviosismo de él, así que tan solo se limitó a tomar la mano de Edgar con suavidad, entrelazando sus dedos y sonriendo a su vez. Edgar miró a Luca, Luca siempre se veía tan seguro de si mismo, como si no le tuviera miedo a nada. Mientras que Edgar siempre se había considerado un poco miedoso, más, esta vez no tendría miedo, ya que estaba Luca con él, y eso era todo lo que necesitaba para ser valiente.

Al llegar a la fiesta, Luca le abrió la puerta a Edgar, cediéndole el paso al chico para que este entrará primero. Edgar hizo una pequeña reverencia con la cabeza y con paso desconfiado entró al lugar. Luca entró justo detrás de él, tomándole nuevamente la mano a Edgar y llevándolo a una de las mesas en donde estaban Andrew, Victor y Eli. Al parecer, la fiesta aun no comenzaba, ya que no había música, pero estaba a punto de comenzar, ya que los focos estaban apagadas, solo quedaban las pequeñas luces para iluminar a los presentes, las típicas luces que te iluminan en los salones de fiesta cuando no hay casi nada de luz. 

-Buenas noches, Luca, Edgar, que bueno que vinieron-

Los saludo el vidente, quien portaba un elegante traje; Lunar Phase. Edgar dirigió su mirada a su mejor amigo, notando lo bien que iba vestido, su cabello rubio iba de la mano con su conjunto, sinceramente, el vestuario le quedaba de maravilla; paperboy. Mientras que Andrew iba con un traje tan blanco como su pálida piel, sinceramente le quedaba de maravilla; Mural conservator. La verdad es que todos en esa fiesta iban realmente elegantes, pero lo que él quería antes que nada, era agradecerle a Victor por el diario que le había dado. Soltó la mano de Luca y se dirigió a la silla vacía a un lado de Victor, él cual lo recibió con un dulce saludo. El pintor se sentó a su lado y lo miró un momento.